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¿Cómo alcanzar la eterna juventud?
Conoce cinco hábitos que ayudarán a tu cuerpo a mantenerse saludable pese al paso del tiempo
GUADALAJARA, JALISCO (08/FEB/2014).- Conoce y practica cinco hábitos que ayudarán a tu cuerpo a mantenerse saludable, aún y en contra del paso del tiempo
De acuerdo con el profesor de la Universidad Complutense de Madrid, Francisco Mora, a los 30 años se empieza a deteriorar el programa genético: “aumenta el peso, baja el metabolismo y los niveles de ciertas hormonas, aparecen cambios en los patrones de sueño, se pierde memoria”. Sin embargo, en el libro ¿Se puede retrasar el envejecimiento del cerebro?, el catedrático describe al envejecimiento como un proceso fisiológico que puede cursarse con salud.
“Es cierto que en esta etapa aumentan las probabilidades de padecer muchas enfermedades. Pero es cierto también que la mayoría de las mismas dependen sobremanera del estilo de vida que desarrolle el individuo”, escribe Francisco Mora, quien urge a cambiar drásticamente los estilos de vida para retrasar el envejecimiento.
Estudios recientes revelan que la esperanza de vida depende sólo en un 25 por ciento de la genética, mientras que el 75 por ciento restante se atribuye a factores ambientales. Para los investigadores IIchi Lee y Jessie Jones, el individuo tiene el poder de controlar al menos 70% de su proceso de envejecimiento por medio de las decisiones que toma a lo largo de la vida en lo que se refiere a dieta, ejercicio, salud mental, aprendizaje y relaciones.
En Una guía de educación cerebral para un envejecimiento exitoso, Lee y Jones señalan que “el bienestar físico, el estilo de vida, el peso, la dieta y el ejercicio son factores mucho más importantes para la salud cerebral que la genética o la edad”.
Para el español Francisco Mora, comer menos y de modo saludable y hacer ejercicio moderado puede alargar la vida y mantener el cerebro activo y productivo. “Hacer ejercicio mental, viajar, intentar adaptarse a los cambios sociales, no vivir solo, no fumar, beber con moderación y no entrar en la dinámica de un estrés sin control, dormir bien, mantener vibrantes nuestras emociones, dar sentido a la vida y ser agradecido, no sólo pueden retrasar los procesos del envejecimiento que deterioran nuestro cerebro, sino que ello se logre sin enfermedades”.
PARA SABER
La TV perjudica
The New York Times publicó un estudio según el cual un adulto mayor de 25 años reduce su esperanza de vida 21.8 minutos por cada hora pasada frente a la TV; mientras que fumar un solo cigarro recorta la esperanza de vida aproximadamente 11 minutos. “Un adulto que dedica en promedio seis horas diarias a ver televisión puede esperar vivir 4.8 años menos que otro que no lo hace”.
CAUSAS
¿Por qué envejecemos?
Según el artículo “Las características del envejecimiento” publicado por la revista Cell, son cuatro las causas primarias a las que hay que estar atentos:
> Las lesiones en los genes que pueden ser de origen externo (radiación solar o tóxicos químicos) o endógenas.
> Desgaste en el extremo de los cromosomas. “Con el tiempo, los mecanismos para reparar estas fundas se deshacen y la célula o no se puede replicar o muere”.
> Enfermedades degenerativas por proteínas fuera de control. “El funcionamiento adecuado de las células tiene que ver, entre otros, con una correcta eliminación de las proteínas defectuosas o sobrantes”.
> Influencia del ambiente. “Los hábitos de vida y la exposición al ambiente influyen no solo en los genes, sino en cómo se expresan.
• Mitos relacionados con el cerebro y la edad
Mito: el deterioro cerebral grave es inevitable. El Dr. Gene Cohen, director del Centro del Envejecimiento, la Salud y las Humanidades en el George Washington University Medical Center ha señalado que con un estilo de vida apropiado y con los desafíos que enfrenta, el cerebro puede, en muchos aspectos, volverse más fuerte con la edad.
Mito: me estoy quedando sordo porque mis células cerebrales se están muriendo. Perdemos células cerebrales con una frecuencia consistente a lo largo de la vida, debido a causas que van desde el estrés y las deficiencias nutricionales, hasta toxinas en el ambiente.
Mito: el cerebro adulto no puede formar nuevas conexiones. El cerebro puede producir nuevas células nerviosas en algunas áreas del cerebro relacionadas con la memoria, fenómeno que responde en particular al ejercicio físico regular. Los estudios sugieren que el ejercicio regular lleva más sangre rica en oxígeno al cerebro. Mientras más estimulante e intelectualmente desafiante hagamos nuestra vida, mayores son nuestras posibilidades de mantener nuestro cerebro lleno de energía, alerta y ágil.
