Tecnología
Decomisos de marfil alcanzan su mayor índice
Los decomisos a gran escala de marfil ilegalmente comercializado alcanzan su mayor índice en 25 años
UICN).
Estas incautaciones son consideradas un claro indicador de los niveles del tráfico ilícito de este producto, un delito que está diezmando a los elefantes africanos, según un estudio publicado hoy en Ginebra con motivo de una reunión de alto nivel entre expertos de la UICN y de Botsuana, país en el que vive la mayor población de esos animales en África.
Las organizaciones dedicadas a la protección de los elefantes y otras especies en peligro han establecido que el comercio ilegal de marfil alcanzó en 2011 su mayor nivel en dieciséis años, que la tendencia persistió en 2012 y que al final de este año la situación puede ser todavía peor.
Conforme a los últimos datos, los expertos calculan que este comercio ilegal es ya un 20 % superior en 2013 que hace dos años.
Los decomisos a gran escala (500 kilos de marfil en una sola operación) suelen poner en evidencia la participación del crimen organizado.
Este año se han efectuado 18 incautaciones de este tipo, con 41.6 toneladas, de acuerdo con datos del Sistema de Información sobre Tráfico de Elefantes.
Los especialistas en conservación indican que desde 2009 las rutas del tráfico ilegal de marfil han pasado de África central y occidental a puertos de África oriental, especialmente de Tanzania y Kenia, desde donde la mercancía abandona el continente.
Los puntos de tránsito se localizan en Malasia, Vietnam y Hong Kong, mientras que el destino está en China y, en menor medida, en Tailandia.
Sin embargo, en los últimos dos años Togo y Costa de Marfil también se han establecido como puntos de partida.
Mientras, "Indonesia, España, Sri Lanka, Turquía y Emiratos Árabes Unidos aparecen como nuevos países de tránsito", según la información divulgada conjuntamente por la UICN y la secretaría que gestiona la Convención para la Conservación de Especies Amenazadas de Flora y Fauna (CITES).
Para el secretario general de CITES, John Scanlon, "con una cifra estimada de 22 mil elefantes africanos ilegalmente asesinados en 2012 afrontamos una situación crítica. La caza furtiva de elefantes sigue siendo muy alta y esto puede provocar su extinción localizada si la tendencia actual continúa".
GINEBRA, SUIZA (02/DIC/2013).- Los decomisos a gran escala de marfil comerciado ilegalmente han alcanzado este año su mayor índice en veinticinco años, con más de 41 toneladas aprehendidas entre enero y noviembre, informó hoy la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (
Estas incautaciones son consideradas un claro indicador de los niveles del tráfico ilícito de este producto, un delito que está diezmando a los elefantes africanos, según un estudio publicado hoy en Ginebra con motivo de una reunión de alto nivel entre expertos de la UICN y de Botsuana, país en el que vive la mayor población de esos animales en África.
Las organizaciones dedicadas a la protección de los elefantes y otras especies en peligro han establecido que el comercio ilegal de marfil alcanzó en 2011 su mayor nivel en dieciséis años, que la tendencia persistió en 2012 y que al final de este año la situación puede ser todavía peor.
Conforme a los últimos datos, los expertos calculan que este comercio ilegal es ya un 20 % superior en 2013 que hace dos años.
Los decomisos a gran escala (500 kilos de marfil en una sola operación) suelen poner en evidencia la participación del crimen organizado.
Este año se han efectuado 18 incautaciones de este tipo, con 41.6 toneladas, de acuerdo con datos del Sistema de Información sobre Tráfico de Elefantes.
Los especialistas en conservación indican que desde 2009 las rutas del tráfico ilegal de marfil han pasado de África central y occidental a puertos de África oriental, especialmente de Tanzania y Kenia, desde donde la mercancía abandona el continente.
Los puntos de tránsito se localizan en Malasia, Vietnam y Hong Kong, mientras que el destino está en China y, en menor medida, en Tailandia.
Sin embargo, en los últimos dos años Togo y Costa de Marfil también se han establecido como puntos de partida.
Mientras, "Indonesia, España, Sri Lanka, Turquía y Emiratos Árabes Unidos aparecen como nuevos países de tránsito", según la información divulgada conjuntamente por la UICN y la secretaría que gestiona la Convención para la Conservación de Especies Amenazadas de Flora y Fauna (CITES).
Para el secretario general de CITES, John Scanlon, "con una cifra estimada de 22 mil elefantes africanos ilegalmente asesinados en 2012 afrontamos una situación crítica. La caza furtiva de elefantes sigue siendo muy alta y esto puede provocar su extinción localizada si la tendencia actual continúa".
Síguenos en