El hielo marino del Ártico impone nuevo récord
Este suceso es una señal del sobrecalentamiento del planeta
WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (22/MAR/2017).- El congelado polo norte de la Tierra impuso este año un nuevo récord de bajos niveles de hielo marino y, según los científicos, es una señal del sobrecalentamiento del planeta.
La extensión de hielo flotante en el Ártico alcanzó nuevamente un mínimo histórico para el invierno: 14.42 millones de kilómetros cuadrados (5.57 millones de millas cuadradas). Eso representa 97 mil kilómetros cuadrados (35 mil millas cuadradas) aproximadamente un área del tamaño de Maine) por debajo del récord de 2015.
Esto coloca al Ártico en un "agujero profundo" al iniciar la temporada crucial de derretimiento de primavera y verano, por lo que es posible que haya más zonas sin hielo, dijo Mark Serreze, director del Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo en Colorado, que difundió el miércoles sus hallazgos.
"Es una parte vital del sistema climático de la Tierra, y la estamos perdiendo", reconoció. "Ahora estamos perdiendo hielo en todas las estaciones".
En el otro extremo del planeta, la Antártida, en donde el hielo marino alcanza su punto más bajo del año en marzo, también se registraron bajos niveles históricos. El hielo marino de la Antártida tiene amplias variaciones a diferencia del hielo marino del Ãrtico, que ha ido en descenso de manera constante.
El centro de datos del hielo mide la extensión del hielo marino basándose en imágenes satelitales. Es más difícil medir el espesor y el volumen en general, pero los datos de la Universidad de Washington revelan que hacia finales del mes pasado, el volumen de hielo había caído un 42% respecto a 1979, de acuerdo con el jefe del centro de ciencia polar, Axel Schweiger.
Varios científicos dijeron que la pérdida de hielo marino era inquietante.
"Es evidencia de que el clima en la cima del mundo sigue cambiando más rápido que en cualquier otra parte de la Tierra, con un impacto que francamente sigue siendo desconocido para nosotros", escribió en un email el profesor de meteorología de la Universidad Pennsylvania State y almirante jubilado, David W. Titley.