Fuente: “Una guía de educación cerebral para un envejecimiento exitoso”, IIchi Lee y Jessie Jones.
Cinco hábitos saludables para un cerebro en proceso de envejecimiento
1. Haz ejercicio con regularidad. El ejercicio cardiovascular vigoroso al menos 30 minutos 3 veces por semana lleva sangre rica y oxigenada al cerebro. El entrenamiento de fuerza, produce también más energía para el cerebro.
2. Reduce el estrés. Éste es la causa principal de las enfermedades debido a los efectos de la hormona cortisol. Demasiado cortisol puede desgastar el hipocampo, el cual se relaciona con la memoria. El ejercicio y la meditación pueden ayudar.
3. Duerme mucho. La falta de sueño es la causa número uno de una función mental confusa y fragmentada. Estudios muestran que las personas que duermen al menos ocho horas todas las noches pueden evitar una parte del deterioro cerebral relacionado con la edad.
4. Ingiere alimentos sanos y bajos en grasa. Las subidas repentinas de glucosa y los depósitos de placa grasa producto de la ingesta excesiva de alimentos pueden dañar el cerebro. Una dieta más baja en calorías promueve una mejor circulación y también controla el peso, lo cual lleva a una presión sanguínea menor.
5. Ejercita tu cerebro. Trata de hacer o aprender algo nuevo cada semana, ya sea que escribas una carta con tu mano no dominante o que desarrolles el conocimiento de un nuevo idioma. Desafiar al cerebro con tareas y actividades novedosas crea nuevos senderos neurales, lo hace más versátil y mejora su capacidad para realizar tareas múltiples.
Fuente: “Una guía de educación cerebral para un envejecimiento exitoso”, IIchi Lee y Jessie Jones
Claves que ayudan a retrasar el envejecimiento del cerebro
> Comer pescado, frutas, verduras y aceite de oliva.
> Ejercitarse; esta práctica actúa como antioxidante, lo que conlleva a una producción de energía más efectiva y a la capacidad de reparación celular del cerebro.
> Hacer ejercicio mental todos los días. Leer es una gran opción; así como resolver crucigramas.
> Dormir bien, pues neutraliza los radicales libres que producen el deterioro de las neuronas.
• Más feliz=Más longevo
Una revisión de más de 160 estudios científicos –que abordan la conexión entre el estado positivo de la mente y la longevidad- dirigida por Ed Diener, profesor de la Universidad de Illinois, revela “pruebas claras y convincentes de que la gente más feliz tiende a tener mejor salud y a vivir más”.
El ejercicio señaló en el laboratorio que “los comportamientos vinculados al optimismo redujeron las hormonas relacionadas con el estrés, incrementaron la función inmunológica y ayudaron a recuperar al corazón tras un esfuerzo excesivo”.
A su vez, un equipo de investigadores del Albert Einstein College of Medicine y de la Universidad Yeshiva, en Estados Unidos, demostró que “los rasgos de la personalidad como ser extrovertido, optimista, tolerante o estar comprometido en actividades que ayudan a los demás también pueden contribuir a una mayor longevidad”.
Los hallazgos del estudio que incluye el análisis de la personalidad de una población de más de 250 judíos ashkenazíes, entre los 95 y 100 años, manifiestan que los centenarios “reúnen cualidades que reflejaban claramente una actitud positiva hacia la vida: la mayoría eran extrovertidos, optimistas y de trato fácil, y para ellos la risa es parte importante de su vida”.
La edad máxima
El investigador Francisco Mora subraya que, desde los primeros escritos que se conocen, la edad máxima de la vida humana se ha estimado en alrededor de los 110-120 años. Actualmente, “tanto en Europa como en Estados Unidos se cifra en alrededor de 500,000 las personas que ya tienen una edad centenaria. La predicción para el 2050 se cifra en alrededor de los tres millones”.
• Una población mundial más vieja
Una investigación publicada por la revista The Lancet afirma que “en el siglo XX la esperanza de vida en los países ricos aumentó en tres décadas y, además, desde 1840 nunca hubo signos de desaceleración en esta tendencia”. Para los autores del estudio, existe un límite que podría situarse alrededor de los 150 años. “La gente no está solamente viviendo más que antes, sino que vive más con menos discapacidades y limitaciones”.
