Como el Ave Fénix

Tigres y Monterrey no siempre han sido lo que ahora son. Si bien este par de escuadras domina por completo la actualidad del futbol mexicano, también es cierto que ambos equipos han pasado por temporadas difíciles, en las cuales perdieron o estuvieron a punto de perder la máxima categoría de nuestro balompié.

Hoy Rayados y auriazules son las dos escuadras más caras de la Liga. Sus plantillas son en realidad imponentes y no hay quién pueda contrariar el hecho de que los dos equipos merecen estar instalados en la Gran Final del Apertura 2017.

Sin embargo, a pesar de todo lo anterior, la historia tiene memoria y aquellos pasajes de la carencia regiomontana siguen presentes en el recuerdo colectivo del futbol azteca. Aquí presentamos los últimos cuatro pasajes tortuosos del balompié regio.

TRAGOS AMARGOS

Monterrey, Verano 1999
Hace 18 años Monterrey no era un club de futbol tan estable como lo conocemos ahora, sino más bien un equipo inmerso en serios problemas fiscales y legales que también trascendieron a lo deportivo.

Los resultados negativos de los torneos pasados habían puesto a “La Pandilla” en una situación muy comprometida, pues el 9 de mayo de 1999 jugaron contra los Camoteros del Puebla para evitar el descenso a la división de plata del futbol mexicano.

Era la Jornada 17 de aquel Verano. El escenario fue el Tecnológico de Monterrey, lugar en donde los poblanos buscarían sentenciar a unos albiazules que habían mantenido la categoría durante 39 años seguidos.

Aquella tarde Puebla estaba obligado a ganar y a Monterrey le bastaba un empate para quedarse en Primera. Entonces, debido a esto, el éxtasis y el júbilo inundaron el Tec gracias al gol de la ventaja que marcó Sergio “Alvin” Pérez. A la postre los Camoteros lograrían empatar, sin embargo el 1-1 final sentenció a “La Franja” y le dio vida a Rayados.

Monterrey, Verano 2000
Un año después de haberse salvado frente a Puebla el fantasma del descenso todavía seguía rondando a los Rayados; sin embargo, en esta ocasión su salvación no tendría que llegar rodeada de tanto dramatismo, sino que Monterrey pudo eludir su posible descenso con cierta comodidad.

Un desempeño regular en el Verano 2000 fue suficiente para que los del Cerro de la Silla pusieran tierra de por medio entre ellos y Toros Neza, equipo que también estaba inmerso en el problema del descenso.

Aunque en la tabla general Monterrey sólo superó por un punto a Toros (21 y 20, respectivamente), en la tabla porcentual Rayados sí se impuso con autoridad al cuadro mexiquense, pues mientras los albiazules contabilizaron un total de 114 puntos, Neza apenas sumó 105 unidades al final del torneo.

De esta manera fue como Monterrey vivió su último semestre de terror en el futbol mexicano. Poco más de 17 años después, está inmerso en el duelo por el máximo título del balompié nacional.

Tigres, Verano 1996
El 24 de marzo de 1996 es una fecha que a pesar de los años sigue muy presente en la memoria colectiva de la Sultana del Norte. Lo es porque ese día, en plena edición 51 del Clásico Regio, Monterrey le dio el último empujoncito a Tigres para que se fuera a la división de plata del futbol mexicano.

Tigres venía arrastrando la cobija desde torneos atrás y para colmo de su desgracia, el juego decisivo por su permanencia tendría que ser frente a su odiado rival, los Rayados de Monterrey.

Omar Arellano abrió el marcador, sin embargo Monterrey en cuestión de minutos anotó el empate por cortesía de Sergio Verdirame.

Poco después, otro gol de gran manufactura de Luis Miguel Salvador decretó la sentencia de la Universidad Autónoma de Nuevo León. Como agravante del dolor auriazul, en el “Volcán” comenzó a sonar de manera casi burlona la canción de “Se fue”, letra que tres años atrás se hizo popular en la voz de la cantante italiana Laura Pausini.

Tigres, Clausura 2009
Luego de 13 años de haber probado la amargura de un descenso, Tigres volvió a estar al filo del precipicio. Y es que para la Jornada 17 del Clausura 2009, los felinos llegaron con la obligación de ganar para no meterse en un apuro mayor.

Los Rayos tendrían que medirse al América y Tigres haría lo propio contra Monarcas Morelia. La ecuación era clara: en Necaxa precisaban de un triunfo que se combinara con la derrota o empate de Tigres. Sin embargo, la suerte no acompañó al cuadro rojiblanco.

En aquel partido, América llegaba con aspiraciones de Liguilla y no tuvo empacho para derrotar a su “hermano menor”. Con este resultado poco importó que Tigres no haya podido ganar a la monarquía, pues los hidrocálidos descendieron en automático.

Este fue el último pasaje penoso de unos Tigres que a partir de la llegada de Ricardo Ferretti se han acostumbrado a estar en los primeros planos del futbol mexicano. Hoy ya son el equipo más ganador de Nuevo León en cuanto a la Liga y suman tres Finales en fila.

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