México
El Papa lo bendice para segunda vuelta al mundo
Alex Gonzalex se encontró con Juan Pablo II en 1998, ahora lo hizo con Francisco
Este martes, Gonzalex recibió la bendición del Papa Francisco para empezar su segunda misión que lo llevará a partir de la próxima semana a los países de América Latina, para luego seguir su recorrido por el mundo.
El bajacaliforniano venció la artritis reumatoide, una enfermedad que le robó la vida durante varios años, hasta que en 1998 emprendiera un recorrido por el mundo en bicicleta que lo llevó al Vaticano, donde recibió la bendición de Juan Pablo II.
“El artritis reumatoide es la enfermedad que yo tenía. Salí adelante a través de un ayuno. Fueron 25 días de estar ayunando. Lo sigo practicando con alguna regularidad, pero ahora lo hago como algo espiritual, ya no es, como en esta ocasión, para salvarme de mi vida”, comentó.
En entrevista con El Universal luego de recibir la bendición del Papa Francisco, en la Nunciatura Apostólica, en la Ciudad de México, Gonzalex afirmó que emprenderá una nueva vuelta al mundo en bicicleta para “seguir llevando ese mensaje de paz, de esperanza, de misericordia que ahorita el Pontífice está llevando a todos los mexicanos por toda la República”.
El que fue nombrado embajador de buena voluntad por el presidente Ernesto Zedillo en 1988, indicó que su primer viaje por el mundo lo llevó a acercarse con muchos líderes mundiales, como el presidente de Estados Unidos, así como importantes personajes del mundo del deporte y de las artes.
“Ahora lo que queremos es volcar toda esa experiencia y compartirla con los demás, sobre todo para llevar ese mensaje de esperanza”, expuso.
¿Por qué es importante hacer ese recorrido por el mundo?
Porque la mayoría de la gente no sabe lo que puede hacerse con la esperanza, con la fe y es importante que la gente sepa que pueden tener sueños para realizarse y esa es una de las cosas que yo con el ejemplo quiero inspirar a las personas para que lo hagan.
Gonzalex concluyó que “curiosamente siempre creí que esta enfermedad regresaría a mi cuerpo, pero desde hace años que no me he vuelto a enfermar y esa es una de las cosas que hay que compartir con la gente, que existen otras formas de poderse curarnos a nosotros mismos y obviamente con el poder de la fe y la oración”.
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