México
Santa también es víctima de la crisis
La sonrisa de Papá Noel cada vez se escucha menos en esta época, por la falta de dinero; los niños prefieren los videojuegos
Melchor, Gaspar y Baltasar, así como Papá Noel, esperaban pacientemente la llegada de los jefes de familia y sus hijos para recibir los deseos de los pequeños y que éstos se tomaran la foto con ellos.
Pero Arturo Armenta, quien interpreta a Baltasar, está preocupado pues a su decir “la gente viene poco. Vengo haciendo este trabajo desde hace varios años y apenas ahora he notado que en fechas como la de hoy no hay mucha clientela”.
Explicó que es evidente que la gente no tiene dinero, porque simplemente no acude. Cuando hay crisis, dijo, las personas tratan de no llevar a los niños a lugares donde haya que gastar.
Además, aunque ya desde hace varios años dejaron de estar “los santacloses” en la Alameda y ahora se permitió que se ubicaran algunos en la calle de Doctor Mora, a un costado del parque, la gente casi no va.
Muchos de los que están en el Monumento a la Revolución, señaló, sí tienen un poco más de clientela, aunque “me han comentado que también ahí se nota la crisis”.
En uno de los locales que se abren a partir de las 18:00 horas, Sonia García ayuda a colocar las escenografías para las fotos y se queja también de que a estas alturas, a unos cuantos días de la Navidad, “Santa de plano no jala”.
Es decir, que los papás y sus niños pasan, pero no se quieren tomar la foto y los pocos que lo hacen “regatean mucho porque la gente no trae dinero”.
También comentó que los deseos de los niños en general no cambian, aunque sí se han visto influidos por el ambiente. Dijo que en el local donde ella ayuda Santa Claus es su tío Édgar.
Aún así, los comerciantes coinciden en que tener la concesión para establecer ahí los puestos es bueno, porque permite un ingreso, a pesar de las dificultades económicas, y confiaron en que para el próximo año la situación mejore.
Los juegos de moda
“¿Santa Claus tiene correo electrónico?” preguntó Emiliano a su mamá, mientras le mostraba las consolas de videojuego que este año pedirá como regalo de Navidad o de Reyes Magos.
Al niño de seis años poco le importan los carros a control remoto, muñecos, balones o juegos de mesa que su mamá, Karina Hernández, le mostró en uno de los pasillos de la Expo Tus Juguetes, que se efectúa en el World Trade Center.
“¿Cuál será su correo?”, le insistió a su mamá, quien en la mente hacía cuentas del dinero que necesita para comprar sólo de regalo de Navidad un Wii o Playstation 3, que son consolas de videojuegos cuyo costo es de cuatro mil y siete mil pesos, mas lo que invierta en los cartuchos.
Karina comentó que los niños dejaron atrás “los monos” para pedir videojuegos, computadoras o celulares, porque “hay que estar a la moda”.
Diego Villanueva también entiende la preocupación de Karina, pues con un sueldo de cuatro mil quinientos pesos quincenales debe completar para comprar el celular de su hija de ocho años Cristel, y la Mini Notebook de su hijo Rubén.
“Ya olvidaron las Barbies, nenucos, juegos de té, ahora sólo piden el celular y el videojuego”, expresó, mientras busca en la expo lo que se ha convertido en el juguete perfecto para un Santa Claus con bajos recursos.
“El otro día me comentó que un niño le pidió de regalo de Navidad que su papá encontrara trabajo, y eso es muy difícil poder sobrellevarlo”
Sonia García,
ayudante de Santa Claus.
Síguenos en