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Pura buena vibra con el equinoccio
Este 21 de marzo es la ocasión perfecta para cargarse de energía con la llegada de la primavera
GUADALAJARA, JALISCO (17/MAR/2013).- Ixtépete o Iztepete, como uno guste. Uno significa “el cerro del Ixte”; el otro, “el cerro de las navajas”, o bien, “de la obsidiana”. Este centro arqueológico, ubicado a 30 metros del cruce entre Mariano Otero y Periférico Oeste, se llena de gente, cerca de 12 mil curiosos, que pretenden experimentar el ritual prehispánico que recibe el equinoccio de primavera.
Con los brazos levantados hacia el Sol, con los dedos como antenas receptoras de los rayos ultravioleta, y los ojos bien cerrados, se celebra entre los edificios de adobe con características de grupos aztecas emigrados de Aztlán, para llenarse de energía.
Tan interesante es que se considera una de las zonas arqueológicas más importantes del Occidente del país. Fue descubierta un día de 1938 por don José Corona Núñez, apoyado por ex trabajadaores del tranvía, pero no fue hasta 1955 que se realizaron los primeros trabajos de restauración por Juan Gil Flores y César Sáenz. Consta de un templo mayor y cerca de otros seis edificios más que, superpuestos en un lapso entre cada uno de 52 años, los indígenas establecieron en su calendario para medir el tiempo.
Si se quiere vivir el equinoccio de primavera allí, el código de vestimenta está dado. De pies a cabeza vestidos de blanco va llegando poco a poco la gente que quiere vivir el ritual.
Entre ellos destacan los danzantes, que visten una corona y brazaletes hechos a base de plumas de faisán y de gallo. Por ahí pululan los chamanes, que con sahumador en mano realiza las famosas “limpias” a quienes se lo pidan.
Talleres de arte plumario, elaboración de instrumentos prehispánicos y piezas de barro, música y teatro, se suman al festejo que dura desde las 10:00 hasta alrededor de las 19:00 horas. Incluso se encuentran puestos de aguas frescas y comida, para aquellos que olvidaron cargar con víveres para aguantar la fiesta del 21 de marzo.
Las coordenadas
Llegar es muy sencillo. Si vives en la Zona Metropolitana de Guadalajara, no necesitas de un auto o pagar taxi para llegar. Puedes tomar la ruta 624, que parte de la calle 5 de Febrero para tomar Analco hasta llegar a Héroes de Nacozari. Luego toma avenida López de Legaspi y Avenida Cruz del Sur. Continúa por 18 de Marzo y Tepeyac, para finalmente llegar a Ixtépete. En cualquiera de estos puntos encontrarás una parada para abordarlo.
Si planeas pasar allí por varias horas para vivir el equinoccio, toma en cuenta las siguientes recomendaciones. Utiliza un protector solar adecuado, de uso diario, con factor de protección solar (FPS) 60. De lo contrario puedes portar una sombrilla o incluso hay quienes prefieren asistir con sombreros de ala ancha o gorras.
No olvides contar con víveres como agua embotellada y comida fácil de portar, como sándwiches. Finalmente carga con una bolsa de plástico donde recojas tu basura.
A cargarse en Guachimontones
Con sus construcciones en forma de círculos concéntricos, el sitio prehispánico de los Guachimontones también es una opción para cargarse de energía durante este equinoccio. En el Occidente de México, en Teuchitlán, se encuentran este centro ceremonial y antiguo asentamiento prehispánico.Los festejos de energía se acompañan con temazcales, un sendero artesanal, talleres experimentales y de juegos tradicionales, ritual indigenista nocturno, encuentro cultural de pueblos indígenas, senderos para pasear a caballo y hasta conciertos de rock. También se encuentra un área gastronómica donde se puede disfrutar de ricos platillos representativos del lugar como pipián, ancas de rana, así como bebidas ancestrales como tejuino o jugo de caña.
Para llegar
El sitio arqueológico Guachimontones se localiza a una hora de camino de Guadalajara, tomando la carretera a Tepic y luego la desviación a Tequila por la carretera libre, para posteriormente seguir hacia Tala y finalmente hacia Teuchitlán. El lugar está abierto de 9:00 de la mañana a 18:00 o 19:00 horas, dependiendo del horario de verano/invierno.
La empresa Andares de México ofrece paquetes de tour a este lugar. El recorrido tiene una duración de seis horas y se requiere de un mínimo de cuatro personas para realizarse.
En su página, grupoandares.com, ofrecen la oportunidad de cotizar el costo del viaje. Incluye, transportación desde hotel, guía de turistas bilingüe certificada y entradas al museo. No incluye alimentos ni propinas. Todos esos detalles puede consltarlos y dejar todo listo para hacer un recorrido mucho más relajado.
TOMA NOTA
Listo para todo
-Llevar zapatos cómodos para caminar, preferentemente cerrados (no sandalias por ejemplo) ya que hay insectos.
-Llevar gorra o sombrero y lentes de sol.
