Artesanías mexicanas y el reto del mercado global
El Tratado de Libre Comercio de 1994 le abrió fronteras al talento nacional, pero también le trajo fuertes regulaciones
La entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio en 1994 y la apertura de más mercados para exportar, a nivel global provocaron, entre otras cosas, profundos cambios en el sector artesanal nacional.
Silvia Barboza, artesana de Tlaquepaque desde hace cuatro décadas, comentó que los requisitos para exportar hacia países como Estados Unidos se modificaron. Entre ellos, los procesos de elaboración y el evitar la utilización de ciertos materiales como el plomo, considerado dañino para la población, situación que se ha presentado desde hace varios años.
“Ya la Secretaría de Salud nos ha modificado eso, desde 1970 más o menos y hasta el día de hoy, nos han dicho que las piezas tienen que ser sin plomo, sobre todo por la cuestión mercantil de Europa y Estados Unidos que sí son más exigentes en cuestión del plomo. Cosas con plomo ya no las quería Estados Unidos”, recuerda.
Cirilo Badillo, artesano de Tlaquepaque desde hace 18 años y que se dedicó por su cuenta a la producción y venta de artesanías, consideró que las restricciones de uso de plomo no lo han afectado a él, aunque sí ha dejado de lado otro tipo de productos para elaborar artesanías como la anilina o las claras de huevo.
“Para los productos que son de ornato, no afecta tanto el plomo, ya que no va directamente al consumo de las personas. Yo desde que empecé a trabajarlo, lo he trabajado igual. Sí sé que antes se trabajaba con anilinas, con claras de huevo, pero todo ese tipo de trabajos ya no se utilizan”.
Al respecto, autoridades estatales han fomentado el dejar de usar plomo como uno de los materiales para la producción de artesanías.
En eventos realizados por el Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart), se ha dejado claro el objetivo para incentivar la producción y consumo de obras de alfarería elaboradas con esmaltes libres de plomo.
Se transforma el sector artesanal en Jalisco
El sector artesanal en Jalisco es uno de los más tradicionales para algunos municipios de la entidad, sobre todo, para municipios de la Zona Metropolitana de Guadalajara como Tlaquepaque y Tonalá en los cuales, hay bastante presencia de personas dedicadas a la producción y venta de productos artesanales desde hace décadas, ya que, en muchos casos, son tradiciones familiares que han heredado a las nuevas generaciones.
Por ello, es que, a lo largo de los años, el sector artesanal ha tenido un cambio, ya sea en la utilización de material para producir artesanías, la modificación de su proceso de elaboración, la reducción o aumento de ventas y el número de personas que se dedican al sector.
Silvia Barboza es artesana desde hace más de 40 años y con tradición familiar en la industria, ya que sus abuelos también se dedicaron a elaborar productos artesanales; consideró que el sector artesanal se ha visto obligado a adaptarse a los tiempos modernos y las nuevas exigencias del mercado, incluso, el internacional, al señalar que sus principales consumidores son los ciudadanos estadounidenses.
“Tuvimos que adaptarnos a los nuevos tiempos y a las nuevas exigencias para seguir vendiendo porque el mayor consumidor de nuestra artesanía es el norteamericano”.
Cirilo Badillo, también artesano desde hace 18 años y originario del municipio de Tlaquepaque, comentó que, en los últimos años, la irrupción del mercado chino ha tenido sus consecuencias en el mercado artesanal jalisciense, ya que ha provocado la reducción de las ventas debido a la diferencia de precios entre los productos.
“Básicamente el regateo: que llegara el producto chino y que el consumidor de aquí lo vea caro. Por ejemplo, cuando hago un nacimiento y lo doy un poquito más caro de lo que lo venden en algún lugar de China, pues se les hace caro”.
Aun así, las artesanías de la ciudad se posicionan como uno de los principales atractivos turísticos para los visitantes.
Piden evitar plomo en artesanías
La Secretaría de Salud del Gobierno Federal ha emitido recomendaciones por el uso del plomo en artesanías, al asegurar que genera problemas que afectan la sangre, el desarrollo neurológico, la audición y diversos órganos.
El plomo afecta sistemas, órganos y tejidos y sus efectos son variables: en los niños generalmente absorben una mayor proporción del plomo y su efecto en ellos es más severo que en los adultos porque están en un proceso activo de desarrollo.
El plomo obstruye procesos metabólicos, debido a su alto peso molecular y características químicas, por lo que causa algunas afectaciones a la salud, entre ellas, las siguientes:
- Alteración del sistema reproductivo y la conformación del feto.
- Alteración de la integridad de la membrana celular, el metabolismo de la vitamina D o la transcripción del ADN.
- Es tóxico para el riñón y el sistema circulatorio.
- Actúa sobre el cerebro y el sistema nervioso periférico, ya que daña la capacidad intelectual y la ejecución rápida de movimientos.
- Causa afectaciones al desempeño escolar y la capacidad de socialización en los niños.
- Algunas alteraciones metabólicas y celulares conducen a desarrollar anemia.
- Los efectos del plomo en la salud pueden ser agravados por la desnutrición: la absorción, retención y toxicidad se incrementan cuando hay deficiencias y bajas cantidades de calcio, hierro y zinc.
El plomo en el ambiente es altamente persistente y lo es también en el cuerpo humano depositándose, por años, primordialmente en los huesos. El plomo almacenado en los huesos y dientes puede volver a entrar a la circulación durante periodos de deficiencia de calcio, como el embarazo, lactancia y osteoporosis.
Fuente: Secretaría de Salud del Gobierno Federal.
Artesanos sugieren impulsar el mercado
El futuro de la artesanía tiene distintas posibilidades para crecer, aunque también para perder más su tradición debido a que cada vez hay menos personas que se dedican a trabajarla.
Cirilo Badillo sugirió que las autoridades brinden más apoyos para que haya más personas que se dediquen al sector artesanal y evitar se pierdan los talleres de elaboración.
“Yo pienso que debemos de dar un poquito más de apoyo, aparte de las personas que nos gusta la artesanía porque yo veo que la aprecian, yo veo que sí hay personas que les gusta, pero cada vez se está perdiendo un poquito más, ya sea por las familias que trabajan”.
Puso de ejemplo su caso: él no tuvo familia que se dedicara a la elaboración de artesanías, sino que se dedicó a su producción y ventas por su cuenta.
“En mi caso, no me viene de familia, de abolengo el trabajar la artesanía, a mí me gustó mucho porque yo lo puse, pero hay familias que vienen de abolengo y sus hijos ya están dejando de trabajar porque también ya no se vende igual, no pagan lo mismo”.
Silvia Barboza cree que es una profesión con buena remuneración, aunque ve más importante el empeño para dedicarse a este sector.
“El ser artesano siempre ha sido sinónimo de pobreza, pero no es así. Cuando a ti te gusta lo que tú haces pues no es ningún trabajo. Aparte de eso, es remunerable, sí te va bien, aunque obviamente hay que tener tu estilo, agarrar una línea que te identifique a ti como artesano”.
Consideró como positivo la creación de la licenciatura en Diseño de Artesanías por parte de la Universidad de Guadalajara para impulsar que más jóvenes se dediquen a la producción en el sector artesanal.
“Para los jóvenes lo veo muy importante que ya la Universidad de Guadalajara ya tiene la carrera de artesanías, entonces, para mí eso es muy importante porque quiere decir que ya se le está dando un poco más de presencia a nivel nacional e internacional que México ya tenga su escuela de artesanías”.
CT