México
La beatificación de Juan Pablo II opaca la de Juan de Palafox y Mendoza
La Oficina para las Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice se vio obligada a encontrar una nueva fecha para beatificar a Palafox
CIUDAD DEL VATICANO (18/ENE/2011).- La ceremonia de beatificación de Juan Pablo II, prevista para el próximo 1 de mayo en Roma, afectó la llegada a los altares de otro beato, el antiguo obispo de la ciudad mexicana de Puebla, Juan de Palafox y Mendoza.
Fuentes del Vaticano informaron que la Oficina para las Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice se vio obligada a encontrar una nueva fecha para la beatificación de Palafox, la cual originalmente se llevaría a cabo en España el mismo 1 de mayo.
Confirmaron que la ceremonia se llevará a cabo el 5 de junio, según el acuerdo tomado por el obispo de Osma-Soria, Gerardo Melgar Viciosa, con el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano, el cardenal Angelo Amato.
El rito tendrá lugar en la catedral de El Burgo de Osma, en la provincia de Soria, al norte de España. La beatificación de Palafox y Mendoza será en ese lugar porque el prelado murió el 1 de octubre de 1659 siendo obispo de Osma, luego de seis años de ejercer allí su ministerio. A este personaje se le recuerda, en la historia y en la Iglesia Católica, como obispo de Puebla de los Angeles, una de las primeras diócesis de la Nueva España y de todo el continente americano.
Nació en Navarra por el año 1600 en el seno de una familia noble, a sus 26 años se convirtió en diputado y después fiscal de los Consejos de Guerra e Indias, las instituciones que manejaban tanto política como económicamente a las colonias españolas en América. Ordenado sacerdote en 1639 fue designado obispo de Puebla por el rey y por el Papa Urbano VIII. Se ocupó de asuntos religiosos pero también políticos en la Nueva España de entonces.
Fue el 'brazo de hierro' que juzgó al virrey Diego López Pacheco Cabrera y Bobadilla, a quien se acusó de desobedecer a la corona; ocupó temporalmente el cargo de virrey y en noviembre 1643, fue designado arzobispo de la Ciudad de México (puesto que nunca ocupó por ser prelado en Puebla). En esa demarcación eclesiástica tuvo conflictos con la Compañía de Jesús (Jesuitas) y por esta razón fue trasladado a su país de origen como obispo de Osma en 1653, donde permaneció hasta su muerte.
En Puebla fundó el convento de Santa Inés de las hermanas dominicas, redactó las constituciones para el seminario de San Juan, además de haber erigido los colegios de San Pedro, donde se impartía gramática, retórica y canto; y de San Pablo, para grados académicos.
Montó la llamada Biblioteca Palafoxiana, considerada una de las joyas de la arquitectura en Puebla y creó también el colegio de niñas dedicado a la Purísima Concepción. Logró terminar la catedral de esa ciudad, que consagró en abril de 1649. A siete años después de su muerte, en 1666, su cuerpo fue exhumado y se descubrió que estaba incorrupto, por lo que ese mismo año la diócesis de Osma inició su proceso de beatificación, el cual se abrió también en Puebla 22 años después, en 1688.
Para recordar su memoria la arquidiócesis de Puebla, con el aval del Vaticano, convocó un 'Año Palafoxiano', periodo jubilar durante el cual los católicos que dediquen rezos especiales en honor del 'venerable' podrán recibir gracias espirituales, como la indulgencia.
Fue el actual arzobispo poblano, Víctor Sánchez Espinosa, el responsable de inaugurar ese tiempo de fiesta el pasado 26 de diciembre con una misa en la catedral poblana durante la cual abrió la 'puerta del perdón', un ingreso al templo que sólo se abre en ocasiones especiales.
De acuerdo con un decreto emanado por la Penitenciaría Apostólica del Vaticano a nombre del Papa Benedicto XVI, los fieles que peregrinen a esa catedral y a las iglesias designadas por Sánchez recibirán la gracia de la indulgencia plenaria. La 'puerta del perdón' de dicha catedral -consagrada por Palafox en 1649-, sólo se abre cada 25 años con ocasión del año jubilar o cuando toma posesión un arzobispo o cuando fallece y se encuentra en el centro de la fachada.
