Tecnología
Investigación, vital para que México aumente desarrollo científico
Señalan que se debe innovar y aumentar la investigación científica para el crecimiento del país
MÉRIDA, YUCATÁN (20/NOV/2015).- Impulsar la investigación
científica es vital para generar el conocimiento que permita a México estar entre las naciones que alcancen su desarrollo en la materia, dijo el coordinador general del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República, Jorge Flores Valdés.
Al inaugurar la Reunión Nacional "Construyendo el futuro. Encuentros de ciencia", el experto opinó que los esfuerzos de los últimos 70 años en México para impulsar la ciencia y 45 años de haberse fundado el Conacyt, "no bastan".
México, abundó, "ha llegado muy tarde a la investigación, eso implica que nuestros esfuerzos no son lo suficientemente grandes para que llegue a ocupar en la generación de conocimiento, el lugar que le corresponde como país entre diversas naciones".
Estamos, afirmó, "en un desequilibrio y esto significa que debemos impulsar acciones que atiendan temas como: innovar, aumentar la investigación científica y mejorar la educación superior".
Al mismo tiempo, se pronunció porque la empresa privada mexicana "llegue a darse cuenta de que la mejor inversión que puede hacer no es en la bolsa de valores, sino en el impulso a la investigación científica en el país".
Previamente, recordó ante ganadores de premios nacionales de Ciencia e integrantes de la Academia Mexicana de Ciencias, que Alfonso Reyes fue el primero en obtener este tipo de premios en 1945, año en el que se creó el Instituto Nacional de Bellas Artes y el Instituto Nacional de Investigación Científica.
Flores Valdés señaló que fue hasta 1970, cuando, por la influencia de la Organización de Estados Americanos (OEA), el instituto científico empezó a recibir mayores presupuestos que el INBA, incluso a finales de ese año, se fundó el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología ( Conacyt).
Refirió que fue así como empezaron a existir apoyos a proyectos científicos, iniciaron las relaciones de colaboración internacionales y comenzó la entrega de un programa masivo de becas, mismo que hoy alcanza los 50 mil mexicanos en el extranjero.
Apuntó que otro gran salto se dio en 1984 con la creación del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y con ello, se creó un esquema particular de promoción de la ciencia, en especial en los estados, lo que redundó en un aumento de mil 480 investigadores en el país a más de 25 mil en la actualidad.
Asimismo, se crearon 27 centros de investigación en todo el territorio nacional, descentralizando la actividad científica y lográndose que en la actualidad el 50 por ciento de la actividad científica nacional se ubique fuera del área metropolitana.
Esto también favoreció la creación del Consejo Consultivo de Ciencia de la Presidencia de la República y el establecimiento de premios en seis rubros como: literatura y lengua, artes plásticas, ciencias naturales, tecnología y diseño, ciencias sociales y humanidades y por último artes populares.
Además, las universidades públicas estatales empezaron a tener un papel más protagónico en la generación de científicos y doctores, además del establecimiento de cátedras Conacyt para jóvenes.
En tanto, el presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, Jaime Urrutia Fucugauchi, expuso que la innovación, ciencia y tecnología "son la base del desarrollo de las naciones; han impulsado a las sociedades desde la antigüedad y la diferencia ahora es la rapidez con las que se dan y el impacto que tienen en la sociedad".
"Los retos de las naciones industrializadas es contribuir a la ciencia y tecnología, fortalecer sistemas educativos y formar, atraer y retener talentos", señaló, al tiempo que reconoció que la actividad científica nacional aún es muy joven.
Como ejemplo, mencionó que el Conacyt ha impulsado proyectos de investigación con un programa de becas en el extranjero, que ha permitido formar a numerosos doctores e incorporar a cátedras a casi 800 investigadores jóvenes en varias instituciones.
Al inaugurar la Reunión Nacional "Construyendo el futuro. Encuentros de ciencia", el experto opinó que los esfuerzos de los últimos 70 años en México para impulsar la ciencia y 45 años de haberse fundado el Conacyt, "no bastan".
México, abundó, "ha llegado muy tarde a la investigación, eso implica que nuestros esfuerzos no son lo suficientemente grandes para que llegue a ocupar en la generación de conocimiento, el lugar que le corresponde como país entre diversas naciones".
Estamos, afirmó, "en un desequilibrio y esto significa que debemos impulsar acciones que atiendan temas como: innovar, aumentar la investigación científica y mejorar la educación superior".
Al mismo tiempo, se pronunció porque la empresa privada mexicana "llegue a darse cuenta de que la mejor inversión que puede hacer no es en la bolsa de valores, sino en el impulso a la investigación científica en el país".
Previamente, recordó ante ganadores de premios nacionales de Ciencia e integrantes de la Academia Mexicana de Ciencias, que Alfonso Reyes fue el primero en obtener este tipo de premios en 1945, año en el que se creó el Instituto Nacional de Bellas Artes y el Instituto Nacional de Investigación Científica.
Flores Valdés señaló que fue hasta 1970, cuando, por la influencia de la Organización de Estados Americanos (OEA), el instituto científico empezó a recibir mayores presupuestos que el INBA, incluso a finales de ese año, se fundó el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología ( Conacyt).
Refirió que fue así como empezaron a existir apoyos a proyectos científicos, iniciaron las relaciones de colaboración internacionales y comenzó la entrega de un programa masivo de becas, mismo que hoy alcanza los 50 mil mexicanos en el extranjero.
Apuntó que otro gran salto se dio en 1984 con la creación del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y con ello, se creó un esquema particular de promoción de la ciencia, en especial en los estados, lo que redundó en un aumento de mil 480 investigadores en el país a más de 25 mil en la actualidad.
Asimismo, se crearon 27 centros de investigación en todo el territorio nacional, descentralizando la actividad científica y lográndose que en la actualidad el 50 por ciento de la actividad científica nacional se ubique fuera del área metropolitana.
Esto también favoreció la creación del Consejo Consultivo de Ciencia de la Presidencia de la República y el establecimiento de premios en seis rubros como: literatura y lengua, artes plásticas, ciencias naturales, tecnología y diseño, ciencias sociales y humanidades y por último artes populares.
Además, las universidades públicas estatales empezaron a tener un papel más protagónico en la generación de científicos y doctores, además del establecimiento de cátedras Conacyt para jóvenes.
En tanto, el presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, Jaime Urrutia Fucugauchi, expuso que la innovación, ciencia y tecnología "son la base del desarrollo de las naciones; han impulsado a las sociedades desde la antigüedad y la diferencia ahora es la rapidez con las que se dan y el impacto que tienen en la sociedad".
"Los retos de las naciones industrializadas es contribuir a la ciencia y tecnología, fortalecer sistemas educativos y formar, atraer y retener talentos", señaló, al tiempo que reconoció que la actividad científica nacional aún es muy joven.
Como ejemplo, mencionó que el Conacyt ha impulsado proyectos de investigación con un programa de becas en el extranjero, que ha permitido formar a numerosos doctores e incorporar a cátedras a casi 800 investigadores jóvenes en varias instituciones.
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