México
''Mete la pata en francés''
Gracias a Dios, la posición del Gobierno y el Presidente Felipe Calderón es congruente, firme y justa, respondiendo a la justicia mexicana y al sentir de todo el país
Al fin la justicia apareció y esta desalmada delincuente fue apresada, juzgada y sentenciada por la justicia mexicana a muy merecidos 60 años de prisión.
Sarkozy, en un acto politiquero con fondo electorero para recobrar la popularidad que ha perdido en ese gran país que es Francia, se puso a cacarear en francés exigiéndole a México que mandara a la cruel delincuente Florence (lástima de nombre) a Francia, a cumplir la sentencia que se ganó a pulso.
Gracias a Dios, la posición del Gobierno y el Presidente Felipe Calderón es congruente, firme y justa, respondiendo a la justicia mexicana y al sentir de todo el país.
Nicolás Sarkozy, nadando en el universo de la incongruencia si recordamos, primero defendió y negoció la liberación de Ingrid Betancourt, candidata en ese momento a la presidencia de Colombia, quien estuvo secuestrada seis años por la guerrilla de las FARC y ahora defiende y quiere negociar, en posición contraria, a favor de los delincuentes, por Florence Cassez que está sentenciada por secuestro, que son los mismos delitos contra los cuales él se opuso; pero como es francesa quiere ganarse la simpatía de su pueblo al defender a una compatriota, aunque haya cometido delitos innombrables y esté ya sentenciada por el Poder Judicial mexicano. Tal posición de Sarkozy pone en duda la justicia mexicana.
En resumen, el mundo entero ve que es una posición ridícula que lo haría merecedor de ser asesor del pelafustán Hugo Chávez, al cual debería enseñarle que dijera sus estupideces en francés.
El senador Carlos Navarrete, de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, está proponiendo la realización de una reunión bilateral en la que se confirme que es mucho más importante la relación entre México y Francia, que esta babosada de propuesta de Sarkozy, en la que se empeña que México ceda en mandar a Francia a la descarada criminal Florence Cassez, pretendiendo anteponerla ante la seriedad de nuestro país y las relaciones entre México y Francia.
Sarkozy declaró además que el Año de México en Francia, que estuvo preparándose durante varios años para consolidar la unión de los dos países, iba a ser en honor de esa criminal sentenciada.
La consecuencia de esta osadía fue que el Presidente Calderón acertadamente, canceló este Año de México en Francia que se había organizado con tanta anticipación.
La realidad fue que lamentablemente este presidente de Francia (lástima de esposa tan guapa) quedó en ridículo en su país y ante los ojos del mundo y metió la pata… pero en francés.
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