La misma publicación señala que “la mayoría de los niños nacidos a partir del 2000 podrá celebrar sus cien años, y además gozará de muy buena salud… La longevidad no tiene por qué estar relacionada con un nivel de discapacidad elevado”.
De acuerdo con el profesor de la Universidad Complutense de Madrid, Francisco Mora, a los 30 años se empieza a deteriorar el programa genético: “aumenta el peso, baja el metabolismo y los niveles de ciertas hormonas, aparecen cambios en los patrones de sueño, se pierde memoria”. Sin embargo, en el libro ¿Se puede retrasar el envejecimiento del cerebro?, el catedrático describe al envejecimiento como un proceso fisiológico que puede cursarse con salud.
“Es cierto que en esta etapa aumentan las probabilidades de padecer muchas enfermedades. Pero es cierto también que la mayoría de las mismas dependen sobremanera del estilo de vida que desarrolle el individuo”, escribe Francisco Mora, quien urge a cambiar drásticamente los estilos de vida para retrasar el envejecimiento.
Estudios recientes revelan que la esperanza de vida depende sólo en un 25 por ciento de la genética, mientras que el 75 por ciento restante se atribuye a factores ambientales. Para los investigadores IIchi Lee y Jessie Jones, el individuo tiene el poder de controlar al menos 70% de su proceso de envejecimiento por medio de las decisiones que toma a lo largo de la vida en lo que se refiere a dieta, ejercicio, salud mental, aprendizaje y relaciones.
En Una guía de educación cerebral para un envejecimiento exitoso, Lee y Jones señalan que “el bienestar físico, el estilo de vida, el peso, la dieta y el ejercicio son factores mucho más importantes para la salud cerebral que la genética o la edad”.
Para el español Francisco Mora, comer menos y de modo saludable y hacer ejercicio moderado puede alargar la vida y mantener el cerebro activo y productivo. “Hacer ejercicio mental, viajar, intentar adaptarse a los cambios sociales, no vivir solo, no fumar, beber con moderación y no entrar en la dinámica de un estrés sin control, dormir bien, mantener vibrantes nuestras emociones, dar sentido a la vida y ser agradecido, no sólo pueden retrasar los procesos del envejecimiento que deterioran nuestro cerebro, sino que ello se logre sin enfermedades”.
PARA SABER
La TV perjudica
The New York Times publicó un estudio según el cual un adulto mayor de 25 años reduce su esperanza de vida 21.8 minutos por cada hora pasada frente a la TV; mientras que fumar un solo cigarro recorta la esperanza de vida aproximadamente 11 minutos. “Un adulto que dedica en promedio seis horas diarias a ver televisión puede esperar vivir 4.8 años menos que otro que no lo hace”.
CAUSAS
¿Por qué envejecemos?
Según el artículo “Las características del envejecimiento” publicado por la revista Cell, son cuatro las causas primarias a las que hay que estar atentos:
> Las lesiones en los genes que pueden ser de origen externo (radiación solar o tóxicos químicos) o endógenas.
> Desgaste en el extremo de los cromosomas. “Con el tiempo, los mecanismos para reparar estas fundas se deshacen y la célula o no se puede replicar o muere”.
> Enfermedades degenerativas por proteínas fuera de control. “El funcionamiento adecuado de las células tiene que ver, entre otros, con una correcta eliminación de las proteínas defectuosas o sobrantes”.
> Influencia del ambiente. “Los hábitos de vida y la exposición al ambiente influyen no solo en los genes, sino en cómo se expresan.
• Mitos relacionados con el cerebro y la edad
Mito: el deterioro cerebral grave es inevitable. El Dr. Gene Cohen, director del Centro del Envejecimiento, la Salud y las Humanidades en el George Washington University Medical Center ha señalado que con un estilo de vida apropiado y con los desafíos que enfrenta, el cerebro puede, en muchos aspectos, volverse más fuerte con la edad.
Mito: me estoy quedando sordo porque mis células cerebrales se están muriendo. Perdemos células cerebrales con una frecuencia consistente a lo largo de la vida, debido a causas que van desde el estrés y las deficiencias nutricionales, hasta toxinas en el ambiente.
Mito: el cerebro adulto no puede formar nuevas conexiones. El cerebro puede producir nuevas células nerviosas en algunas áreas del cerebro relacionadas con la memoria, fenómeno que responde en particular al ejercicio físico regular. Los estudios sugieren que el ejercicio regular lleva más sangre rica en oxígeno al cerebro. Mientras más estimulante e intelectualmente desafiante hagamos nuestra vida, mayores son nuestras posibilidades de mantener nuestro cerebro lleno de energía, alerta y ágil.
