Tecnología
Innovación y nuevas tecnologías en las empresas
La Canacintra sostiene en su publicación semanal 'Sinópsis económica' que es fundamental que las empresas se integren al nuevo modelo tecnológico en el que se desarrollan, a fin de que no desaparezcan
CIUDAD DE MÉXICO (26/JUN/2011).- La Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) sostuvo que en la actualidad, sólo las empresas que innoven y tengan nuevas tecnologías seguirán siendo competitivas y sobrevivirán.
En su publicación semanal 'Sinópsis económica', el organismo industrial subrayó que la tecnología debe integrarse profundamente en el proceso de negocio de las empresas. 'Necesitamos que éstas se integren, modifiquen y complementen la estrategia global de la empresa: Cambio de mentalidad empresarial', añadió.
Comentó que en días pasados la Reserva Federal de Estados Unidos confirmó una disminución y/o reducción en su tasa de crecimiento para lo que resta del año y 2012, lo que constituye malas nuevas para la economía mexicana, por la alta dependencia que tiene de la estadounidense.
Frente a ello, dijo, México debe contar con reformas estructurales que permitan soportar los embates de la globalización.
El país tiene que contar además con herramientas que impulsen la competitividad, ya que el ser competitivo nos permitiría tener acceso a los mercados internacionales y nacionales.
'Es necesario distinguirnos por nuestra calidad, habilidades, cualidades, la capacidad que tengamos de cautivar y atender a nuestros clientes, internamente o fuera de nuestras fronteras, con los bienes y servicios que producimos, lo cual se convertiría en un generador de riqueza', planteó.
En la actualidad, la competitividad internacional puede alcanzarse mediante dos vías: La tradicional opción de reducir costos y precios relativos; y las nuevas vías fundamentadas en la 'diferenciación de productos', la segmentación de mercados, la marca, la calidad y los servicios a los clientes y la tecnología propia del producto.
Se puede afirmar entonces que la competitividad dependerá especialmente de la actuación de los industriales, así como de la participación de los trabajadores y de la tecnología con que cuenten las empresas, señaló.
En el documento elaborado por su Centro de Estudios Económicos manifestó que el reto que tienen las empresas con relación a las nuevas tecnologías, su utilización y constante innovación es muy grande, pero se debe estar consciente de que es imprescindible estar siempre a la vanguardia de estos esquemas.
Las exigencias de competitividad que demanda la economía nacional plantean la necesidad de incrementar los recursos destinados a la investigación, desarrollo y adaptación de tecnología, para poder modernizar la planta productiva nacional y responder con eficacia a los nuevos desafíos, expuso.
En su publicación semanal 'Sinópsis económica', el organismo industrial subrayó que la tecnología debe integrarse profundamente en el proceso de negocio de las empresas. 'Necesitamos que éstas se integren, modifiquen y complementen la estrategia global de la empresa: Cambio de mentalidad empresarial', añadió.
Comentó que en días pasados la Reserva Federal de Estados Unidos confirmó una disminución y/o reducción en su tasa de crecimiento para lo que resta del año y 2012, lo que constituye malas nuevas para la economía mexicana, por la alta dependencia que tiene de la estadounidense.
Frente a ello, dijo, México debe contar con reformas estructurales que permitan soportar los embates de la globalización.
El país tiene que contar además con herramientas que impulsen la competitividad, ya que el ser competitivo nos permitiría tener acceso a los mercados internacionales y nacionales.
'Es necesario distinguirnos por nuestra calidad, habilidades, cualidades, la capacidad que tengamos de cautivar y atender a nuestros clientes, internamente o fuera de nuestras fronteras, con los bienes y servicios que producimos, lo cual se convertiría en un generador de riqueza', planteó.
En la actualidad, la competitividad internacional puede alcanzarse mediante dos vías: La tradicional opción de reducir costos y precios relativos; y las nuevas vías fundamentadas en la 'diferenciación de productos', la segmentación de mercados, la marca, la calidad y los servicios a los clientes y la tecnología propia del producto.
Se puede afirmar entonces que la competitividad dependerá especialmente de la actuación de los industriales, así como de la participación de los trabajadores y de la tecnología con que cuenten las empresas, señaló.
En el documento elaborado por su Centro de Estudios Económicos manifestó que el reto que tienen las empresas con relación a las nuevas tecnologías, su utilización y constante innovación es muy grande, pero se debe estar consciente de que es imprescindible estar siempre a la vanguardia de estos esquemas.
Las exigencias de competitividad que demanda la economía nacional plantean la necesidad de incrementar los recursos destinados a la investigación, desarrollo y adaptación de tecnología, para poder modernizar la planta productiva nacional y responder con eficacia a los nuevos desafíos, expuso.
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