Álvaro Uribe, la ficción y lo real acompañan a “Los que no”
Álvaro Uribe explica que el origen del título se relaciona a las historias que desglosa en “Los que no”, un grupo de gente que fue joven a finales de los años 60 y que experimentaron diversas circunstancias desfavorables y hasta trágicas, y que son narradas por un hombre de la tercera edad, que justo desempolva esas anécdotas propias y ajenas desde su perspectiva.
Recurrir a las memorias y tratar de describir aquello que pasó de la forma más exacta o al menos intentarlo, pero siempre con la posibilidad de que la ficción se cuele, es la postura que el escritor Álvaro Uribe propone en “Los que no”, su más reciente novela publicada por Alfaguara.
Llevar al lector a un vaivén de fechas y anécdotas, es tan sólo una de las premisas de “Los que no”, pero también sumergir al lector a una dinámica diferente de narrativa es una constante, en donde el protagonista se mezcla entre las anécdotas propias y ajenas, de lo que realmente vivió, de lo que cree recordar o de cómo él hubiera actuado.
“Los que no son todas aquellas personas que no lograron cumplir con las expectativas, ya sea de aquellas que tenían de sí mismas o que otras personas tenían acerca de ellas. Son todas las personas que no lograron alcanzar sus metas, cumplir sus planes, que no pudieron ser lo que hubieran podido ser o hacer, en resumen, todos nosotros”, anota el escritor.
Álvaro Uribe explica que el origen del título se relaciona a las historias que desglosa en “Los que no”, un grupo de gente que fue joven a finales de los años 60 y que experimentaron diversas circunstancias desfavorables y hasta trágicas, y que son narradas por un hombre de la tercera edad, que justo desempolva esas anécdotas propias y ajenas desde su perspectiva.
“Hay cinco protagonistas principales, cada uno corresponde a un capítulo del libro, pero hay una sexta persona que es el narrador y que también forma parte del grupo. Son historias que imaginé o conocí gente que pudo haberlas tenido, son historias que se remiten a mi propia juventud que ocurrió de los años 60 a los 80, son historias que me venían rondando desde hace más de 40 años”.
Álvaro Uribe -Premio Xavier Villaurrutia en 2014 por “Autorretrato de familia con perro”-, explica que si bien las historias de sus protagonistas siempre estuvieron latentes, lo que quedaba por concretar era el estilo narrativo que tendría “Los que no”, pues sí algo determinó que tendría que salir de su cotidianidad para ofrecer al lector una perspectiva diferente de la memoria y la ficción.
“Lo que no aparecía era la forma de narrar esas historias, porque historias tenemos todos, todo el mundo conoce su propia historia y la de su familia y amigos, pero lo que hace que alguien se dedique ya más profesionalmente a la narrativa es su posibilidad de encontrar formas originales, perdurables e interesantes de contarlas”, resalta Álvaro Uribe al detallar que quizá el paso del tiempo y tras superar los 60 años de edad, fue clave para aventurarse a un estilo de escritura diferente.
MQ