La magia secreta de Perú
Desde la fascinante ciudad de arequipa hasta el espectacular oasis de huacachina, hay mucho por descubrir en este país
Nación de historia milenaria que no deja de reinventarse día a día, dueña de una vasta cultura y espectacular gastronomía, así como de escenarios naturales fascinantes. Así es Perú, un país fascinante que busca aumentar la llegada de viajeros mexicanos.
Quizás una de las primeras cosas que viene a la mente del turista que decide explorar esta nación sudamericana es conocer MachuPicchu, ¡y vale la pena! Pero además de esta mítica ciudad inca, hay mucho más por descubrir, como lo explica Ricardo Baraybar, subdirector de promoción del turismo receptivo de Promperú para este medio.
Para Baraybar, el mexicano encuentra en Perú varias similitudes que lo harán sentir en casa, pues “somos muy parecidos, dos pueblos hermanos, muy similares, pero cada uno tiene esa magia que lo vuelve único”.
Y “único” es una palabra que define bien a Perú, expone el subdirector. “Contamos con una cultura milenaria, gastronomía ya reconocida a nivel internacional y naturaleza exuberante con la Selva Amazónica, el desierto de la costa del Perú (el más seco del planeta) o la Cordillera de los Andes con sus grandes picos nevados”.
Y aunque Machu Picchu y Cuzco siempre serán dos imanes irresistibles para todo viajero, Baraybar pide abrir los ojos y el corazón a lo mucho que Perú le puede regalar a las almas inquietas.
Camino al Sur
El Titicaca es el lago navegable más alto del mundo, además de que sirve como frontera entre Perú y Bolivia.
Del lado peruanos encontramos la ciudad de Puno, una bella ciudad llena de folclor, danzas tradicionales y festivales culturales que garantizan todo el año algo para el viajero.
Es una buena base para recorrer la rivera del Titicaca y observar sus islas flotantes, construidas por las comunidades para aprovechar las riquezas que ofrece el lago.
También en el Sur de este país nos encontramos con Arequipa, la “Ciudad Blanca”, que le debe ese color por haber sido construida con rocas de sillar, que tienen esa tonalidad.
Llena de vida (de hecho es la segunda metrópoli más poblada de Perú), conserva diversas construcciones de enorme belleza y riqueza virreinal, como su catedral y la Iglesia de la Compañía, espléndido ejemplo del barroco peruano.
Maravillas visuales
Tras regodearnos la vista en Arequipa comenzamos a subir por la geografía peruana y llegamos al Cañón del Colca, el segundo más profundo del continente y desde el cual podemos avistar al majestuoso cóndor, cuyas altas abiertas tienen una envergadura de 3 metros, ¡impresionante!
Acercándonos al Centro del país, al Sur de Lima, llegamos a Ica. Si el lago y el cañón te asombraron, quedarás sin palabras ante el maravilloso desierto, que a pesar de su aridez está lleno de vida…y sorpresas.
Aquí encontramos el espectacular oasis de Huacachina, con sus aguas esmeraldas y circuncidado por palmeras. En los alrededores encontramos dunas inmensas que invitan a practicar desde sandboarding hasta pasear en cuatrimotos.
Un buen pisco para rematar
Pese a su ambiente desértico, en Ica encontramos una tierra fértil. En sus cercanías podemos comenzar la Ruta del Pisco, explorando los viñedos de los cuales se produce el pisco, la bebida nacional del Perú y que cuenta con denominación de origen controlada.
En la zona también hay hoteles que aprovechan el entorno para crear un ambiente acogedor en el cual reposar tras un viaje lleno de aventuras.
Hasta aquí, podemos ver como Perú es mucho más que Lima, MachuPicchu y Cuzco. Estamos ante una nación fascinante, de climas diversos y maravillosas experiencias, ¡y eso que solamente nos concentramos en la región Sur!
¿Cómo llegar?
Desde Guadalajara deberás tomar un avión a la Ciudad de México, que cuenta con una conexión directa con Lima, capital de Perú. Ya en Lima, puedes moverte a través de vuelos domésticos por este bello país.
Lo que debes saber antes de lanzarte a la aventura
Visa. No se requiere visado para entrar en Perú, aunque sí es necesario que tu pasaporte tenga al menos seis meses de vigencia al momento de entrar al país.
Dinero. La moneda es el sol. Un sol equivale aproximadamente a 5.50 pesos mexicanos a estas alturas del año, aunque vale la pena verificar el tipo de cambio antes de viajar.
Tiempo. El clima en Perú es bueno, aunque al ser un país de grandes dimensiones puede ser variado. Allá la temporada de lluvias va de enero a marzo, por lo que es el momento menos adecuado para visitar sitios turísticos al aire libre, como Machu Picchu.
CT