Champions League: Real Madrid a matar o morir
El conjunto merengue se jugará su pase a los Octavos de Final; de ganar, podría ser líder
Castigado por su irregularidad ante los rivales, en teoría, más modestos del grupo, el Real Madrid encara un partido catalogado por todos como “Final”.
Dependiendo de sí mismo ante el Borussia Monchengladbach en una cita que le puede permitir pasar a Octavos de Final como primero, caer al desprestigio de la Europa League o la deshonra de la primera eliminación en la Fase de Grupos de la Champions.
Es el único grupo en el que a falta de una jornada ninguno de sus integrantes está clasificado y todos tienen opciones de pasar de ronda.
Acostumbrados a partidos que deciden títulos, especialistas en caminar sobre el alambre, las citas grandes son las que motivan a los hombres de Zinedine Zidane.
Demostraron en el momento más bajo del técnico francés, con su futuro en juego en caso de descalabro histórico, que están a muerte con Zidane.
Alejado del poder que reivindicó al Real Madrid como rey de Europa, con cuatro conquistas de Champions en cinco años, los últimos pases madridistas en la competición han rebajado el prestigio. Sin superar Octavos de Final las dos últimas ediciones, acusando cada ausencia de su capitán Sergio Ramos, que regresa a tiempo para la gran cita, y una mala racha de cuatro derrotas y un empate en sus siete últimos compromisos europeos.
Dos triunfos ante el Inter de Milán y el empate postrero en Alemania, le permiten jugarse todo a una carta y, pese a las lesiones, el mensaje que sale desde dentro es positivo. Disputarán el duelo como una “Final”, palabra que se repite desde Casemiro a Zidane pasando por los directivos cuando toman la palabra. En la Fase de Grupos, sí, pero una Final porque está todo en juego en 90 minutos. El objetivo acabar líder de grupo y evitar los “cocos” de Octavos que provocaron las últimas eliminaciones.
A la batalla llegan Ramos y Dani Carvajal. Zidane puede contar con toda su zaga, pero pierde a jugadores de área. Solo dispone de Karim Benzema, obligado a reencontrarse con el gol.
El Borussia Monchengladbach llega a Madrid con la posibilidad de clasificarse por primera vez en su historia a la siguiente fase de la Champions, reeditando su pasado glorioso en los setenta en la vieja Copa de Europa y la desaparecida Copa de la UEFA.
Al Gladbach le basta un empate, un resultado que ha tenido con una frecuencia mayor de lo que hubiera querido a lo largo de esta temporada en la Bundesliga .
JL