La búsqueda de soluciones al problema de movilidad urbana en la Zona Metropolitana de Guadalajara ha llevado, en primer término, a la creación y puesta en marcha de la línea uno del sistema de transporte articulado, el Macrobús, cuyo funcionamiento en el corredor Calzada Independencia-Gobernador Curiel ha tenido gran aceptación entre los ciudadanos, y ante ello existe el proyecto de la segunda línea, que comunicaría a los municipios de Zapopan, Guadalajara, Tlaquepaque y tentativamente Tonalá, para la cual incluso ya fue aprobado por el Congreso un endeudamiento por cinco mil 500 millones de pesos.
El proyecto va hacia adelante, señaló ayer el gobernador Emilio González, no obstante las manifestaciones en contra del mismo surgidas previo a la jornada electoral del 5 de julio, así como las propuestas de reorientar el endeudamiento hacia otras alternativas. El mandatario dijo con firmeza que nada frenará el programa para implementar nuevas rutas para conectar con transporte articulado diversos puntos de los municipios conurbados, mismo que se ha puesto en duda a raíz de posicionamientos de diversos sectores políticos, que pretenden derivar los recursos a la edificación de nuevas líneas del Tren Ligero.
En los pocos meses de estar funcionando, el Macrobús ha demostrado a base de eficiencia en el servicio, que se trata de una buena alternativa para resolver el problema de movilidad urbana, tomando en cuenta los recursos económicos de que se dispone. Los ciudadanos le han dado su aprobación, y las manifestaciones en contra sin duda han sido dirigidas con tintes partidistas, haciendo a un lado el interés de las mayorías en beneficio de las minorías. La implementación de la proyectada línea 2, y otras que podrían venir a futuro, le darán a la zona metropolitana un sistema de comunicación vial que favorecerá a cientos de miles de usuarios del transporte colectivo que ahora tienen que enfrentar carencias y deficiencias.
El crecimiento del transporte articulado (Macrobús) de ninguna manera está peleado con la instalación de nuevas rutas del Tren Eléctrico; al contrario, entre ambos sistemas se complementaría un servicio eficiente que la sociedad reclama. Sin embargo, por ahora, de acuerdo a los recursos con que se cuenta, sólo alcanzan para el primero. Ya vendrán otros tiempos... ojalá.
El proyecto va hacia adelante, señaló ayer el gobernador Emilio González, no obstante las manifestaciones en contra del mismo surgidas previo a la jornada electoral del 5 de julio, así como las propuestas de reorientar el endeudamiento hacia otras alternativas. El mandatario dijo con firmeza que nada frenará el programa para implementar nuevas rutas para conectar con transporte articulado diversos puntos de los municipios conurbados, mismo que se ha puesto en duda a raíz de posicionamientos de diversos sectores políticos, que pretenden derivar los recursos a la edificación de nuevas líneas del Tren Ligero.
En los pocos meses de estar funcionando, el Macrobús ha demostrado a base de eficiencia en el servicio, que se trata de una buena alternativa para resolver el problema de movilidad urbana, tomando en cuenta los recursos económicos de que se dispone. Los ciudadanos le han dado su aprobación, y las manifestaciones en contra sin duda han sido dirigidas con tintes partidistas, haciendo a un lado el interés de las mayorías en beneficio de las minorías. La implementación de la proyectada línea 2, y otras que podrían venir a futuro, le darán a la zona metropolitana un sistema de comunicación vial que favorecerá a cientos de miles de usuarios del transporte colectivo que ahora tienen que enfrentar carencias y deficiencias.
El crecimiento del transporte articulado (Macrobús) de ninguna manera está peleado con la instalación de nuevas rutas del Tren Eléctrico; al contrario, entre ambos sistemas se complementaría un servicio eficiente que la sociedad reclama. Sin embargo, por ahora, de acuerdo a los recursos con que se cuenta, sólo alcanzan para el primero. Ya vendrán otros tiempos... ojalá.
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