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Intolerancia a la lactosa, causa más frecuente de consulta en bebés
La intolerancia a la lactosa se debe a que los menores no puede digerir el azúcar que contiene la leche
IMSS refieren que el síndrome llamado
Intolerancia a la Lactosa, es una de las causas más frecuentes de consulta en niños menores de un año, ya que provoca diarrea incontrolable, generada por la ingesta del azúcar que contiene la leche, conocida como lactosa.
La directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 33 del IMSS en Reynosa, Araceli Magdalena García Hernández, refirió que la intolerancia a la lactosa es uno de los padecimientos más comunes entre los nonatos e infantes en esta región.
Explicó que para digerir el azúcar de la leche, a partir del tercer mes de gestación, las células del tubo digestivo del ser humano deben de sintetizar una enzima llamada lactasa, que deberá desarrollarse progresivamente, hasta lograr su máxima actividad en el primer año de vida.
Destacó que al no poder digerir el azúcar de la leche, ésta pasa directamente al colon, donde las bacterias la fermentan y producen cambios osmóticos, gases y ácidos grasos de cadena corta, que provocan un alto contenido de líquidos en las evacuaciones de los niños, al igual que ácidos, gases y lactosa.
García Hernández informó que en 2014, el IMSS Tamaulipas atendió en los servicios de Medicina Familiar, unos 842 casos de niños menores a un año con este padecimiento.
"Un diagnóstico oportuno, por medio de la historia clínica y la exploración física del niño en ocasiones es suficiente, sin embargo, se sugiere realizar otras pruebas y estudios complementarios que lleven a comprobar la presencia de este padecimiento" dijo.
Agregó que entre los tratamientos indicados destaca la reducción de la lactosa adicionando agua a la leche, o bien indicando una fórmula de las que existen en el mercado.
Apuntó que en los primeros meses de vida, la leche es el principal alimento de los bebes, y que la opción de restringir la lactosa no debe evitar el consumo de los nutrientes necesarios para preservar la salud del niño y su desarrollo.
Destacó que independientemente del tratamiento a seguir, es muy importante vigilar el estado de hidratación y de ser posible, continuar alimentando con el seno materno, ya que además de todas las propiedades benéficas que la leche materna aporta al bebé, ésta reduce la sintomatología, a pesar de su concentración de lactosa.
Finalmente, la titular de clínica del IMSS enfatizó la importancia de que las madres acudan al médico, al detectar síntomas de diarrea en el bebé, a fin de que reciba la atención adecuada y se evite poner en riesgo la salud del menor.
REYNOSA TAMAULIPAS (06/JUN/2015).- Especialistas del
La directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 33 del IMSS en Reynosa, Araceli Magdalena García Hernández, refirió que la intolerancia a la lactosa es uno de los padecimientos más comunes entre los nonatos e infantes en esta región.
Explicó que para digerir el azúcar de la leche, a partir del tercer mes de gestación, las células del tubo digestivo del ser humano deben de sintetizar una enzima llamada lactasa, que deberá desarrollarse progresivamente, hasta lograr su máxima actividad en el primer año de vida.
Destacó que al no poder digerir el azúcar de la leche, ésta pasa directamente al colon, donde las bacterias la fermentan y producen cambios osmóticos, gases y ácidos grasos de cadena corta, que provocan un alto contenido de líquidos en las evacuaciones de los niños, al igual que ácidos, gases y lactosa.
García Hernández informó que en 2014, el IMSS Tamaulipas atendió en los servicios de Medicina Familiar, unos 842 casos de niños menores a un año con este padecimiento.
"Un diagnóstico oportuno, por medio de la historia clínica y la exploración física del niño en ocasiones es suficiente, sin embargo, se sugiere realizar otras pruebas y estudios complementarios que lleven a comprobar la presencia de este padecimiento" dijo.
Agregó que entre los tratamientos indicados destaca la reducción de la lactosa adicionando agua a la leche, o bien indicando una fórmula de las que existen en el mercado.
Apuntó que en los primeros meses de vida, la leche es el principal alimento de los bebes, y que la opción de restringir la lactosa no debe evitar el consumo de los nutrientes necesarios para preservar la salud del niño y su desarrollo.
Destacó que independientemente del tratamiento a seguir, es muy importante vigilar el estado de hidratación y de ser posible, continuar alimentando con el seno materno, ya que además de todas las propiedades benéficas que la leche materna aporta al bebé, ésta reduce la sintomatología, a pesar de su concentración de lactosa.
Finalmente, la titular de clínica del IMSS enfatizó la importancia de que las madres acudan al médico, al detectar síntomas de diarrea en el bebé, a fin de que reciba la atención adecuada y se evite poner en riesgo la salud del menor.
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