Suplementos

Hasta la mitad de la población tapatía puede tener amibas en verano

Las amibas son microorganismos que proliferan en el intestino del ser humano y otros mamíferos

GUADALAJARA, JALISCO (16/ABR/2015).- En el verano puede haber hasta 50 por ciento de la población en la zona metropolitana de Guadalajara infectada por parásitos como amibas o Giardia lamblia, aseveró el investigador Mario Alberto Ramírez Herrera.

El también profesor del Centro Universitario de Ciencias de la Salud agregó que en otras épocas del año la prevalencia puede ser de un 30 por ciento o menos, hasta siete por ciento.

Mencionó que la Giardia lamblia y las amibas son microorganismos que proliferan en el intestino del ser humano y otros mamíferos.

Comentó que mientras son arrastrados por el contenido intestinal, gracias al movimiento peristáltico, se transforman en quistes, de esta forma y ya expulsados pueden resistir el medio ambiente externo.

Precisó que son capaces de infectar a otros organismos por medio de agua y alimento contaminados, "por ejemplo, vegetales regados con aguas negras".

Indicó que otra forma de transmisión de los parásitos de manera más directa es al consumir alimentos preparados por personas que no se lavaron las manos después de ir al baño, con lo que se da una secuencia de ano-mano-boca.

Dijo que los dos parásitos mencionados tienen manifestaciones parecidas en el organismo: pueden ocasionar diarreas fuertes durante una infección aguda, "en el caso de la amiba, si la atención no es oportuna es posible que provoque daño en la mucosa intestinal y la muerte por deshidratación".

Apuntó que en el caso de la Giardia, aunque el cuadro diarreico sea fuerte con el tiempo empieza a autolimitarse, el organismo genera sistemas de resistencia y defensa, por lo tanto la infección no provoca la muerte.

"Sin embargo, a diferencia de la infección por amibas, puede generar síndrome de mala absorción, que llega a provocar en niños diarreas intermitentes, cuadros de desnutrición, retardo en el crecimiento corporal, bajo rendimiento escolar y condiciones que pueden generar una mayor susceptibilidad a desarrollar otro tipo de enfermedades".

Afirmó que en personas adultas la giardiasis puede pasar desapercibida, "podría presentar cuadros diarreicos tres, cuatro o cinco veces al año, que eventualmente incidirían en una baja productividad y ausencias en el trabajo".

Resaltó las medidas preventivas como lavarse las manos después de ir al baño, antes de preparar alimentos o tras estar en contacto con objetos contaminados con tierra, además de lavar frutas y verduras.

Exhortó a tener cuidado con el agua que se consume y que no haya heces fecales de animales silvestres o domésticos alrededor de la casa.

Detalló que consumir alimentos en la calle incrementa las probabilidades de desarrollar amebiasis y giardiasis, "por eso la población en edad productiva con frecuencia presenta infecciones por Giardia o amibas".

Advirtió que muchas drogas antiparasitarias pueden generar efectos secundarios como cefaleas, vómito, dolor abdominal y vértigo.

"Cuando se experimentan esos síntomas suelen abandonar el tratamiento, lo que da la oportunidad a los parásitos de generar mecanismos de resistencia contra las drogas antiparasitarias y aparecen entonces cepas cada vez más resistentes, lo que genera que los medicamentos existentes pierdan su eficacia", concluyó.
Síguenos en

Temas

Sigue navegando