La arquidiócesis de Puebla se unirá a la circunscripción eclesiástica de Osma con diversas actividades y por esa razón el vocero del arzobispado poblano, Eugenio Lira Rugarcía, viajará en los próximos días a España para afinar los detalles.
Fuentes del Vaticano informaron que la Oficina para las Celebraciones Litúrgicas del Sumo Pontífice se vio obligada a encontrar una nueva fecha para la beatificación de Palafox, la cual originalmente se llevaría a cabo en España el mismo 1 de mayo.
Confirmaron que la ceremonia se llevará a cabo el 5 de junio, según el acuerdo tomado por el obispo de Osma-Soria, Gerardo Melgar Viciosa, con el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano, el cardenal Angelo Amato.
El rito tendrá lugar en la catedral de El Burgo de Osma, en la provincia de Soria, al norte de España. La beatificación de Palafox y Mendoza será en ese lugar porque el prelado murió el 1 de octubre de 1659 siendo obispo de Osma, luego de seis años de ejercer allí su ministerio. A este personaje se le recuerda, en la historia y en la Iglesia Católica, como obispo de Puebla de los Angeles, una de las primeras diócesis de la Nueva España y de todo el continente americano.
Nació en Navarra por el año 1600 en el seno de una familia noble, a sus 26 años se convirtió en diputado y después fiscal de los Consejos de Guerra e Indias, las instituciones que manejaban tanto política como económicamente a las colonias españolas en América. Ordenado sacerdote en 1639 fue designado obispo de Puebla por el rey y por el Papa Urbano VIII. Se ocupó de asuntos religiosos pero también políticos en la Nueva España de entonces.
Fue el 'brazo de hierro' que juzgó al virrey Diego López Pacheco Cabrera y Bobadilla, a quien se acusó de desobedecer a la corona; ocupó temporalmente el cargo de virrey y en noviembre 1643, fue designado arzobispo de la Ciudad de México (puesto que nunca ocupó por ser prelado en Puebla). En esa demarcación eclesiástica tuvo conflictos con la Compañía de Jesús (Jesuitas) y por esta razón fue trasladado a su país de origen como obispo de Osma en 1653, donde permaneció hasta su muerte.
En Puebla fundó el convento de Santa Inés de las hermanas dominicas, redactó las constituciones para el seminario de San Juan, además de haber erigido los colegios de San Pedro, donde se impartía gramática, retórica y canto; y de San Pablo, para grados académicos.
Montó la llamada Biblioteca Palafoxiana, considerada una de las joyas de la arquitectura en Puebla y creó también el colegio de niñas dedicado a la Purísima Concepción. Logró terminar la catedral de esa ciudad, que consagró en abril de 1649. A siete años después de su muerte, en 1666, su cuerpo fue exhumado y se descubrió que estaba incorrupto, por lo que ese mismo año la diócesis de Osma inició su proceso de beatificación, el cual se abrió también en Puebla 22 años después, en 1688.
Para recordar su memoria la arquidiócesis de Puebla, con el aval del Vaticano, convocó un 'Año Palafoxiano', periodo jubilar durante el cual los católicos que dediquen rezos especiales en honor del 'venerable' podrán recibir gracias espirituales, como la indulgencia.
Fue el actual arzobispo poblano, Víctor Sánchez Espinosa, el responsable de inaugurar ese tiempo de fiesta el pasado 26 de diciembre con una misa en la catedral poblana durante la cual abrió la 'puerta del perdón', un ingreso al templo que sólo se abre en ocasiones especiales.
De acuerdo con un decreto emanado por la Penitenciaría Apostólica del Vaticano a nombre del Papa Benedicto XVI, los fieles que peregrinen a esa catedral y a las iglesias designadas por Sánchez recibirán la gracia de la indulgencia plenaria. La 'puerta del perdón' de dicha catedral -consagrada por Palafox en 1649-, sólo se abre cada 25 años con ocasión del año jubilar o cuando toma posesión un arzobispo o cuando fallece y se encuentra en el centro de la fachada.
La arquidiócesis de Puebla se unirá a la circunscripción eclesiástica de Osma con diversas actividades y por esa razón el vocero del arzobispado poblano, Eugenio Lira Rugarcía, viajará en los próximos días a España para afinar los detalles.
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