México
No es el único en capilla
Total, que con todo y sus millones en la bolsa, Juan Sánchez Aldana y sus demás compañeros ex presidentes municipales y ex funcionarios ahora se encuentran más solos que nunca
Aunque ya pasó más de una semana del escándalo mediático que puso “con el Jesús en la boca” a Juan Sánchez Aldana por la gran cantidad de irregularidades reportada por la Auditoría Superior del Estado, y que involucra una cifra multimillonaria, la verdad de las cosas es que no es el único munícipe que se encuentra en “capilla”, por lo que hasta donde se ha podido saber, más vale que algunos ya hayan puesto sus barbas a remojar.
O lo que es lo mismo, muévanse porque el famoso chahuistle anda tras sus bonos y ahorritos para que devuelvan lo que se llevaron o no han podido comprobar cabalmente.
Y la verdad de las cosas es que además de los actos de corrupción que han resultado muy evidentes en los municipios de la zona metropolitana, en el Ayuntamiento de Zapopan se deja ver también una total ineficiencia administrativa, seguramente cobijada por la creencia de que iban a continuar en el poder y sus correligionarios les “lavarían las manos”, claro, a cambio de su respectiva “mochada”, pero ahora la situación se complica con los tiempos pre electorales y la atención de la opinión pública.
Mal le resultaron los cálculos a Sánchez Aldana, pues además de entregar el municipio a un partido político opositor, sus correligionarios —empezando por el coordinador parlamentario de Acción Nacional, José María Martínez— lo primero que hicieron fue deslindar a él y a su partido, mientras que el presidente del Comité Directivo Estatal, Hernán Cortés, ni siquiera a dicho esta boca es mía —ya veremos cuando a él le llegue la lumbre a los aparejos con la cuenta pública de Tlaquepaque—.
Total, que con todo y sus millones en la bolsa, Juan Sánchez Aldana y sus demás compañeros ex presidentes municipales y ex funcionarios ahora se encuentran más solos que nunca, pues todos les sacan la vuelta, y ni las jugosas cuotas que pagaron en su momento les han servido —y como dijo don Teofilito— para que alguien les ofrezca apoyo alguno.
Además, otro “pollito” que se le anda atragantando al otrora alcalde zapopano, tiene que ver con que su entonces rival, Jesús Casillas, es hoy de nueva cuenta diputado, y además, presidente de la Mesa Directiva, amén de precandidato —sí, ya especula con aprovechar el trapecio para regresar al terruño amado y ansiado—, por lo que seguramente seguirá con el dedo en la llaga hasta que sangre y mientras le sirva para seguir haciendo declaraciones y apareciendo mediáticamente.
Ya ven que tres años se van como si nada, ojalá y estas experiencias en cabeza ajena sirvieran para que los actuales y futuros munícipes aprendieran la lección y se aplicaran a realizar mejor las cosas.
O lo que es lo mismo, muévanse porque el famoso chahuistle anda tras sus bonos y ahorritos para que devuelvan lo que se llevaron o no han podido comprobar cabalmente.
Y la verdad de las cosas es que además de los actos de corrupción que han resultado muy evidentes en los municipios de la zona metropolitana, en el Ayuntamiento de Zapopan se deja ver también una total ineficiencia administrativa, seguramente cobijada por la creencia de que iban a continuar en el poder y sus correligionarios les “lavarían las manos”, claro, a cambio de su respectiva “mochada”, pero ahora la situación se complica con los tiempos pre electorales y la atención de la opinión pública.
Mal le resultaron los cálculos a Sánchez Aldana, pues además de entregar el municipio a un partido político opositor, sus correligionarios —empezando por el coordinador parlamentario de Acción Nacional, José María Martínez— lo primero que hicieron fue deslindar a él y a su partido, mientras que el presidente del Comité Directivo Estatal, Hernán Cortés, ni siquiera a dicho esta boca es mía —ya veremos cuando a él le llegue la lumbre a los aparejos con la cuenta pública de Tlaquepaque—.
Total, que con todo y sus millones en la bolsa, Juan Sánchez Aldana y sus demás compañeros ex presidentes municipales y ex funcionarios ahora se encuentran más solos que nunca, pues todos les sacan la vuelta, y ni las jugosas cuotas que pagaron en su momento les han servido —y como dijo don Teofilito— para que alguien les ofrezca apoyo alguno.
Además, otro “pollito” que se le anda atragantando al otrora alcalde zapopano, tiene que ver con que su entonces rival, Jesús Casillas, es hoy de nueva cuenta diputado, y además, presidente de la Mesa Directiva, amén de precandidato —sí, ya especula con aprovechar el trapecio para regresar al terruño amado y ansiado—, por lo que seguramente seguirá con el dedo en la llaga hasta que sangre y mientras le sirva para seguir haciendo declaraciones y apareciendo mediáticamente.
Ya ven que tres años se van como si nada, ojalá y estas experiencias en cabeza ajena sirvieran para que los actuales y futuros munícipes aprendieran la lección y se aplicaran a realizar mejor las cosas.
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