Suplementos
Ancianos, con más riesgo de tener alguna discapacidad
Estiman que cuatro de cada 10 llegan a perder en algún grado su independencia
IMSS Jalisco del turno nocturno, Rubén Santoyo Ayala, dijo que a más edad, mayores riesgos de sufrir alguna lesión que lleve a personas adultas mayores a la discapacidad.
Añadió que, sin embargo, la vejez no es sinónimo de incapacidad física, por lo que estas condiciones pueden ser prevenibles o por lo menos detectarse de manera oportuna para impedir que el deterioro avance.
Resaltó la importancia de que la persona adulta mayor no descuide su alimentación y se mantenga en un buen peso corporal para evitar acelerar el deterioro de sus articulaciones.
Afirmó que es significativo no tener obesidad, "porque esta te afectará articulaciones y rodillas, tienes que tener alimentación adecuada, rica en calcio y vitamina D para fortalecer huesos y prevenir fracturas en mayores de los 50 años, sobre todo en la mujer".
El experto detalló que artritis, osteoporosis, alteraciones auditivas y visuales, enfermedades oncológicas y crónico-degenerativas son padecimientos frecuentes entre la población mayor de 60 años que pueden llevarla a una condición de discapacidad.
Así como otras afectaciones como la depresión o las demencias, entre las que se encuentra el Alzheimer.
Santoyo Ayala precisó que gran porcentaje de personas adultas mayores sufren problemas cardiovasculares y son proclives a infartos al miocardio o de tipo cerebrovascular, lo cual puede también dejar secuelas importantes, además de limitar su funcionalidad y movilidad.
Expresó que es fundamental que se mantengan en control patologías como la diabetes y la hipertensión arterial, así como reducir sus niveles de lípidos.
Subrayó que si un paciente mantiene bajos niveles de hemoglobina glicosilada, las posibilidades de sufrir complicaciones vasculares llegan a disminuir hasta 21 por ciento; "entre 25 a 70 por ciento de pacientes diabéticos llega a presentar problemas visuales, siendo los de mayor prevalencia las retinopatías y cataratas.
Estimó que de cada 10 personas adultas mayores, hasta cuatro llegan a presentar algún tipo de discapacidad y perder en algún grado su independencia.
Puntualizó que en el servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital de Especialidades del IMSS Jalisco, las y los pacientes de la tercera edad representan hasta 60 por ciento de quienes requieren de este tipo de terapias, para recuperarse de alguna lesión grave o secuela física.
GUADALAJARA, JALISCO (13/ENE/2016).- El subdirector médico del Hospital de Especialidades del
Añadió que, sin embargo, la vejez no es sinónimo de incapacidad física, por lo que estas condiciones pueden ser prevenibles o por lo menos detectarse de manera oportuna para impedir que el deterioro avance.
Resaltó la importancia de que la persona adulta mayor no descuide su alimentación y se mantenga en un buen peso corporal para evitar acelerar el deterioro de sus articulaciones.
Afirmó que es significativo no tener obesidad, "porque esta te afectará articulaciones y rodillas, tienes que tener alimentación adecuada, rica en calcio y vitamina D para fortalecer huesos y prevenir fracturas en mayores de los 50 años, sobre todo en la mujer".
El experto detalló que artritis, osteoporosis, alteraciones auditivas y visuales, enfermedades oncológicas y crónico-degenerativas son padecimientos frecuentes entre la población mayor de 60 años que pueden llevarla a una condición de discapacidad.
Así como otras afectaciones como la depresión o las demencias, entre las que se encuentra el Alzheimer.
Santoyo Ayala precisó que gran porcentaje de personas adultas mayores sufren problemas cardiovasculares y son proclives a infartos al miocardio o de tipo cerebrovascular, lo cual puede también dejar secuelas importantes, además de limitar su funcionalidad y movilidad.
Expresó que es fundamental que se mantengan en control patologías como la diabetes y la hipertensión arterial, así como reducir sus niveles de lípidos.
Subrayó que si un paciente mantiene bajos niveles de hemoglobina glicosilada, las posibilidades de sufrir complicaciones vasculares llegan a disminuir hasta 21 por ciento; "entre 25 a 70 por ciento de pacientes diabéticos llega a presentar problemas visuales, siendo los de mayor prevalencia las retinopatías y cataratas.
Estimó que de cada 10 personas adultas mayores, hasta cuatro llegan a presentar algún tipo de discapacidad y perder en algún grado su independencia.
Puntualizó que en el servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital de Especialidades del IMSS Jalisco, las y los pacientes de la tercera edad representan hasta 60 por ciento de quienes requieren de este tipo de terapias, para recuperarse de alguna lesión grave o secuela física.
Síguenos en