México
Vacacionistas en Acapulco, sin riesgo tras sismo
El oleaje del mar no es mayor a 40 centímetros; ''al momento'' no hay alerta de tsunami
CIUDAD DE MÉXICO (18/ABR/2014).- Un fuerte sismo de magnitud 7.2 grados sacudió la mañana de este viernes Ciudad de México y el turístico balneario de Acapulco generando escenas de pánico y daños materiales menores, sin que se hayan reportado víctimas.
El servicio geológico de Estados Unidos (USGS, por su siglas en inglés) situó la magnitud del sismo en 7.2 grados mientras el Servicio Sismológico Nacional de México ( SSN) la rebaja a 7 grados en la escala de magnitud de momento.
Según el USGS, el sismo se registró a las 9:27 horas a 36 kilómetros al noroeste de Tecpan, Guerrero, situado sobre la costa del Pacífico, a una profundidad de 24 km.
El coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, reportó en Twitter que las variaciones en el oleaje del mar no son mayores a 40 centímetros y que "al momento" no hay alerta de tsunami.
El temblor se sintió con fuerza en el centro de México, incluida la superpoblada capital, y en regiones del este como Veracruz y del sur como Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
"Permanente monitoreo en los estados donde se sintió el sismo hasta el momento sin daños mayores", señaló Puente.
En la capital mexicana, situada a 490 km al norte de Tecpan, el alcalde Miguel Ángel Mancera señaló que se han producido desalojos preventivos de edificios y caídas de muros sin que haya por el momento lesionados.
Pese a que los capitalinos están habituados a regulares movimientos de tierra, el sismo de este viernes se sintió especialmente fuerte y prolongado.
"Se estaban moviendo muebles y se cayeron mis CDs de una torre de discos. Salí rapidísimo abajo y me olvidé mis llaves", relató Angélica Lasso, de 30 años, después de que fuera evacuado su edificio de tres plantas en el céntrico barrio Roma.
En esa zona se registraron cortes de electricidad y también cayeron vidrios desde la fachada de edificios, constató un periodista de la AFP.
Helicópteros sobrevolaban en la búsqueda de otros posibles daños en la ciudad, cuyas calles estaban prácticamente desiertas por ser Viernes Santo.
Tanto el aeropuerto internacional de Ciudad de México como Pemex reportaron que sus instalaciones funcionan con normalidad.
Pánico en Acapulco
En Acapulco, situado a 105 km al sur de Tecpan, el sismo generó momentos de temor y una evacuación masiva de turistas de los hoteles instalados en su avenida costera.
"Apenas nos preparábamos para bajar a desayunar al restaurante del hotel cuando se nos empezó a mover el piso. Corrimos a la calle por las escaleras desde el quinto piso y sí nos espantamos mucho", reconoció Elia Núñez, llegada del estado de Guanajuato junto a otros seis familiares.
"Se nos movió todo en la alberca. Me espanté por mis hijos, los cargué como pude y salimos del hotel pero nos dio mucho miedo ver el movimiento de las palmeras y los postes", narró Ulises Yam Loye, de Hidalgo.
Otros turistas que estaban en la playa detuvieron la circulación al correr hacia la zona costera de Acapulco, un balneario que está prácticamente lleno de visitantes con motivo de la Semana Santa, principalmente provenientes de Ciudad de México.
Las autoridades siguen recorriendo otras zonas más apartadas de la costa de Guerrero, una empobrecida región donde el año pasado murieron 105 personas por el embate de las lluvias generadas por el huracán Manuel.
El territorio mexicano se encuentra dividido entre cinco placas tectónicas y sus movimientos generan uno de los mayores índices de actividad sísmica en el mundo.
Muchos de esos temblores alcanzan a sentirse en la Ciudad de México por su singular tipo de suelo, ya que una parte de la urbe se asienta sobre un subsuelo fangoso derivado de los lagos que fueron drenados en el Valle de México.
