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Maravilla de la ingeniería

El diseño pretende ser innovador y emplea elementos que lo hacen lucir aerodinámico

GUADALAJARA, JALICO (25/MAR/2017).- En la industria automotriz, existe un plano superior a los demás, como si se tratara del firmamento de los coches. Desafortunadamente, pocos son los que tienen acceso a él, pues aquí se encuentran a los vehículos de mayor vocación deportiva, entre ellos el nuevo McLaren 720S, que llegó para continuar el legado británico.

El diseño, como suele ser costumbre en esta armadora, pretende ser innovador y emplea infinidad de elementos que lo hacen lucir aerodinámico. El cofre es pequeño, al igual que los grupos ópticos frontales, envueltos en un amplio marco en acabado negro brillante; carece de una tradicional parrilla, pero en cambio obtiene una fascia con un par de entradas de aire frontales en la parte inferior; los salpicaderos son prominentes, al igual que su contraparte trasera.

Los costados exhiben un generoso extractor de calor en la parte delantera de las puertas, así como espejos laterales amplios y un tanto alejados de la carrocería. La parte posterior incorpora una pronunciada bajante, que se une con un trazo plano que corre hacia el final de ese deportivo; las calaveras son delgadas, y justo unos centímetros debajo de ellas se colocan las salidas de escape, justo por encima de su posición tradicional.

El interior de la cabina, que solo es de dos asientos, cuenta con un bajo perfil, muy al estilo de un clásico deportivo, aunque con un par de elementos tecnológicos complementarios. Las bancas son de corte deportivo y son adornadas por costuras aparentes al color de la carrocería, así como unos flequillos en el mismo tono. Además, el tablero y paneles son forrados en cuero y Alcantara, acompañado de incrustaciones de fibra de carbono.}

En materia de infoentretenimiento, cuenta con una pequeña pantalla central táctil, aunado a un número discreto de botones. El panel de instrumentos es completamente digital y es capaz de ser personalizado, para así poder mostrar información como temperatura del motor; tacómetro o velocímetro, por ejemplo.

El ramo de la mecánica está compuesto por un motor V8 de 4.0 litros de desplazamiento, mismo que en la marca lleva la nomenclatura en código “M840T”. Este propulsor es colocado en la parte trasera/central del vehículo, acopla un turbocompresor por bancada, por lo que logra el desarrollo de 720 caballos de fuerza, potencia mandada siempre al eje trasero.

Para acompañar a este “corazón” la armadora inglesa liga una caja de cambios automática de siete marchas y doble embrague.

La reducción de peso fue vital para las grandes prestaciones de este exótico vehículo, pues según la marca la implementación de dicho material le ayudan a ahorrar un promedio de 47 kilogramos.

También, según datos de McLaren, este bólido logra una aceleración de 0-100 km/h en apenas 2.9 segundos.

El fabricante ya ofrece a este vehículo en Europa, que aunque no anuncia su precio oficial, ya ha logrado poner en lista a un buen número de unidades en el Viejo Continente.

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