México
En ocho meses han descubierto 60 fosas comunes en Iguala
Octubre de 2014, una semana después del suceso de los 43, fue el mes donde se hallaron más
IGUALA, GUERRERO (27/JUL/22015).- El Gobierno federal encontró al menos 60 fosas clandestinas con 129 cadáveres en Iguala desde la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de
Ayotzinapa, quienes fueron privados de su libertad el 26 de septiembre pasado, es decir, hace más de 10 meses.
La información se desprende de una solicitud de transparencia emitida a la Procuraduría General de la República (PGR) que señala que en ocho meses —de octubre de 2014 a mayo de 2015— se localizaron en Iguala 60 fosas clandestinas con un total de 129 cuerpos, sin embargo, la instancia agregó que la cifra real podría ser mayor.
“Los datos reportados representan únicamente la intervención del personal especializado en asuntos relacionados con fosas clandestinas, aclarando que no en todos los casos de fosas intervienen los peritos de esa unidad administrativa”, indicó la PGR.
De los 129 restos localizados en los enterramientos señalados, 112 correspondían a hombres, 20 a mujeres y los demás aún siguen sin determinar o se encuentran en un proceso de valoración. La PGR agregó que al 13 de julio sólo se tenían datos de la identificación de 16 personas.
Octubre de 2014, una semana después de la desaparición de los 43 estudiantes, fue el mes cuando se localizaron más fosas, pues se hallaron 11 con un total de 39 cuerpos. Le siguieron enero y abril de 2015, cuando se descubrieron al menos 10 enterramientos en cada mes.
Luego de la desaparición de los 43 estudiantes, un grupo de policías comunitarios de Guerrero colaboraron con las familias de las víctimas y autoridades en la búsqueda de fosas clandestinas, sin embargo, ninguno de los restos hallados pertenecía a los jóvenes que, según la versión oficial, fueron quemados en un basurero en Cocula y sus cenizas esparcidas por un río.
Las desapariciones y asesinatos en Iguala fueron algo habitual durante los últimos años debido a la complicidad que existía entre el ex alcalde de ese municipio, José Luis Abarca, y el grupo de delincuencia organizada Guerreros Unidos, que mantenía un fuerte control de las corporaciones de seguridad en Iguala.
La información se desprende de una solicitud de transparencia emitida a la Procuraduría General de la República (PGR) que señala que en ocho meses —de octubre de 2014 a mayo de 2015— se localizaron en Iguala 60 fosas clandestinas con un total de 129 cuerpos, sin embargo, la instancia agregó que la cifra real podría ser mayor.
“Los datos reportados representan únicamente la intervención del personal especializado en asuntos relacionados con fosas clandestinas, aclarando que no en todos los casos de fosas intervienen los peritos de esa unidad administrativa”, indicó la PGR.
De los 129 restos localizados en los enterramientos señalados, 112 correspondían a hombres, 20 a mujeres y los demás aún siguen sin determinar o se encuentran en un proceso de valoración. La PGR agregó que al 13 de julio sólo se tenían datos de la identificación de 16 personas.
Octubre de 2014, una semana después de la desaparición de los 43 estudiantes, fue el mes cuando se localizaron más fosas, pues se hallaron 11 con un total de 39 cuerpos. Le siguieron enero y abril de 2015, cuando se descubrieron al menos 10 enterramientos en cada mes.
Luego de la desaparición de los 43 estudiantes, un grupo de policías comunitarios de Guerrero colaboraron con las familias de las víctimas y autoridades en la búsqueda de fosas clandestinas, sin embargo, ninguno de los restos hallados pertenecía a los jóvenes que, según la versión oficial, fueron quemados en un basurero en Cocula y sus cenizas esparcidas por un río.
Las desapariciones y asesinatos en Iguala fueron algo habitual durante los últimos años debido a la complicidad que existía entre el ex alcalde de ese municipio, José Luis Abarca, y el grupo de delincuencia organizada Guerreros Unidos, que mantenía un fuerte control de las corporaciones de seguridad en Iguala.
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