-Llevar agua potable embotellada, ya que a veces el calor puede ser intenso.
-Hay guías especializados que ofrecen sus servicios en el sitio.
-Las tarifas a pagar por los servicios del guía son voluntarias. Procura llegar a un acuerdo con el guía antes de contratarlo, para evitar malentendidos.
Con los brazos levantados hacia el Sol, con los dedos como antenas receptoras de los rayos ultravioleta, y los ojos bien cerrados, se celebra entre los edificios de adobe con características de grupos aztecas emigrados de Aztlán, para llenarse de energía.
Tan interesante es que se considera una de las zonas arqueológicas más importantes del Occidente del país. Fue descubierta un día de 1938 por don José Corona Núñez, apoyado por ex trabajadaores del tranvía, pero no fue hasta 1955 que se realizaron los primeros trabajos de restauración por Juan Gil Flores y César Sáenz. Consta de un templo mayor y cerca de otros seis edificios más que, superpuestos en un lapso entre cada uno de 52 años, los indígenas establecieron en su calendario para medir el tiempo.
Si se quiere vivir el equinoccio de primavera allí, el código de vestimenta está dado. De pies a cabeza vestidos de blanco va llegando poco a poco la gente que quiere vivir el ritual.
Entre ellos destacan los danzantes, que visten una corona y brazaletes hechos a base de plumas de faisán y de gallo. Por ahí pululan los chamanes, que con sahumador en mano realiza las famosas “limpias” a quienes se lo pidan.
Talleres de arte plumario, elaboración de instrumentos prehispánicos y piezas de barro, música y teatro, se suman al festejo que dura desde las 10:00 hasta alrededor de las 19:00 horas. Incluso se encuentran puestos de aguas frescas y comida, para aquellos que olvidaron cargar con víveres para aguantar la fiesta del 21 de marzo.
Las coordenadas
Llegar es muy sencillo. Si vives en la Zona Metropolitana de Guadalajara, no necesitas de un auto o pagar taxi para llegar. Puedes tomar la ruta 624, que parte de la calle 5 de Febrero para tomar Analco hasta llegar a Héroes de Nacozari. Luego toma avenida López de Legaspi y Avenida Cruz del Sur. Continúa por 18 de Marzo y Tepeyac, para finalmente llegar a Ixtépete. En cualquiera de estos puntos encontrarás una parada para abordarlo.
Si planeas pasar allí por varias horas para vivir el equinoccio, toma en cuenta las siguientes recomendaciones. Utiliza un protector solar adecuado, de uso diario, con factor de protección solar (FPS) 60. De lo contrario puedes portar una sombrilla o incluso hay quienes prefieren asistir con sombreros de ala ancha o gorras.
No olvides contar con víveres como agua embotellada y comida fácil de portar, como sándwiches. Finalmente carga con una bolsa de plástico donde recojas tu basura.
A cargarse en Guachimontones
Con sus construcciones en forma de círculos concéntricos, el sitio prehispánico de los Guachimontones también es una opción para cargarse de energía durante este equinoccio. En el Occidente de México, en Teuchitlán, se encuentran este centro ceremonial y antiguo asentamiento prehispánico.Los festejos de energía se acompañan con temazcales, un sendero artesanal, talleres experimentales y de juegos tradicionales, ritual indigenista nocturno, encuentro cultural de pueblos indígenas, senderos para pasear a caballo y hasta conciertos de rock. También se encuentra un área gastronómica donde se puede disfrutar de ricos platillos representativos del lugar como pipián, ancas de rana, así como bebidas ancestrales como tejuino o jugo de caña.
Para llegar
El sitio arqueológico Guachimontones se localiza a una hora de camino de Guadalajara, tomando la carretera a Tepic y luego la desviación a Tequila por la carretera libre, para posteriormente seguir hacia Tala y finalmente hacia Teuchitlán. El lugar está abierto de 9:00 de la mañana a 18:00 o 19:00 horas, dependiendo del horario de verano/invierno.
La empresa Andares de México ofrece paquetes de tour a este lugar. El recorrido tiene una duración de seis horas y se requiere de un mínimo de cuatro personas para realizarse.
En su página, grupoandares.com, ofrecen la oportunidad de cotizar el costo del viaje. Incluye, transportación desde hotel, guía de turistas bilingüe certificada y entradas al museo. No incluye alimentos ni propinas. Todos esos detalles puede consltarlos y dejar todo listo para hacer un recorrido mucho más relajado.
TOMA NOTA
Listo para todo
-Llevar zapatos cómodos para caminar, preferentemente cerrados (no sandalias por ejemplo) ya que hay insectos.
-Llevar gorra o sombrero y lentes de sol.
-Llevar agua potable embotellada, ya que a veces el calor puede ser intenso.
-Hay guías especializados que ofrecen sus servicios en el sitio.
-Las tarifas a pagar por los servicios del guía son voluntarias. Procura llegar a un acuerdo con el guía antes de contratarlo, para evitar malentendidos.
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