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Alemania aprueba nuevas medidas energéticas para reducir emisiones de CO2
Es el segundo paquete de medidas energéticas con las que pretende avanzar en su objetivo de reducir para el año 2020 las emisiones de CO2 en un 40 por ciento
Berlín.- El gobierno alemán aprobó hoy el segundo paquete de medidas energéticas con las que pretende avanzar en su objetivo de reducir para el año 2020 las emisiones de
CO2 en un 40 por ciento con respecto a los niveles de 1990.
"Desde 1990 hemos alcanzado un nivel de reducción del veinte por ciento -reconozco que la mitad de ese porcentaje proviene del desmoronamiento industrial de la RDA- y estamos muy cerca de alcanzar nuestro objetivo del 21 por ciento fijado por el Protocolo de Kioto para 2012", dijo el ministro de Medio Ambiente, Sigmar Gabriel, al presentar el paquete de medidas.
Gabriel añadió que el objetivo del gobierno es conseguir una reducción adicional de otro veinte por ciento para el año 2020 y así llegar al 40 por ciento fijado como meta por la gran coalición dirigida por Angela Merkel.
El nuevo compendio de medidas contempla un aumento del peaje de los camiones, mayores exigencias de ahorro energético en la construcción de viviendas y la implantación de un sistema de cobro energético en las viviendas que se adapte al consumo personal de cada unidad.
El peaje a los camiones no sólo aumentará sino que se diversificará de forma que los vehículos con mayores emisiones tengan que pagar más que los que emiten menos.
El ministro de Vivienda y Transportes, Wolfgang Tiefensee, aseguró que los 850 millones de euros (1.315 millones de dólares) que se esperan de recaudación adicional se re-inviertan "íntegramente" en la red vial.
Pendiente de acuerdo final quedó la reforma del impuesto de circulación, que el gobierno quiere hacer depender del nivel de emisiones y no, como hasta ahora, de la cilindrada de los vehículos.
Por tratarse de un impuesto que recaudan íntegramente los estados federados, es necesario negociar con éstos. Los Länder han aceptado "perder" este impuesto a cambio de que se les compense con otro.
Tiefensee se mostró optimista en lograr una fórmula de compensación después de la pausa de verano.
Los socialdemócratas Gabriel y Tiefensee, así como el ministro de Energía y Economía, el socialcristiano bávaro Michael Glos, defendieron el paquete de medidas contra las críticas de algunos expertos que lo consideran ambicioso pero poco realista.
Así, por ejemplo, el consejo de expertos que asesora al gobierno en temas de medio ambiente reprochó hoy a las autoridades haber cedido ante los dos lobbies más fuertes de este país: los agricultores y el sector automovilístico.
"Se han hecho concesiones que hacen que Alemania quede por detrás de su potencial innovador", dijo el presidente del citado consejo, Hans-Joachim Koch, al presentar el informe que elabora con una periodicidad de cuatro años .
Aunque en términos generales los expertos atestaron al ejecutivo una buena labor, criticaron que la canciller se haya doblegado a los intereses del sector automovilístico en lo que respecta al objetivo de limitar las emisiones a 120 gramos por kilómetro.
Koch subrayó que el gobierno alemán debería apoyar plenamente todas las propuestas que está haciendo la Comisión Europea en lo relacionado con la protección medioambiental, también, por ejemplo, en lo que afecta a la reforma de las ayudas agrícolas.
"Desde 1990 hemos alcanzado un nivel de reducción del veinte por ciento -reconozco que la mitad de ese porcentaje proviene del desmoronamiento industrial de la RDA- y estamos muy cerca de alcanzar nuestro objetivo del 21 por ciento fijado por el Protocolo de Kioto para 2012", dijo el ministro de Medio Ambiente, Sigmar Gabriel, al presentar el paquete de medidas.
Gabriel añadió que el objetivo del gobierno es conseguir una reducción adicional de otro veinte por ciento para el año 2020 y así llegar al 40 por ciento fijado como meta por la gran coalición dirigida por Angela Merkel.
El nuevo compendio de medidas contempla un aumento del peaje de los camiones, mayores exigencias de ahorro energético en la construcción de viviendas y la implantación de un sistema de cobro energético en las viviendas que se adapte al consumo personal de cada unidad.
El peaje a los camiones no sólo aumentará sino que se diversificará de forma que los vehículos con mayores emisiones tengan que pagar más que los que emiten menos.
El ministro de Vivienda y Transportes, Wolfgang Tiefensee, aseguró que los 850 millones de euros (1.315 millones de dólares) que se esperan de recaudación adicional se re-inviertan "íntegramente" en la red vial.
Pendiente de acuerdo final quedó la reforma del impuesto de circulación, que el gobierno quiere hacer depender del nivel de emisiones y no, como hasta ahora, de la cilindrada de los vehículos.
Por tratarse de un impuesto que recaudan íntegramente los estados federados, es necesario negociar con éstos. Los Länder han aceptado "perder" este impuesto a cambio de que se les compense con otro.
Tiefensee se mostró optimista en lograr una fórmula de compensación después de la pausa de verano.
Los socialdemócratas Gabriel y Tiefensee, así como el ministro de Energía y Economía, el socialcristiano bávaro Michael Glos, defendieron el paquete de medidas contra las críticas de algunos expertos que lo consideran ambicioso pero poco realista.
Así, por ejemplo, el consejo de expertos que asesora al gobierno en temas de medio ambiente reprochó hoy a las autoridades haber cedido ante los dos lobbies más fuertes de este país: los agricultores y el sector automovilístico.
"Se han hecho concesiones que hacen que Alemania quede por detrás de su potencial innovador", dijo el presidente del citado consejo, Hans-Joachim Koch, al presentar el informe que elabora con una periodicidad de cuatro años .
Aunque en términos generales los expertos atestaron al ejecutivo una buena labor, criticaron que la canciller se haya doblegado a los intereses del sector automovilístico en lo que respecta al objetivo de limitar las emisiones a 120 gramos por kilómetro.
Koch subrayó que el gobierno alemán debería apoyar plenamente todas las propuestas que está haciendo la Comisión Europea en lo relacionado con la protección medioambiental, también, por ejemplo, en lo que afecta a la reforma de las ayudas agrícolas.
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