México

Familiares de víctimas del casino Royale oran a un mes de la tragedia

En el sitio donde murieron 52 personas, muestran su sentir con un 'No los olvidaremos'

MONTERREY, NUEVO LEÓN (25/SEP/2011).- A un mes de los hechos en los que murieron 52 civiles, sus familiares acudieron al casino Royale, donde expresaron su sentir generalizado con un simple 'No los olvidaremos'.  

Hasta el escenario de la tragedia, al poniente de la ciudad, los deudos acudieron esta tarde para orar por el descanso eterno de los fallecidos y refrendar su exigencia de justicia ante un hecho que generó el repudio nacional e internacional.  Entre las ruinas del otrora centro de apuestas de la avenida San Jerónimo 205, que muestra las huellas del fuego que consumió el sitio y provocó esta desgracia sin precedentes, regiomontanos acudieron en silencio a recordar al ser querido.  

La fachada del inmueble ennegrecido por el humo del incendio provocado por criminales, fierros retorcidos, vidrios quebrados, coronas secas y veladoras apagadas fueron los únicos testigos del llanto silencioso de hombres y mujeres, incluso niños.  

Sin importar el quemante sol, los hijos, padres, hermanos y demás deudos de los fallecidos, con flores y velas en mano, clamaron castigo para los responsables y, en algunos casos, apoyo económico para quienes la tragedia los rebasó.  

Tal es el caso del Alejandro Morales Angeles, un hombre de 58 años con problemas de apéndice y quien perdió a su hijo Rubén Morales Castillo, de 19.  

El joven era el sustento de la familia y era su primer día de trabajo en el casino Royale, y a la fecha no ha obtenido respuesta de la empresa sobre alguna indemnización, sólo los apoyos funerarios y de despensa de autoridades estatales, insuficientes para paliar la precaria condición económica y ahora emocional de la familia.  

Esta vez fueron menos de 100 personas las que a lo largo de la tarde se dieron cita en el centro de apuestas, a diferencia de la misa de ayer oficiada en la Basílica de Guadalupe de esta ciudad, aunque con la misma impotencia y pesar por lo acontecido.  

Una manta en blanco y letras rojas quedó a un costado de la entrada del casino Royale, donde se plasman las palabras: 'No los olvidaremos'. 
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