El 19 de septiembre de 1985 un terremoto de magnitud 8,1 destruyó parte de Ciudad de México con un saldo de tres mil 700 muertos, según las actas de defunción del registro civil, aunque organizaciones civiles contabilizaron más de 20 mil 000 fallecidos.
El servicio geológico de Estados Unidos (USGS, por su siglas en inglés) situó la magnitud del sismo en 7.2 grados mientras el Servicio Sismológico Nacional de México ( SSN) la rebaja a 7 grados en la escala de magnitud de momento.
Según el USGS, el sismo se registró a las 9:27 horas a 36 kilómetros al noroeste de Tecpan, Guerrero, situado sobre la costa del Pacífico, a una profundidad de 24 km.
El coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, reportó en Twitter que las variaciones en el oleaje del mar no son mayores a 40 centímetros y que "al momento" no hay alerta de tsunami.
El temblor se sintió con fuerza en el centro de México, incluida la superpoblada capital, y en regiones del este como Veracruz y del sur como Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
"Permanente monitoreo en los estados donde se sintió el sismo hasta el momento sin daños mayores", señaló Puente.
En la capital mexicana, situada a 490 km al norte de Tecpan, el alcalde Miguel Ángel Mancera señaló que se han producido desalojos preventivos de edificios y caídas de muros sin que haya por el momento lesionados.
Pese a que los capitalinos están habituados a regulares movimientos de tierra, el sismo de este viernes se sintió especialmente fuerte y prolongado.
"Se estaban moviendo muebles y se cayeron mis CDs de una torre de discos. Salí rapidísimo abajo y me olvidé mis llaves", relató Angélica Lasso, de 30 años, después de que fuera evacuado su edificio de tres plantas en el céntrico barrio Roma.
En esa zona se registraron cortes de electricidad y también cayeron vidrios desde la fachada de edificios, constató un periodista de la AFP.
Helicópteros sobrevolaban en la búsqueda de otros posibles daños en la ciudad, cuyas calles estaban prácticamente desiertas por ser Viernes Santo.
Tanto el aeropuerto internacional de Ciudad de México como Pemex reportaron que sus instalaciones funcionan con normalidad.
Pánico en Acapulco
En Acapulco, situado a 105 km al sur de Tecpan, el sismo generó momentos de temor y una evacuación masiva de turistas de los hoteles instalados en su avenida costera.
"Apenas nos preparábamos para bajar a desayunar al restaurante del hotel cuando se nos empezó a mover el piso. Corrimos a la calle por las escaleras desde el quinto piso y sí nos espantamos mucho", reconoció Elia Núñez, llegada del estado de Guanajuato junto a otros seis familiares.
"Se nos movió todo en la alberca. Me espanté por mis hijos, los cargué como pude y salimos del hotel pero nos dio mucho miedo ver el movimiento de las palmeras y los postes", narró Ulises Yam Loye, de Hidalgo.
Otros turistas que estaban en la playa detuvieron la circulación al correr hacia la zona costera de Acapulco, un balneario que está prácticamente lleno de visitantes con motivo de la Semana Santa, principalmente provenientes de Ciudad de México.
Las autoridades siguen recorriendo otras zonas más apartadas de la costa de Guerrero, una empobrecida región donde el año pasado murieron 105 personas por el embate de las lluvias generadas por el huracán Manuel.
El territorio mexicano se encuentra dividido entre cinco placas tectónicas y sus movimientos generan uno de los mayores índices de actividad sísmica en el mundo.
Muchos de esos temblores alcanzan a sentirse en la Ciudad de México por su singular tipo de suelo, ya que una parte de la urbe se asienta sobre un subsuelo fangoso derivado de los lagos que fueron drenados en el Valle de México.
El 19 de septiembre de 1985 un terremoto de magnitud 8,1 destruyó parte de Ciudad de México con un saldo de tres mil 700 muertos, según las actas de defunción del registro civil, aunque organizaciones civiles contabilizaron más de 20 mil 000 fallecidos.
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