México
Guardan senadores un minuto de silencio por los caídos del 68
El Senado de la República guardó un minuto de silencio en memoria por los caídos de la matanza de Tlatelolco de 1968
CIUDAD DE MÉXICO.- El
Senado de la República guardó un minuto de silencio en memoria de los caídos y desaparecidos del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco, al cumplirse este día 40 años de la matanza en la Plaza de las Tres Culturas.
Al grito de "2 de octubre no se olvida", el legislador Pablo Gómez Álvarez, quien en esa fecha estuvo en el lugar de los hechos, recordó cómo inició la agresión contra los estudiantes, luego de que una luz de bengala surcó el cielo.
Después de narrar lo que vivió ese día en Tlatelolco, el legislador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) demandó que "el Estado debe reconocer su responsabilidad, pues hubo una masacre y hasta ahora no lo ha admitido, ni siquiera como hecho histórico".
Indicó que "los hombres y las mujeres de hoy que están en los cargos públicos son otros, pero el Estado es el mismo, y tiene responsabilidad institucional, por lo que debe poner en la Ley esto: No queremos olvidar el 2 de octubre, no lo olvidaremos nunca".
En su oportunidad, el senador Francisco Arroyo Vieyra, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), aseguró que se trató de un golpe autoritario del gobierno en turno que encabezaba Gustavo Díaz Ordaz.
Sostuvo que a 40 años de ese trágico acontecimiento, "no nos hemos quitado la cicatriz, y por más ungüentos, pócimas y remedios que usemos sigue ahí, latente".
Sin embargo, advirtió que "no se vale quedarse lamiendo las heridas del alma y no ver lo que exige la sociedad 40 años después: tolerancia, visión de Estado y hacer a un lado la mezquindad de quienes quieren impedir que México sea exitoso".
En su turno, la senadora Beatriz Zavala Peniche, del Partido Acción Nacionl (PAN), aseveró que en 1968 los militantes de su partido fueron "como una voz solitaria que también enfrentaba a un gobierno agresor".
Al grito de "2 de octubre no se olvida", el legislador Pablo Gómez Álvarez, quien en esa fecha estuvo en el lugar de los hechos, recordó cómo inició la agresión contra los estudiantes, luego de que una luz de bengala surcó el cielo.
Después de narrar lo que vivió ese día en Tlatelolco, el legislador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) demandó que "el Estado debe reconocer su responsabilidad, pues hubo una masacre y hasta ahora no lo ha admitido, ni siquiera como hecho histórico".
Indicó que "los hombres y las mujeres de hoy que están en los cargos públicos son otros, pero el Estado es el mismo, y tiene responsabilidad institucional, por lo que debe poner en la Ley esto: No queremos olvidar el 2 de octubre, no lo olvidaremos nunca".
En su oportunidad, el senador Francisco Arroyo Vieyra, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), aseguró que se trató de un golpe autoritario del gobierno en turno que encabezaba Gustavo Díaz Ordaz.
Sostuvo que a 40 años de ese trágico acontecimiento, "no nos hemos quitado la cicatriz, y por más ungüentos, pócimas y remedios que usemos sigue ahí, latente".
Sin embargo, advirtió que "no se vale quedarse lamiendo las heridas del alma y no ver lo que exige la sociedad 40 años después: tolerancia, visión de Estado y hacer a un lado la mezquindad de quienes quieren impedir que México sea exitoso".
En su turno, la senadora Beatriz Zavala Peniche, del Partido Acción Nacionl (PAN), aseveró que en 1968 los militantes de su partido fueron "como una voz solitaria que también enfrentaba a un gobierno agresor".
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