México
¿Hay algo que festejar?
La prevalencia y herencia generacional del conocido “machismo” y la falta de conciencia sobre una sociedad incluyente han complicado el panorama
Preparen el entarimado, los moñitos rosas y los discursos alusivos a la ocasión. No hay que estar fuera de tiempo, ¡por supuesto! Es marzo y además del mes en que el color y el calor se hacen presentes con la entrada de la primavera, el próximo martes 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer.
Segurísimo más de algún asistente de político debe estar pensando en el mensaje que su jefe habrá de dar, la actividad a realizar para destacar del partido contrario; “¿les regalamos claveles o les llevamos un trío?”, se escuchaba ayer en una de las tantas oficinas ocupadas por personas visionarias, interesadas en el futuro… pero de su carrera política en 2012.
Esta conmemoración es de las que cualquiera puede aprovechar para salir bien en la foto del periódico del día siguiente y nada más. Ayer, el Instituto Jalisciense de las Mujeres dio a conocer que la mitad de las mujeres en el Estado no conoce sus derechos.
La muestra parece poco significativa, si tomamos en cuenta que en Jalisco, según el Censo de Población y Vivienda 2010 del Inegi, existen tres millones 749 mil mujeres: sólo 547 fueron entrevistadas y las que contestaron no mencionaron la agresión en ninguna de sus formas.
La realidad es que esa anhelada igualdad entre mujeres y hombres ha sido difícil de conseguir en México. La prevalencia y herencia generacional del conocido “machismo” y la falta de conciencia sobre una sociedad incluyente han complicado el panorama.
Irónicamente, fue en tierra azteca el primer intento para concentrar el trabajo mundial a favor de los derechos de las mujeres. Corría el año 1975 y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) convocaba a la primera conferencia mundial sobre la condición jurídica y social de la mujer, en donde destacó como objetivo la integración y plena participación de las mujeres en el desarrollo.
De eso han pasado 36 años y con trabajos tenemos ocho diputadas en el Congreso del Estado, ¿usted cree que hay igualdad en la participación? Como también me dijo alguien del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), “ahí está la promoción de las leyes, la aplicación es el problema pero el sistema judicial ya está chambeando, ahí si ¿cómo le haces?”.
Fue en la conferencia de Beijing en el año 2000 en donde los gobiernos participantes asumieron el compromiso de incluir de manera efectiva una dimensión de género en todas sus instituciones, de ahí el nacimiento del Inmujeres que este año cumple 10 años de su formación y lo festejarán en grande ¿cuándo cree? Este 8 de marzo con la presencia del Presidente de la República, Felipe Calderón, acompañado de cinco mil mujeres en el Centro Banamex de la Ciudad de México.
Punto final: Seguimos esperando justicia por las mujeres muertas defensoras de los derechos humanos, por las madres de los hijos asesinados por la delincuencia, por las que fueron golpeadas por su pareja y luego humilladas ante un ministerio público y por tantas que —aunque supieran sus derechos— en estos momentos más de alguno los está violando.
Segurísimo más de algún asistente de político debe estar pensando en el mensaje que su jefe habrá de dar, la actividad a realizar para destacar del partido contrario; “¿les regalamos claveles o les llevamos un trío?”, se escuchaba ayer en una de las tantas oficinas ocupadas por personas visionarias, interesadas en el futuro… pero de su carrera política en 2012.
Esta conmemoración es de las que cualquiera puede aprovechar para salir bien en la foto del periódico del día siguiente y nada más. Ayer, el Instituto Jalisciense de las Mujeres dio a conocer que la mitad de las mujeres en el Estado no conoce sus derechos.
La muestra parece poco significativa, si tomamos en cuenta que en Jalisco, según el Censo de Población y Vivienda 2010 del Inegi, existen tres millones 749 mil mujeres: sólo 547 fueron entrevistadas y las que contestaron no mencionaron la agresión en ninguna de sus formas.
La realidad es que esa anhelada igualdad entre mujeres y hombres ha sido difícil de conseguir en México. La prevalencia y herencia generacional del conocido “machismo” y la falta de conciencia sobre una sociedad incluyente han complicado el panorama.
Irónicamente, fue en tierra azteca el primer intento para concentrar el trabajo mundial a favor de los derechos de las mujeres. Corría el año 1975 y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) convocaba a la primera conferencia mundial sobre la condición jurídica y social de la mujer, en donde destacó como objetivo la integración y plena participación de las mujeres en el desarrollo.
De eso han pasado 36 años y con trabajos tenemos ocho diputadas en el Congreso del Estado, ¿usted cree que hay igualdad en la participación? Como también me dijo alguien del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), “ahí está la promoción de las leyes, la aplicación es el problema pero el sistema judicial ya está chambeando, ahí si ¿cómo le haces?”.
Fue en la conferencia de Beijing en el año 2000 en donde los gobiernos participantes asumieron el compromiso de incluir de manera efectiva una dimensión de género en todas sus instituciones, de ahí el nacimiento del Inmujeres que este año cumple 10 años de su formación y lo festejarán en grande ¿cuándo cree? Este 8 de marzo con la presencia del Presidente de la República, Felipe Calderón, acompañado de cinco mil mujeres en el Centro Banamex de la Ciudad de México.
Punto final: Seguimos esperando justicia por las mujeres muertas defensoras de los derechos humanos, por las madres de los hijos asesinados por la delincuencia, por las que fueron golpeadas por su pareja y luego humilladas ante un ministerio público y por tantas que —aunque supieran sus derechos— en estos momentos más de alguno los está violando.
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