Los Warriors se imponen sin misericordia
Golden State ganó por 126-85 a los Rockets de Houston para tomar ventaja de 2-1 en la Final de la Conferencia Oeste
Stephen Curry recuperó su ritmo ofensivo al marcar 35 unidades, con cinco triples, atacando constantemente a James Harden para ayudar a que los Warriors de Golden State enviaran un mensaje en la segunda mitad con un aplastante triunfo ayer 126-85 (una diferencia de 41 puntos) sobre los Rockets de Houston para tomar ventaja de 2-1 en la Final de la Conferencia Oeste.
Kevin Durant añadió 25 puntos, seis rebotes y seis asistencias, mientras que Draymond Green descolgó 17 tableros junto a sus 10 tantos y seis asistencias.
Los Warriors llegaron a 16 triunfos de Playoffs consecutivos como locales, para rebasar la marca de 15 que impusieron los Bulls de Chicago entre el 27 de abril de 1990 y el 21 de mayo de 1991.
Harden finalizó con 20 puntos y nueve asistencias, y Chris Paul sumó 13 y 10 rebotes. La dupla se combinó para encestar apenas 12 de 32 disparos.
Después del medio tiempo, un Curry encendido sentenció a los visitantes. El Jugador Más Valioso en 2015 y 2016 pasó de un 3-11 en tiros de campo a un 10-18 gracias a siete canastas consecutivas para ponerse con 27 puntos tras el tercer periodo.
La magia estaba de vuelta en la Oracle Arena, que celebró cada canasta de su jugador como si del título se tratara.
Con esta exhibición y gracias a un parcial inicial de 10-0, los locales estiraron su renta hasta una máxima de 28, que acabó resultando definitiva.
En la segunda mitad, los Warriors lograron 78 puntos contra los 48 que los Rockets concretaron en los dos últimos cuartos.
El cuarto partido de la serie se disputará mañana, también en la Oracle Arena, casa de los actuales monarcas de la NBA.