México

Reforma de Calderón, sin aval en Senado

En la lista de propuestas consensuadas destaca el procedimiento para sustituir al Presidente en caso de falta absoluta, por muerte

CIUDAD DE MÉXICO.- La iniciativa del Presidente Felipe Calderón Hinojosa para transformar el régimen político mexicano, enviada en diciembre del año pasado al Senado, no verá la luz.

Los senadores sólo admitirán uno de los 10 puntos propuestos por el Ejecutivo: la iniciativa ciudadana. Esto, a pesar de la estrategia en internet “Mas poder en manos de los ciudadanos” instrumentada por el Gobierno federal para defender la viabilidad del proyecto de reforma política del Presidente Calderón.

Según la relatoría de las comisiones del Senado encargadas de elaborar el dictamen de reforma política a partir de cinco iniciativas, incluida la de Calderón, únicamente se procesarán cinco de los 41 temas que estaban en la mesa de discusión para rediseñar el sistema político del país. En la lista de reformas consensuadas, destaca el procedimiento para sustituir al Presidente en caso de falta absoluta, por ejemplo, muerte en un accidente.

Mientras el Congreso toma una decisión para designar al nuevo Presidente, el secretario de Gobernación sería el encargado del despacho del Ejecutivo.

El primer paquete de reformas —que se votará en comisiones la próxima semana para garantizar que suba al pleno antes de que concluya abril— incluye también el referéndum, la iniciativa ciudadana, la reconducción presupuestal, además de mecanismos para democratizar la vida interna de los partidos.

Fuera de la agenda quedaron las candidaturas independientes, a pesar de que cuatro de las cinco iniciativas respaldaban esta propuesta. Tampoco pasará la eliminación y reducción de los legisladores plurinominales, la reelección de legisladores y la segunda vuelta presidencial. También, la reducción del umbral para el registro de un partido político y el fortalecimiento del Congreso de la Unión.
El Partido Acción Nacional (PAN) trabó toda posibilidad de que el Congreso adquiriera la facultad de ratificar a los miembros del gabinete, aún cuando los partidos Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT), Convergencia y el Verde Ecologista de México (PVEM) defendían esta facultad del Legislativo.

El Senado inició la discusión de la reforma política el 25 de enero pasado, con un amplio abanico de propuestas, entre ellas, un nuevo formato del informe presidencial, la aprobación del Congreso del Plan de Desarrollo y programas sectoriales, y brindar autonomía a la Auditoría Superior de la Federación y al Ministerio Público.

Pero la negociación de otras reformas en la materia no se prevé tersa, pues se realizaría de manera paralela a los procesos electorales en distintas entidades.

Por cierto...


Los senadores del PRI, Pedro Joaquín Coldwell y Fernando Castro Trenti; del PRD, Graco Ramírez y Pablo Gómez; y del PAN, Alejandro Zapata, Santiago Creel y Ricardo García Cervantes, acordaron sacar este dictamen para enviar una señal de que la reforma no se mandó a la congeladora. Y confían en que la agenda pendiente esté lista en el próximo periodo de sesiones, que inicia en septiembre.

Los 10 puntos propuestos

Segunda vuelta en la elección a Presidente de la República, con lo que se garantiza mayor apoyo al candidato ganador.

Reelección de legisladores, alcaldes y jefes delegacionales hasta por 12 años., para aplicar planes de largo aliento y el ciudadano premie a quien gobierne bien, pero quien gobierne mal que se vaya.

Reducir el número de diputados de 500 a 400, de los cuales 240 serían de mayoría y 160 de representación proporcional. Y de senadores, de 128 a 96.

Posibilidad de definir candidaturas independientes a todo cargo de elección popular.

Que la Suprema Corte de Justicia de la Nación pueda presentar iniciativas en el ámbito de su competencia.

Facultad del Ejecutivo para hacer observaciones parciales o totales al presupuesto y a la ley de Ingresos.

El Poder Ejecutivo pueda, al inicio del periodo ordinario de sesiones del Congreso, presentar dos iniciativas preferentes, las cuales deberán ser dictaminadas y votadas por el Legislativo, pero en caso contrario se darán por aprobadas.

Si se tratara de una iniciativa de reforma constitucional ésta tendría que ser sometida a referéndum para que el ciudadano defina en última instancia el destino de la misma.

Ésta última propuesta no busca castigar o disminuir las facultades del Congreso, pero sí sanciona la inacción, la falta de debate y la falta de decisión del Congreso.

Se trata de pasar del sufragio efectivo a la democracia efectiva y por ello se busca no cerrar los espacios sino abrirlos a la participación ciudadana.
Síguenos en

Temas

Sigue navegando