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Nuevos horizontes en la educación

Con dinámicas definidas de orden académico, el uso de la tecnología transforma los procesos de aprendizaje

GUADALAJARA, JALISCO (15/AGO/2011).- Mejorar la enseñanza es una tarea constante. A la par del avance de las Nuevas Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (NTIC), las aulas se transforman ofreciendo potencial para llegar a la vanguardia de las ciencias, aunque el uso incorrecto de estas herramientas deriva en distractores de los procesos educativos.

Fernando Escobar Zúñiga, profesor investigador del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), señala que las NTIC transforman los procesos educativos en diversos niveles: el de las posibilidades y lo que estamos realmente haciendo, “porque a veces generamos una pobre imagen de la realidad al magnificar su uso”.

“El aula está cambiada”, menciona, y ejemplifica que a nivel general todas las aulas en la universidad jesuita están equipadas con tecnología de uso expositivo (cañón proyector, pantalla de proyección, conexión para laptop y acceso a internet).

A la par, se cuenta con recursos en línea que facilitan y potencian la incorporación, consulta e intercambio de información, además de que se disponen actividades escolares con recursos a los que no se tiene acceso en papel.

Herramienta más común

Dentro de las NTIC, la laptop es la herramienta más potente en las universidades, reconoce el académico, “porque es la computadora más integrada e integral que tienes”.

Acerca de los nuevos equipos que aparecen en el mercado, menciona que “la universidad apoya a que se incorporen bajo la perspectiva con que se han incorporado las laptops: lo importante es que el profesor tenga una propuesta”. No obstante, apunta que “lo interesante de estas nuevas tecnologías está aún por venir en tanto hagamos una potencialidad cada vez más intencionada y rica de estos recursos, con respecto de lo que estamos proponiendo en el aula”.

Según una investigación realizada hace tres años en la casa de estudios, cerca de 75% del estudiantado contaba con laptop.

En el caso de las tabletas, “lo que hacemos es mostrar a los estudiantes qué posibilidades están dando; si es una ventaja o si es mera moda, pero la actitud de los profesores es acercarnos cada vez más y hacer pruebas”.

Diferencias de usuario

El uso de las NTIC dentro del aula comienza y se desarrolla con mayor velocidad en el alumnado, puesto que su periodo de actualización en la tecnología es menor que el de los profesores.

“Los alumnos comienzan con las actualizaciones de tecnología porque es otra lógica de usuario, están a la caza de la novedad, sus prioridades están en ello”.

Escobar Zúñiga, miembro del proyecto Educación y Tecnologías del ITESO, menciona que algunos profesores se sienten intimidados y juegan a bloquear al sentirse desconcertados: “Es el tipo de profesor ligado a métodos más tradicionales, y que le resulta amenazante para los procesos de enseñanza. Cuando estoy discursando y parto de que el discurso es la cátedra, tú lo tienes que oír, pero resulta que el alumno empieza por su cuenta a ver al autor que tú estás citando”.

Para subsanar estos conflictos, indica que la casa de estudios brinda respaldo sistemático a los profesores para cualquier intervención de tipo tecnológico, aunque resalta que “hay profesores que no se amilanan por estas cosas, y cuando el alumno llega con el Blackberry y les dice que desde ahí está trabajando, se acercan para que les muestren cómo trabajan”.

El estudiante está convirtiéndose en un creador. Constantemente nuestro ejercicio era “resuélveme este ejercicio, este caso o tal operación, pero cada vez más tenemos al estudiante con propuestas creativas y cada vez con mayor calidad”.

Distracciones por malas dinámicas

Las Nuevas Tecnologías de la Iinformación y las Comunicaciones también pueden volverse un distractor y corromper el proceso educativo. No obstante, Escobar Zúñiga subraya que esto depende de las dinámicas que el profesor genere.

“La clave está en formular actividades bien definidas de orden académico, que detonen procesos de aprendizaje en el estudiante; y no sólo en dotar al estudiante de recursos para que acceda a todo lo que se le vaya atravesando”.

Indica que con base en estudios, en el momento en que el profesor hace una propuesta de usos académicos de la tecnología, baja el uso de tipo social y se incrementa el de aplicaciones académicas. El uso académico se coloca por sobre otros usos como escuchar música, jugar, estar en el chat y similares.

“Estamos dando pasos en las universidades para hacer un uso académico de las NTIC, pero nos falta mucho por crecer, porque hay mucha gente que aún no está ha accedido a ellas; no son de su uso personal y la clave es que las hagan suyas”.

''Lo interesante está por venir en tanto hagamos una potencialidad cada vez más intencionada y rica con respecto de lo que proponemos en el aula.''

Fernando Escobar Zúñiga, profesor investigador del ITESO.
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