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Explorando el mundo
Un puente envidiable
Claro que muchos se fueron a Tapalpa, pero otros lo hicieron a sus habituales lugares. Lo que más llama la atención, es el imán en que se ha convertido el Pueblo Mágico para celebrar los acontecimientos históricos. Particularmente muchos jóvenes ansiosos de reunirse con sus amigos y echarse unas copas encima, para incrementar su emoción de libertad.
Las ciudades se convierten en espacios que no atraen los fines de semana, cada vez es mas evidente que hay que salir fuera, con tal de no quedarse atrapado en las rutinas y el aburrimiento de todos los meses.
Hay que variar, así que se convierte en la más puntual oportunidad para hacer de los alrededores de la gran metrópoli, unos lugares aptos para recibir a todos los urgidos de distracción y distancia de la agobiante ciudad.
La gente no quiere lugares para sólo visitar, ni tampoco de entrada por salida, busca en dónde quedarse y que por supuesto no cueste mucho.
Digamos que el ejemplo de Tapalpa, es una muestra de lo que las nuevas generaciones necesitan para aprovechar las vacaciones y los puentes.
Ciudades especiales para entretener sanamente a toda la familia, espacios abiertos en dónde se pueda gozar de la naturaleza, al mismo tiempo que se cuenta con todo lo necesarios para seguir disfrutando del entretenimiento habitual. Si no hay televisión con cable para ver series o partidos de fútbol, ni se atrevan a realizarlos, porque conozco jóvenes que lo primero que preguntan es sobre la existencia de las facilidades tecnológicas como cable e internet, y si no hay, ni de chiste van.
Los periodos de vacaciones y los puentes son la mejor prueba de lo que una ciudad ofrece como alternativa para aprovecharlos. Si algo tiene Guadalajara, es precisamente magníficas opciones a dónde ir. Ya estamos entrando en la era en que quedarse en casa los fines de semana es de ancianos; hay que salir a algún lugar, especialmente si lo que se festeja son las Fiestas Patrias.
Benditos puentes.
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