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Explorando el mundo
El bufet
La familia García se fue el pasado puente a un lujoso hotel de playa y además de todo lo encantador y bello del hotel, lo que más les impresionó fue el enorme restaurante con una exquisita vista al mar y unos suculentos manjares a todas horas del día.
El inventor del “todo incluido” hizo una gran aportación al esquema de viajes tradicional y ha revolucionado el estilo de descanso.
Eso de poder tomar los alimentos que sean y prepararte los platillos a tu gusto, con las mezclas más extrañas y particulares que se te antojen, es verdaderamente una aventura para el paladar.
Desde la decoración de la barra de frutas, las carnes frías y la variedad de quesos, hasta la preparación de todo tipo de huevos al gusto, pastelillos, gelatinas y aguas de frutas frescas. Hace que el placer de comer en abundancia y con gran variedad, se convierta en uno de los atractivos principales del turista.
Ya no es sólo tirarte en la playa bajo la sombra de una palmera, sino además estar seguro de que podrás tomarte las bebidas que quieras, en el momento que se te plazca, sin ni si quiera estar preocupado por el dinero o la firma para pagarlas.
Comer y beber todo lo que quieras se transforma en uno de los sutiles placeres mas atractivos de los viajeros actuales. Sólo la dieta personal y los propios límites serán el freno para no convertirse en un devorador de todas las delicias que se pueden ingerir.
Si la sensación de tomar el Sol y leer un libro a la orilla de la alberca, rodeado de un ambiente de bellos jardines, palmeras y una vista al amar acompañado del canto de las olas, es un atractivo mayúsculo, ahora el estómago encuentra su mayor placer en los famosos bufets, que atrapan a cualquier comensal con las tentaciones culinarias más exóticas y seductoras.
Hay personas que de los viajes recuerdan más lo que comieron que lo que vieron,así que calculemos que uno de los imanes más importantes de un lugar turístico, está en los placeres del paladar.
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