México

Exhiben al Poder Judicial

Y digo lo anterior con todo respeto para los abogados que sí ejercen el Derecho a plenitud, que no son pocos, incluso en la familia hoy en día hay ¡cinco abogados!

Por si no hubiera sido suficiente con la exhibida internacional que le dieron al sistema de justicia en México con el caso de la francesa secuestradora, en donde hasta una ministra de aquél país tuvo que dimitir a su cargo en calidad de “chivo expiatorio”, ahora en el cine nacional se presenta de manera más que cruda lo que se vive a diario en ese submundo en el que jueces, abogados, delincuentes e inocente inculpados son los principales protagonistas.

Valdría la pena no sólo reflexionar al respecto, sino incluso darnos cuenta que usted o yo podemos ser las próximas víctimas del mismo, luego de que miles de mexicanos han tenido que padecer tan espantosa pesadilla… y todo por no tener dinero suficiente para poder defenderse adecuadamente o porque la contraparte sí lo distribuye de manera arreglada a los juzgadores y demás miembros del sistema judicial que suelen participar en este tipo de casos.

Todo esto me trae a la memoria las palabras de mi señor padre don Isidro Cisneros (q.e.p.d.), cuando le notifiqué mi decisión de estudiar la carrera de Derecho, allá en el lejano 1972. Prudente, como casi siempre fue, me dijo “mira hijo, ¿por qué no mejor estudias periodismo?, para ser abogado nada más se requiere de dos cosas: inscribirse y no morirse”.

Y efectivamente, en aquel desliz tuve no pocos compañeros, de los llamados “fósiles” que contrariamente a la mayoría que teníamos entre 17 y 20 años de edad, ellos tenían 40 o 50 años —vaya usted a saber si era porque les gustaba mucho la escuela, pero lo dudo, porque incluso hasta las muchachas eran escasas en aquellos tiempos—. Luego de dos años y medio de “acompañar a litigantes en sus faenas”, llegué a la conclusión de que ciertamente aquello no era lo mío, me sentía como si estuviera estudiando para alcanzar una licencia para robar, por lo que finalmente abandoné la empresa.

Y digo lo anterior con todo respeto para los abogados que sí ejercen el Derecho a plenitud, que no son pocos, incluso en la familia hoy en día hay ¡cinco abogados!

En medio de todo ese contexto, la Secretaría de Gobernación se ha pronunciado por un amparo en contra de la decisión de la jueza  Blanca Lobo Domínguez para que la película Presunto Culpable que ha causado un gran revuelo, deje de suspenderse y ello podría provocar que la jueza dé marcha atrás, luego entonces la representante del Poder Judicial quedará en ridículo, al tener que ceder ante las presiones de la opinión pública y de la dependencia más influyente del Poder Ejecutivo, lo que no necesariamente aclarará las causas que la llevaron en primera instancia a intentar la suspensión de su exhibición.
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