* Más VAR
Pues sí: el VAR da y quita…
Ya se va haciendo costumbre que el empleo de los recursos tecnológicos para aclarar lances que antaño se dejaban “a criterio del árbitro”, no sólo adquiere un carácter protagónico en el desarrollo, sino incluso llega a ser determinante en el resultado de los partidos…
Pocos encuentros, en efecto, se desarrollan sin que el VAR sea consultado una o varias veces por el silbante en turno. Pocas conferencias de prensa se dan, después de los partidos, sin que entrenadores o jugadores aludan a discutibles decisiones de los silbantes —especialmente si fueron adversas para sus intereses— tras consultar el monitor… o sin que se lamente que el procedimiento no se limite a goles, expulsiones, penalties o eventual confusión de identidades por parte del árbitro, sino se haga extensivo a otras acciones que eventualmente pueden cambiar el resultado de un cotejo.
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En la jornada más reciente del futbol mexicano, concretamente, quizás el caso más notorio fue la expulsión de Jorge Sánchez, del América, decidida por el árbitro Adonaí Escobedo, apenas en el primer minuto del partido contra Ciudad Juárez, la noche del sábado en el Estadio Azteca…
Sancionado con tarjeta amarilla en primera instancia, el lance, tras la correspondiente revisión, redundó en tarjeta roja y alteró significativamente el trámite que en circunstancias normales quizás habría tenido el encuentro. En 10 minutos, los fronterizos ya ganaban por 1-0; en 20, por 2-0. Y aunque entre la reacción de los pintos y el conformismo de los colorados las cosas se acomodaron para que el América acortara distancias, la historia se resolvió como era natural en un partido en que las fuerzas están desiguales, no propiamente por nominales jerarquías, sino porque de un lado había diez y del otro once jugadores. (En esos casos, como ya se sabe, aplica el consabido “Llegaron los sarracenos / y nos molieron a palos, / que Dios ayuda a los malos… / cuando son más que los buenos”).
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En San Luis, el VAR participó en tres de los cuatro goles del San Luis-Guadalajara, anotados por la vía del penalti tras las correspondientes consultas de Fernando Guerrero. En el Estadio Jalisco, una inexistente mano sancionada con tiro libre por Jorge Isaac Rojas permitió al Atlas abrir el marcador ante Tijuana.
Sin el VAR, pues, muchas historias habrían tenido desenlaces muy diferentes a los que constan en actas.