México
Tren parlamentario
El pleito interno del PRI
En los territorios del Partido Revolucionario Institucional (PRI), anoche prevalecía la visión chisporroteante del encontronazo. A tiro de piedra de que la Cámara de Diputados tenga que autorizar el Presupuesto de Egresos de la Federación, un pleito interno en el PRI protagonizado por Cruz López Aguilar y Luis Videgaray han detenido la negociación final, que tirios y troyanos suponían que no iba a pasar de la noche del jueves, o a más tardar de la de este viernes.
Luis Videgaray es el diputado presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, y el considerado ujier de angora que Enrique Peña Nieto tiene en San Lázaro. Anoche tenía él una bronca con diputados de su mismo partido, el PRI, que ven con preocupación que no alcanzarán recursos para carreteras.
Pero también la tenía con legisladores de los otros dos partidos políticos que son gobierno en las entidades federativas, del PAN y PRD, cuando éstos han reclamado al PRI que la repartición de las reasignaciones destinadas a carreteras -exigua de por sí- la estén realizando los diputados priistas con la intención sobrada de favorecer áreas del país sólo donde el Revolucionario Institucional pretendería sacar raja electoral. A costa incluso de dejar sin recursos obras cuya construcción van más allá de los presupuestos anuales.
Luis Videgaray, desde lo alto de su arrogancia, sin embargo, no ha sido capaz de mirar con claridad, y, por tanto, de resolver el trabuco en que ya se le convirtió el no menos necio Cruz López Aguilar, diputado federal también por el PRI y máximo dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), que subido en su macho está desde hace semana y media, insistiendo en que al campo deberán dársele en 2011 cuando menos 300 mil millones de pesos.
Y, para que eso suceda, se requiere de una partida de 42 mil millones de pesos adicionales. Algo así como 40% de las reasignaciones que el PRI --que representa Videgaray--, y el PAN de Felipe Calderón, negociaron a principios de semana (110 mil millones de pesos).
Con su fuerza descomunal de 238 diputados, mas los 21 de esa rémora que convenencieramente le acompaña desde el 2000, el PVEM, el Revolucionario Institucional ha tenido que negociar con él mismo, mientras que el PAN, el PRD y resto de los partidos sólo han tenido que sentarse a mirarlos.
Estos días, en la Cámara de Diputados, se ha estado presenciando acaso la primera gran confrontación interna del PRI, con miras al 2012.
Al lado de Videgaray está Francisco Rojas, y detrás de ambos Enrique Peña Nieto. Y al lado de Cruz López Aguilar se le ha estado viendo desde hace varios días a Beatriz Paredes Rangel, la dirigente nacional del PRI.
Desde el PRD, PAN y el PT, más de un diputado ha opinado que el PRI se ha bifurcado en dos ramales hacia el 2012. Y que el 2011, año también electoral, será el año en que Peña Nieto no será el único priista destapado como precandidato presidencial.
El PAN hizo ayer un movimiento de ajedrez con la intención de mellar la posición del PRI, de no negociar con nadie más que consigo mismo. Cogido de la mano del PRD, Acción Nacional dijo que se retiraba de la mesa de la Comisión de Presupuesto que negocia el rubro de las carreteras. Pero era como querer enseñar a envinagrar chiles a Clemente Jacques. Francamente el panista Luis Enrique Mercado y el perredista Armando Ríos Piter se vieron muy imberbes cuando, en una suerte de puchero de chamacos coscorroneados, dijeron que se retiraban porque el PRI no había cumplido sus compromisos. “Ya regresarán”, vaticinó, mordiente, Francisco Rojas. Y es que si algo ha distinguido al PAN es que así como dice que sí también dice que no. Y el PRD ni se diga.
PAN y PRD han insistido en que el dinero que Cruz pelea para el campo, vaya también para carreteras cuya construcción exige continuidad en 2011. Pero, particularmente los panistas, soslayan que en 2010 hay en el rubro carretero un subejercicio por 18 mil millones de pesos, de un monto total de 47 mil millones.
Los priistas han atajado al PAN advirtiendo que en el presupuesto para 2011, incluirán ellos una cláusula en la que se mandate que todos los recursos carreteros que el Gobierno federal no entregue –convirtiéndolos en subejercicios-- deberán entonces meterse a un fideicomiso ex profeso, que deberá manejar el gobernador correspondiente.
