Cultura

Ciencia y espiritualidad para incentivar el ejercicio de la autocomprensión

Alejandro Arroyo habló sobre su nuevo libro “La vida se cura con la vida. Ciencia y espiritualidad”

El músico chileno y doctor en ciencias médicas, Alejandro Arroyo, está lanzando el libro “La vida se cura con la vida. Ciencia y espiritualidad”, presentado por Amateditorial, un texto para el liberador proceso de la autocomprensión, un mapa certero en relación a la experiencia de realización más allá del sufrimiento, donde el concepto de felicidad, por ejemplo, cambia de persona a persona y se va modificando según también los procesos que afronta cada ser. Un buen ejemplo podría ser la pandemia, que ha permeado de manera distinta en cada individuo, donde invariablemente se da la introspección.

“El libro, que fue escrito precisamente en periodo de cuarentena, en el mes de mayo del 2020,  en el fondo tiene que ver con Deuteronomio 30:19, que dice, ‘escoge, pues, la vida’, esta cita bíblica  me impactó mucho en algún momento de mi vida, porque decidir la vida es una acto sublime producto de una experiencia tan preliminar como triste. Es la conciencia que nace en el fondo de la enfermedad y de la muerte, la conciencia que brota de cada uno y de nuestros padecimientos, esa conciencia que nace del error y de la equivocación para adentrarse en el plano pragmático de la voluntad humana”.

Alejandro Arroyo explica que la vida no solo hay que vivirla, hay que elegirla, “y ahí también nace la pregunta, ¿qué es la felicidad? ¿Es una especie de alegría…  de bienestar? Soy músico de profesión y doctor en medicina y comencé a preguntarme de dónde viene la felicidad, qué parte del cerebro la produce y que región en el fondo la sustenta. Y eso nos va a dar las luces para poder conocernos a nosotros mismos y poder tomar esta decisión para vivir la vida plenamente”.

En 1999 el maestro Alejandro Arroyo, quien ya era entonces un reconocido intérprete de guitarra clásica y director coral, sufrió un accidente automovilístico que lesionó su brazo izquierdo. “Perdí la facultad de mi brazo, estuve 10 años invalido con la imposibilidad de hacer música . Entonces, esto me hizo pensar y reflexionar mucho. En el fondo este libro lo escribí para entregar un mensaje de fe y esperanza a quienes también están padeciendo la invalidez y  creo que el libro en cierta forma ha logrado responder todas estas preguntas”.

Y continúa, “a la luz de esta situación que estamos viviendo ahora, la pandemia por el COVID-19, pareciera que nuestro planeta está flagelado por algún tipo de mal, porque parecía que todo estaba bien, en este momento estamos en una etapa de reflexión y cuestionamientos profundos donde la gente está buscando una luz en la oscuridad”. Y en ese sentido, comparte que su texto puede servir de ayuda para quienes se encuentran en una etapa de dudas y temores, buscando reconectar con aquello que los haga sentirse plenos.

El autor agradeció el apoyo que le está dando Amateditorial y espera que una vez que se regularice de mejor manera la pandemia ocasionada por el COVID-19, él pueda viajar a México para promover su obra y también buscar desarrollar conferencias.

JL

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