Esta es la antigua cantina de Guadalajara donde estuvo José Alfredo Jiménez
Cuando "El Rey" la visitó ya tenía más de medio siglo de historia, y sigue con las puertas abiertas
En casi 126 años de historia caben muchas anécdotas, y más si se combinan con alcohol.
La sin rival, cantina en la calle Gante, esquina con la calzada Independencia, puede presumir de ser la más antigua de la ciudad, de haber sido fundada en las orillas y hoy estar en pleno centro, de haber sobrevivido a las explosiones del 22 de abril de 1992 y de haber recibido el aire puro del área de manantiales que ahora está cercada por asfalto y se conoce como parque Agua Azul.
Y también de haber recibido en su barra a José Alfredo Jiménez, el insigne compositor de muchas de las más clásicas canciones de la música ranchera, las que se graban una y otra vez por artistas de distintas generaciones, demostrando lo atemporal de su temática, sin importar que sus protagonistas sean caballos blancos o los caminos empolvados que conectaban Guanajuato.
Fue en la década de 1950 cuando la construcción de la Central Camionera —hoy con el antetítulo "vieja"— a unas cuadras de La sin rival propició que los cantantes que visitaban la ciudad se aliviaran del fastidio del viaje con un trago. Así, además de José Alfredo Jiménez el lugar fue visitado por figuras como Agustín Lara, Javier Solís y Pedro Infante.
Hay en La sin rival un gran letrero con la fecha 1898 para recordar a sus comensales la edad del sitio donde se encuentran. Las remodelaciones por las que ha pasado buscaron acentuar su edad, como un viejo orgulloso de las enseñanzas que le dejó la vida, y aunque son muy notorias, dan el efecto histórico deseado: una estética vintage, pero con la seguridad que no se trata de bardas de adobe que pudieran caer en cualquier momento. Eso sí, las puertas que cruzaron las estrellas de la época dorada de la farándula mexicana y la barra donde bebieron son las mismas, pues no han sido sustituidas desde su fundación.