Exponen libros de editoriales cartoneras
Literatura y consciencia ambiental convergen en esta muestra en varias bibliotecas
El Circuito Cartonero en la Red Bibliotecas arrancó con una exposición de libros de editoriales cartoneras (pequeños colectivos que elaboran libros artesanales, cuyas portadas son generalmente de cartón).
El Circuito Cartonero inició ayer 21 de mayo en la Biblioteca Dr. Delfino Gallo Aranda (ubicada en la calle Cuitláhuac 305, en el Centro Cultural Patio de Los Ángeles) y continuará en seis bibliotecas más. La última actividad se realizará el 30 de julio en la Biblioteca Central Estatal Prof. Ramón García Ruiz (situada en la calle González Ortega 679).
Las exposiciones permanecerán 15 días en cada sitio, donde también se impartirán talleres gratuitos de elaboración de libros cartoneros y al final de las siete jornadas las editoriales participantes donarán títulos para que éstos permanezcan en las bibliotecas del Estado.
Publicaciones únicas
Actualmente, en Jalisco existen nueve cartoneras y dos de ellas están por nacer, entre ellas están La Rueda Cartonera y Viento Cartonero, y son éstas últimas las que colaboran con la Secretaría de Cultura para hacer posible este acercamiento que tiene como objetivo dar a conocer cómo es que se elabora un libro de una editorial cartonera, que por sus características termina siendo único, a diferencia de los libros convencionales.
Se le llama editorial cartonera a los colectivos que elaboran de manera artesanal, y principalmente con cartón reciclado, libros de autores independientes que quieren dar a conocer su trabajo, y lo mismo se pueden encontrar publicaciones de ensayo, poesía y narrativa, sólo por mencionar algunos.
La tendencia de editoriales cartoneras nació en Buenos Aires, Argentina, hace ya 16 años a consecuencia de la crisis económica, y en Guadalajara desde hace diez. A la fecha se han fundado ya más de 120 editoriales en América Latina, Estados Unidos y Europa.
Reinventar y reinventarse a partir del libro es el objetivo de lo que también se puede llamar activistas de la literatura, que lejos del beneficio económico buscan fomentar la lectura, impulsar la creatividad y conseguir que sus publicaciones sean únicas.