Cercanía de Neandertales y humanos permitió adaptación
Características de la piel y el sistema inmune, entre los puntos esenciales
WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (14/NOV/2016).- El encuentro entre los ancestros de los seres humanos con otras especies del género Homo, como el hombre de Neandertal o el de Denisova, ayudó a la adaptación a la vida fuera de África.
De acuerdo con estudio que será publicado en el próximo número de la revista Current Biology, indica que al salir de África, el homo sapiens se cruzó con especies como los neandertales y los denisovanos y tuvo una descendencia que se vio beneficiada con la herencia de estos últimos.
El análisis recoge la evidencia hallada por un grupo de investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington, en la ciudad de Seattle.
Gran parte de los fragmentos de ADN que todavía quedan de esos parientes lejanos casi no se registran con frecuencia, pero el nuevo estudio ha identificado 126 sitios del genoma humano en los que estas secuencias aparecen con una mayor asiduidad de la que podría esperarse.
De esas regiones identificadas, siete están vinculadas a características de la piel y, sobre todo, 31 al sistema inmune, uno de los puntos esenciales en el proceso de evolución adaptativa, pues permite enfrentarse a las distintas enfermedades.
“Nuestro trabajo muestra que la hibridación no fue solo una nota al margen de la historia humana, sino que tuvo consecuencias importantes y que contribuyó a la capacidad de nuestros ancestros a adaptarse a distintos entornos a medida que se dispersaban por todo el mundo”, consideró Joshua Akey, uno de los investigadores, según reprodujo Cell Press, editora de la revista Current Biology.
Para los científicos, la evidencia indica que las secuencias siguieron presentes porque eran ventajosas para los ancestros de los hombres modernos.
La hibridación con el hombre de Neandertal o de Denisova, que habitaban en Europa y Siberia, respectivamente, fue para estos expertos “una forma eficiente para adaptarse rápidamente a los nuevos entornos que se encontraba” el homo sapiens al salir de África.
Para realizar este trabajo, los expertos utilizaron mapas genéticos recientemente elaborados de las secuencias del hombre de Neandertal y de Denisova identificadas en más de mil 500 personas, todas de distintos sitios.
En un futuro, los investigadores esperan conocer más sobre la influencia que tuvieron estos genes, en especial, sobre las implicaciones que podrían tener en las enfermedades.
EL DATO
La escalera biológica
Se cree que el homo sapiens se originó en África oriental entre 200 mil y 140 mil años atrás.
A esta especie, la única que aún perdura del género Homo tras la extinción del hombre de Neandertal hace 28 mil años, pertenece el ser humano moderno.
GENOMA HUMANO
Material genético, aún presente
El material genético de los Neandertales se puede encontrar en el genoma de los humanos modernos, pero en pequeñas cantidades.
Según un estudio de la Universidad de California, humanos y Neandertales se cruzaron hace decenas de miles de años, pero hoy el material genético de estos últimos representa entre 1% y 4% del genoma de las personas no africanas, señala un estudio que publica Plos.
La selección natural hizo desaparecer una importante cantidad de variantes genéticas.
Uno de los motivos importantes para esta eliminación del material genético fue que la población humana era mucho más numerosa que la neandertal, explica la Universidad de California.
Para entender cómo los humanos modernos perdieron su materia genético Neandertal y cómo ambos se mantuvieron diferentes, un grupo de expertos encabezados por Ivan Juric desarrolló un método para estimar la fuerza media de la selección natural contra el material genético neandertal.
Los expertos descubrieron que la selección natural eliminó muchos alelos (formas alternativas de un gen y cuya expresión determina ciertas características) que podrían haber tenido leves efectos negativos.
Una vez transmitidos al genoma humano, esos alelos fueron objeto de una selección natural que fue mucho más eficaz en las grandes poblaciones humanas y, con el tiempo, eliminó esas variantes genéticas.
Juric indicó que los resultados del estudio apuntan a un escenario en el que el genoma neandertal acumulaba muchas variantes perjudiciales, debido a que la selección natural no había sido tan efectiva en sus pequeñas poblaciones.
Este estudio es uno de los primeros intentos de cuantificar la fuerza de la selección natural contra los genes neandertales y mejora la comprensión de cómo estos contribuyeron al genoma humano.
EL DATO
Un escenario diferente
Con el estudio no se puede concluir que las diferencias demográficas lo expliquen todo, aunque Ivan Juric, encargado del estudio, considera “fascinante” pensar en que si la población de neandertales hubiera sido mayor en Europa y si el número de humanos hubiera crecido más lentamente “algunos de nosotros hoy podríamos llevar mucho más de linaje neandertal en nuestro genoma”.