México
Piden ONG´s en Juárez, intervención de la ONU
Después de uno de los fines de semana más sangrientos en Ciudad Juárez, los chihuahuenses ya no piden, sino exigen responsables
CIUDAD JUÁREZ, CHIHUAHUA.- Integrantes de organizaciones civiles y empresariales de Ciudad Juárez llegaron al Distrito Federal para solicitar la intervención de la Organización de Naciones Unidas (ONU) ante la ola de violencia en esa región fronteriza con Estados Unidos y exigir la presencia en ese lugar del Presidente Felipe Calderón y de los titulares del gabinete de Seguridad.
Integrantes de la Unión de Padres de Familia de Ciudad Juárez, del Observatorio Ciudadano, del Consejo Ciudadano para la Seguridad Publica y la Justicia Penal, de la Asociación de Maquiladoras en Ciudad Juárez, entre otros, presentaron una carta en la oficina de la ONU en México, tras el asesinato de 18 jóvenes el pasado fin de semana.
En la misiva, dirigida al secretario general del organismo internacional, Ban Ki-moon, se solicita que “el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas investigue formalmente esta situación (de violencia) y en su caso determine el envío de una misión de paz, a fin de restablecer el orden en las localidades y en las zonas de México que lo requieran”.
Esta solicitud se presenta “dada la manifiesta incapacidad del Estado mexicano para garantizar a los habitantes de nuestro país la seguridad a la que tenemos derecho”, de acuerdo con el texto leído por José Antonio Ortega Sánchez, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.
La presidenta de la Asociación de Maquiladoras, María Soledad, exigió la presencia en Ciudad Juárez del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, mientras que el dirigente del Observatorio Ciudadano, Enrique Jereque, se pronunció porque también acudan a esa región todos los titulares del gabinete de Seguridad nacional.
María Soledad dijo que llegaron a la Ciudad de México para exigir que el Presidente Calderón visite Ciudad Juárez. “Queremos exigir la presencia, ya no pedirla, queremos exigir la presencia del Presidente de la República”.
“Todavía queremos darle un voto de confianza, pero necesitamos que usted (Presidente Calderón) también acuda, que sepa que Ciudad Juárez es México”.
El líder de los comerciantes de la central de abastos, Miguel Galindo, dijo que todos los negocios de Ciudad Juárez van a tener un moño negro, así como los ciudadanos que lo quieran portar, en señal de luto por la violencia que se registra en esa región.
Descartan llegada de cascos azules
En respuesta, el Gobierno federal consideró que no hay condiciones para aceptar la presencia de cascos azules en Ciudad Juárez, Chihuahua, como lo demandaron organizaciones no gubernamentales (ONG´s) a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, aclaró que no tiene conocimiento formal del tema por lo que no ha sido valorado, y aseguró que en el país hay instituciones para hacerle frente al problema de violencia en esa región.
“No tengo conocimiento formal de ello, lo que sí reconozco, que este tipo de organizaciones están legítimamente preocupadas por una situación grave que va a ser resuelta”.
“El Ejército ha asumido riesgos y han enfrentado muchas veces a grupos armados, a fin de ponerles un límite, además de que se van afinando los mecanismos de inteligencia”.
Gómez Mont subrayó que las autoridades “estamos perfilando los instrumentos para que se atienda la cuestión de la seguridad y de desarrollo social sobre el que se construye la falta de alternativas a los jóvenes que están siendo masacrados”.
"Las autoridades no vamos a abandonar a (Ciudad) Juárez, al contrario, vamos a acompañar a quienes no la quieran dejar "
Fernando Gómez Mont,
secretario de Gobernación.
Responsable de la matanza falleció a manos del Ejército
CIUDAD DE MÉXICO.- El presunto sicario Adrián Ramírez, alias “El Doce” o “El Rama” y que supuestamente dirigió la matanza de 16 personas en una fiesta el domingo pasado en Ciudad Juárez, murió en un tiroteo con el Ejército, confirmaron fuentes de la Fiscalía del Estado mexicano de Chihuahua.
En declaraciones a los medios, la procuradora estatal, Patricia González, confirmó que el jefe de la célula que perpetró la masacre era el sicario conocido como “El Rama” o “El Doce”, quien murió el lunes pasado al enfrentarse con militares.
Según un documento de la Fiscalía, Ramírez era el encargado de la célula de sicarios y para esta masacre contó con el apoyo de otro pistolero apodado el “El 51”, quien le facilitó hombres armados y vehículos.
Los dos hombres respondían a un jefe superior apodado “El Diez” o “El Diego”, que trabaja para el cártel de Juárez y que según un detenido fue quien ordenó la masacre contra supuestos integrantes de la banda “Artistas Asesinos” (AA) que sirven al cártel rival de Sinaloa.