Fuente: “Una guía de educación cerebral para un envejecimiento exitoso”, IIchi Lee y Jessie Jones.
Cinco hábitos saludables para un cerebro en proceso de envejecimiento
1. Haz ejercicio con regularidad. El ejercicio cardiovascular vigoroso al menos 30 minutos 3 veces por semana lleva sangre rica y oxigenada al cerebro. El entrenamiento de fuerza, produce también más energía para el cerebro.
2. Reduce el estrés. Éste es la causa principal de las enfermedades debido a los efectos de la hormona cortisol. Demasiado cortisol puede desgastar el hipocampo, el cual se relaciona con la memoria. El ejercicio y la meditación pueden ayudar.
3. Duerme mucho. La falta de sueño es la causa número uno de una función mental confusa y fragmentada. Estudios muestran que las personas que duermen al menos ocho horas todas las noches pueden evitar una parte del deterioro cerebral relacionado con la edad.
4. Ingiere alimentos sanos y bajos en grasa. Las subidas repentinas de glucosa y los depósitos de placa grasa producto de la ingesta excesiva de alimentos pueden dañar el cerebro. Una dieta más baja en calorías promueve una mejor circulación y también controla el peso, lo cual lleva a una presión sanguínea menor.
5. Ejercita tu cerebro. Trata de hacer o aprender algo nuevo cada semana, ya sea que escribas una carta con tu mano no dominante o que desarrolles el conocimiento de un nuevo idioma. Desafiar al cerebro con tareas y actividades novedosas crea nuevos senderos neurales, lo hace más versátil y mejora su capacidad para realizar tareas múltiples.
Fuente: “Una guía de educación cerebral para un envejecimiento exitoso”, IIchi Lee y Jessie Jones
Claves que ayudan a retrasar el envejecimiento del cerebro
> Comer pescado, frutas, verduras y aceite de oliva.
> Ejercitarse; esta práctica actúa como antioxidante, lo que conlleva a una producción de energía más efectiva y a la capacidad de reparación celular del cerebro.
> Hacer ejercicio mental todos los días. Leer es una gran opción; así como resolver crucigramas.
> Dormir bien, pues neutraliza los radicales libres que producen el deterioro de las neuronas.
• Más feliz=Más longevo
Una revisión de más de 160 estudios científicos –que abordan la conexión entre el estado positivo de la mente y la longevidad- dirigida por Ed Diener, profesor de la Universidad de Illinois, revela “pruebas claras y convincentes de que la gente más feliz tiende a tener mejor salud y a vivir más”.
El ejercicio señaló en el laboratorio que “los comportamientos vinculados al optimismo redujeron las hormonas relacionadas con el estrés, incrementaron la función inmunológica y ayudaron a recuperar al corazón tras un esfuerzo excesivo”.
A su vez, un equipo de investigadores del Albert Einstein College of Medicine y de la Universidad Yeshiva, en Estados Unidos, demostró que “los rasgos de la personalidad como ser extrovertido, optimista, tolerante o estar comprometido en actividades que ayudan a los demás también pueden contribuir a una mayor longevidad”.
Los hallazgos del estudio que incluye el análisis de la personalidad de una población de más de 250 judíos ashkenazíes, entre los 95 y 100 años, manifiestan que los centenarios “reúnen cualidades que reflejaban claramente una actitud positiva hacia la vida: la mayoría eran extrovertidos, optimistas y de trato fácil, y para ellos la risa es parte importante de su vida”.
La edad máxima
El investigador Francisco Mora subraya que, desde los primeros escritos que se conocen, la edad máxima de la vida humana se ha estimado en alrededor de los 110-120 años. Actualmente, “tanto en Europa como en Estados Unidos se cifra en alrededor de 500,000 las personas que ya tienen una edad centenaria. La predicción para el 2050 se cifra en alrededor de los tres millones”.
• Una población mundial más vieja
Una investigación publicada por la revista The Lancet afirma que “en el siglo XX la esperanza de vida en los países ricos aumentó en tres décadas y, además, desde 1840 nunca hubo signos de desaceleración en esta tendencia”. Para los autores del estudio, existe un límite que podría situarse alrededor de los 150 años. “La gente no está solamente viviendo más que antes, sino que vive más con menos discapacidades y limitaciones”.
La misma publicación señala que “la mayoría de los niños nacidos a partir del 2000 podrá celebrar sus cien años, y además gozará de muy buena salud… La longevidad no tiene por qué estar relacionada con un nivel de discapacidad elevado”.
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