Anoche, como en todo el día, el PRI en el tema carretero había empezado a meter calambres al PAN y PRD: evitaban finiquitar acuerdos sobre carreteras en los estados de Jalisco, Puebla y Michoacán. Que en torno de estos tres estados, decían anoche los priistas en filtraciones, ya se negociará el viernes y sábado, día éste en que el pleno camaral de los 500 diputados fue citado para discutir y votar el decreto de Presupuesto de la Federación del 2011.
Luis Videgaray es el diputado presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, y el considerado ujier de angora que Enrique Peña Nieto tiene en San Lázaro. Anoche tenía él una bronca con diputados de su mismo partido, el PRI, que ven con preocupación que no alcanzarán recursos para carreteras.
Pero también la tenía con legisladores de los otros dos partidos políticos que son gobierno en las entidades federativas, del PAN y PRD, cuando éstos han reclamado al PRI que la repartición de las reasignaciones destinadas a carreteras -exigua de por sí- la estén realizando los diputados priistas con la intención sobrada de favorecer áreas del país sólo donde el Revolucionario Institucional pretendería sacar raja electoral. A costa incluso de dejar sin recursos obras cuya construcción van más allá de los presupuestos anuales.
Luis Videgaray, desde lo alto de su arrogancia, sin embargo, no ha sido capaz de mirar con claridad, y, por tanto, de resolver el trabuco en que ya se le convirtió el no menos necio Cruz López Aguilar, diputado federal también por el PRI y máximo dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), que subido en su macho está desde hace semana y media, insistiendo en que al campo deberán dársele en 2011 cuando menos 300 mil millones de pesos.
Y, para que eso suceda, se requiere de una partida de 42 mil millones de pesos adicionales. Algo así como 40% de las reasignaciones que el PRI --que representa Videgaray--, y el PAN de Felipe Calderón, negociaron a principios de semana (110 mil millones de pesos).
Con su fuerza descomunal de 238 diputados, mas los 21 de esa rémora que convenencieramente le acompaña desde el 2000, el PVEM, el Revolucionario Institucional ha tenido que negociar con él mismo, mientras que el PAN, el PRD y resto de los partidos sólo han tenido que sentarse a mirarlos.
Estos días, en la Cámara de Diputados, se ha estado presenciando acaso la primera gran confrontación interna del PRI, con miras al 2012.
Al lado de Videgaray está Francisco Rojas, y detrás de ambos Enrique Peña Nieto. Y al lado de Cruz López Aguilar se le ha estado viendo desde hace varios días a Beatriz Paredes Rangel, la dirigente nacional del PRI.
Desde el PRD, PAN y el PT, más de un diputado ha opinado que el PRI se ha bifurcado en dos ramales hacia el 2012. Y que el 2011, año también electoral, será el año en que Peña Nieto no será el único priista destapado como precandidato presidencial.
El PAN hizo ayer un movimiento de ajedrez con la intención de mellar la posición del PRI, de no negociar con nadie más que consigo mismo. Cogido de la mano del PRD, Acción Nacional dijo que se retiraba de la mesa de la Comisión de Presupuesto que negocia el rubro de las carreteras. Pero era como querer enseñar a envinagrar chiles a Clemente Jacques. Francamente el panista Luis Enrique Mercado y el perredista Armando Ríos Piter se vieron muy imberbes cuando, en una suerte de puchero de chamacos coscorroneados, dijeron que se retiraban porque el PRI no había cumplido sus compromisos. “Ya regresarán”, vaticinó, mordiente, Francisco Rojas. Y es que si algo ha distinguido al PAN es que así como dice que sí también dice que no. Y el PRD ni se diga.
PAN y PRD han insistido en que el dinero que Cruz pelea para el campo, vaya también para carreteras cuya construcción exige continuidad en 2011. Pero, particularmente los panistas, soslayan que en 2010 hay en el rubro carretero un subejercicio por 18 mil millones de pesos, de un monto total de 47 mil millones.
Los priistas han atajado al PAN advirtiendo que en el presupuesto para 2011, incluirán ellos una cláusula en la que se mandate que todos los recursos carreteros que el Gobierno federal no entregue –convirtiéndolos en subejercicios-- deberán entonces meterse a un fideicomiso ex profeso, que deberá manejar el gobernador correspondiente.
Anoche, como en todo el día, el PRI en el tema carretero había empezado a meter calambres al PAN y PRD: evitaban finiquitar acuerdos sobre carreteras en los estados de Jalisco, Puebla y Michoacán. Que en torno de estos tres estados, decían anoche los priistas en filtraciones, ya se negociará el viernes y sábado, día éste en que el pleno camaral de los 500 diputados fue citado para discutir y votar el decreto de Presupuesto de la Federación del 2011.
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