México
''La Reina'' vuelve a la ciudad de su juventud
Sólo alcanzará a ver el Lago de Chapala desde el avión, para luego ser llevada al penal fuertemente custodiada
GUADALAJARA, JALISCO (20/AGO/2013).- A sólo 50 días de cumplir 53 años,
Sandra Ávila Beltrán, "La Reina del Pacífico",
regresará a Guadalajara, ciudad donde vivió su juventud y aspiró a ser primero periodista y luego licenciada en Administración Turística. Llegará al penal de máxima seguridad de Puente Grande.
"La Reina" sólo alcanzará a ver el Lago de Chapala desde el avión, para luego ser llevada al penal fuertemente custodiada y no podrá pasar por las colonias del poniente de la Zona Metropolitana de Guadalajara, donde aún tiene un par de residencias donde hacía vida social.
Ávila Beltrán llegó a los 20 años de Culiacán, luego de nacer en Mexicali el 11 de octubre de 1960.
De pequeña vivía con sus padres en Tijuana y luego se fue a Sinaloa.
Recién llegó a Guadalajara, se inscribió en la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG) particular en la carrera de periodismo y comunicación, pero al paso de un semestre claudicó y se cambió a la carrera de administración turística en la misma universidad.
En esa carrera vio más actividad, porque de inmediato se nombró publirrelacionista turística y frecuentaba más Puerto Vallarta y Mazatlán que las aulas. Y poco a poco hizo fama de ser excelente corredora de bienes raíces, porque compraba residencias, pero también las vendía.
"La Reina" sólo alcanzará a ver el Lago de Chapala desde el avión, para luego ser llevada al penal fuertemente custodiada y no podrá pasar por las colonias del poniente de la Zona Metropolitana de Guadalajara, donde aún tiene un par de residencias donde hacía vida social.
Ávila Beltrán llegó a los 20 años de Culiacán, luego de nacer en Mexicali el 11 de octubre de 1960.
De pequeña vivía con sus padres en Tijuana y luego se fue a Sinaloa.
Recién llegó a Guadalajara, se inscribió en la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG) particular en la carrera de periodismo y comunicación, pero al paso de un semestre claudicó y se cambió a la carrera de administración turística en la misma universidad.
En esa carrera vio más actividad, porque de inmediato se nombró publirrelacionista turística y frecuentaba más Puerto Vallarta y Mazatlán que las aulas. Y poco a poco hizo fama de ser excelente corredora de bienes raíces, porque compraba residencias, pero también las vendía.
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