“El Doce” había sido identificado como Adrián Ramírez por un delito federal el 15 de abril de 2007 con domicilio en El Paso (Texas, Estados Unidos).
La funcionaria aseguró a la prensa que el grupo criminal disparó de manera indiscriminada sin discernir que en la fiesta había jóvenes inocentes que no formaban parte de ninguna pandilla.
“Hasta ahora todas nuestras investigaciones indican claramente que eran jóvenes inocentes”, dijo la fiscal del Estado de Chihuahua, no obstante, admitió que algunos de los adultos que estaban en la fiesta “pudieran estar implicados en la pandilla”.
La funcionaria aseguró que los demás miembros de esta célula están plenamente identificados y son buscados por las fuerzas de seguridad federales y locales.
Telón de fondo
La ciudad y su tejido social
Juárez es una ciudad que tiene poco menos de un millón 400 habitantes, de los cuales al menos 40% provienen de otros estados, esto la hace un lugar multicultural, además, muchos indocumentados que intentan cruzar la frontera a Estados Unidos se quedan ahí a vivir.
De acuerdo con el primer informe de la Comisión para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres en Ciudad Juárez, este flujo crea enclaves de pobreza que se refuerzan por la falta de infraestructura urbana y de servicios públicos, en un territorio urbano que es enorme a lo largo y ancho.
La pobreza la viven la mayoría de los habitantes. En 2001 había 85 mil habitantes en marginación y a finales de diciembre de 2003, el número subió a 200 mil.
Por si no fuera poco, el Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP), revela que 50% de las calles no están pavimentadas, existe 80% de déficit de áreas verdes y 200 mil familias viven en zonas de alto riesgo. Es decir, la pobreza se respira por todos lados.
Otro problema es el consumo de drogas. Según el documento “Radiografía Socioeconómica del Municipio de Juárez” de 2002, en ese año 65% de la sociedad ubicó a la farmacodependencia como el segundo problema generador de inseguridad pública. Incluso se calcula que sólo en Juárez hay unos seis mil “picaderos”, que son lugares donde los adictos acuden a drogarse e inyectarse.
En esa metrópoli fronteriza los jóvenes tienen pocas oportunidades, el referido informe indica que la juventud está siendo asediada por las bandas del crimen organizado.
“El Estado mexicano no puede abandonar a estos jóvenes que buscan, con valentía y esperanza, labrarse un mejor mañana en barrios donde no hay calles, ni plazas, ni árboles, ni asomo de vida. Los jóvenes de la ciudad necesitan oportunidades para no apartarse de la legalidad en el proceso de conseguir su independencia económica o enfrentar salidas de alto riesgo para su integridad física”.
Integrantes de la Unión de Padres de Familia de Ciudad Juárez, del Observatorio Ciudadano, del Consejo Ciudadano para la Seguridad Publica y la Justicia Penal, de la Asociación de Maquiladoras en Ciudad Juárez, entre otros, presentaron una carta en la oficina de la ONU en México, tras el asesinato de 18 jóvenes el pasado fin de semana.
En la misiva, dirigida al secretario general del organismo internacional, Ban Ki-moon, se solicita que “el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas investigue formalmente esta situación (de violencia) y en su caso determine el envío de una misión de paz, a fin de restablecer el orden en las localidades y en las zonas de México que lo requieran”.
Esta solicitud se presenta “dada la manifiesta incapacidad del Estado mexicano para garantizar a los habitantes de nuestro país la seguridad a la que tenemos derecho”, de acuerdo con el texto leído por José Antonio Ortega Sánchez, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.
La presidenta de la Asociación de Maquiladoras, María Soledad, exigió la presencia en Ciudad Juárez del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, mientras que el dirigente del Observatorio Ciudadano, Enrique Jereque, se pronunció porque también acudan a esa región todos los titulares del gabinete de Seguridad nacional.
María Soledad dijo que llegaron a la Ciudad de México para exigir que el Presidente Calderón visite Ciudad Juárez. “Queremos exigir la presencia, ya no pedirla, queremos exigir la presencia del Presidente de la República”.
“Todavía queremos darle un voto de confianza, pero necesitamos que usted (Presidente Calderón) también acuda, que sepa que Ciudad Juárez es México”.
El líder de los comerciantes de la central de abastos, Miguel Galindo, dijo que todos los negocios de Ciudad Juárez van a tener un moño negro, así como los ciudadanos que lo quieran portar, en señal de luto por la violencia que se registra en esa región.
Descartan llegada de cascos azules
En respuesta, el Gobierno federal consideró que no hay condiciones para aceptar la presencia de cascos azules en Ciudad Juárez, Chihuahua, como lo demandaron organizaciones no gubernamentales (ONG´s) a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, aclaró que no tiene conocimiento formal del tema por lo que no ha sido valorado, y aseguró que en el país hay instituciones para hacerle frente al problema de violencia en esa región.
“No tengo conocimiento formal de ello, lo que sí reconozco, que este tipo de organizaciones están legítimamente preocupadas por una situación grave que va a ser resuelta”.
“El Ejército ha asumido riesgos y han enfrentado muchas veces a grupos armados, a fin de ponerles un límite, además de que se van afinando los mecanismos de inteligencia”.
Gómez Mont subrayó que las autoridades “estamos perfilando los instrumentos para que se atienda la cuestión de la seguridad y de desarrollo social sobre el que se construye la falta de alternativas a los jóvenes que están siendo masacrados”.
"Las autoridades no vamos a abandonar a (Ciudad) Juárez, al contrario, vamos a acompañar a quienes no la quieran dejar "
Fernando Gómez Mont,
secretario de Gobernación.
Responsable de la matanza falleció a manos del Ejército
CIUDAD DE MÉXICO.- El presunto sicario Adrián Ramírez, alias “El Doce” o “El Rama” y que supuestamente dirigió la matanza de 16 personas en una fiesta el domingo pasado en Ciudad Juárez, murió en un tiroteo con el Ejército, confirmaron fuentes de la Fiscalía del Estado mexicano de Chihuahua.
En declaraciones a los medios, la procuradora estatal, Patricia González, confirmó que el jefe de la célula que perpetró la masacre era el sicario conocido como “El Rama” o “El Doce”, quien murió el lunes pasado al enfrentarse con militares.
Según un documento de la Fiscalía, Ramírez era el encargado de la célula de sicarios y para esta masacre contó con el apoyo de otro pistolero apodado el “El 51”, quien le facilitó hombres armados y vehículos.
Los dos hombres respondían a un jefe superior apodado “El Diez” o “El Diego”, que trabaja para el cártel de Juárez y que según un detenido fue quien ordenó la masacre contra supuestos integrantes de la banda “Artistas Asesinos” (AA) que sirven al cártel rival de Sinaloa.
“El Doce” había sido identificado como Adrián Ramírez por un delito federal el 15 de abril de 2007 con domicilio en El Paso (Texas, Estados Unidos).
La funcionaria aseguró a la prensa que el grupo criminal disparó de manera indiscriminada sin discernir que en la fiesta había jóvenes inocentes que no formaban parte de ninguna pandilla.
“Hasta ahora todas nuestras investigaciones indican claramente que eran jóvenes inocentes”, dijo la fiscal del Estado de Chihuahua, no obstante, admitió que algunos de los adultos que estaban en la fiesta “pudieran estar implicados en la pandilla”.
La funcionaria aseguró que los demás miembros de esta célula están plenamente identificados y son buscados por las fuerzas de seguridad federales y locales.
Telón de fondo
La ciudad y su tejido social
Juárez es una ciudad que tiene poco menos de un millón 400 habitantes, de los cuales al menos 40% provienen de otros estados, esto la hace un lugar multicultural, además, muchos indocumentados que intentan cruzar la frontera a Estados Unidos se quedan ahí a vivir.
De acuerdo con el primer informe de la Comisión para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres en Ciudad Juárez, este flujo crea enclaves de pobreza que se refuerzan por la falta de infraestructura urbana y de servicios públicos, en un territorio urbano que es enorme a lo largo y ancho.
La pobreza la viven la mayoría de los habitantes. En 2001 había 85 mil habitantes en marginación y a finales de diciembre de 2003, el número subió a 200 mil.
Por si no fuera poco, el Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP), revela que 50% de las calles no están pavimentadas, existe 80% de déficit de áreas verdes y 200 mil familias viven en zonas de alto riesgo. Es decir, la pobreza se respira por todos lados.
Otro problema es el consumo de drogas. Según el documento “Radiografía Socioeconómica del Municipio de Juárez” de 2002, en ese año 65% de la sociedad ubicó a la farmacodependencia como el segundo problema generador de inseguridad pública. Incluso se calcula que sólo en Juárez hay unos seis mil “picaderos”, que son lugares donde los adictos acuden a drogarse e inyectarse.
En esa metrópoli fronteriza los jóvenes tienen pocas oportunidades, el referido informe indica que la juventud está siendo asediada por las bandas del crimen organizado.
“El Estado mexicano no puede abandonar a estos jóvenes que buscan, con valentía y esperanza, labrarse un mejor mañana en barrios donde no hay calles, ni plazas, ni árboles, ni asomo de vida. Los jóvenes de la ciudad necesitan oportunidades para no apartarse de la legalidad en el proceso de conseguir su independencia económica o enfrentar salidas de alto riesgo para su integridad física”.
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