México
El PAN apoya ''modernizar'' Pemex
El líder nacional del partido, Gustavo Madero, afirma que presentarán una iniciativa vanguardista en la materia
CIUDAD DE MÉXICO (20/JUN/2013).- El presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Gustavo Madero Muñoz, negó que se vaya a privatizar Petróleos Mexicanos (Petróleos Mexicanos); aclaró que lo que se busca es modernizar.
Criticó que los medios de comunicación utilicen la frase “privatización” cuando quiere que algo no pase (en el Congreso de la Unión), ya que la frase confunde mucho a la ciudadanía.
“A la reforma educativa le llaman privatización, eso dicen para echarle leña, para que no pase, para que no prospere. La reforma energética dicen que es privatización. No tiene ningún contenido privatizador”.
En rueda de prensa, Madero afirmó que el PAN “tiene una propuesta extraordinariamente vanguardista sobre el tema de la reforma energética”, aunque no ofreció más detalles al respecto.
El Presidente Enrique Peña Nieto afirmó el martes en una entrevista con el diario Financial Times se pronunció por explorar mecanismos que amplíen la capacidad productiva de Pemex a través de la participación del sector privado, e incluso mencionó que la necesidad de modernizar a Pemex se acordó en el Pacto por México.
El líder nacional del PRD, Jesús Zambrano, aseguró que los integrantes del Pacto no han discutido nada respecto de las reformas energética. “Esos planteamientos expresan exclusivamente el punto de vista y el interés del gobierno priista por lo que no son acuerdos del Pacto por México”.
El perredista aclaró que hasta el momento no ha firmado nada en representación de su partido sobre un acuerdo sobre la reforma energética.
Agregó que será el martes próximo cuando se reúna con los coordinadores parlamentarios de su partido y con el líder moral perredista, Cuauhtémoc Cárdenas, para hacer un posicionamiento conjunto sobre esta reforma.
Ayer, el Presidente insistió en que “no se trata de privatizar (Pemex), pues el Estado es el dueño del petróleo, pero hay una necesidad de ampliar la capacidad”.
Para el perredista y ex jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, la propuesta del Presidente “es la reversión de la expropiación petrolera de Lázaro Cárdenas”. Aseguró que lo que Pemex necesita es una mayor inversión, pues no se ha tomado en cuenta lo suficiente para explorar, y adelantó que los legisladores, diputados y senadores de izquierda defenderán que la paraestatal no se privatice.
El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, el priista Francisco Arroyo Vierya, afirmó que si se hace algún cambio al Artículo 27 constitucional pudiese ser sobre el perfeccionamiento y modernización de la empresa, “nunca sobre la propiedad originaria de los mexicanos en ésta que es una fuente de riqueza para la nación mexicana”.
Por otro lado, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, diálogo con organizaciones campesinas dentro del Pacto por México. Afirmó que se lograrán acuerdos para transformar la realidad que vive el agro nacional.
SinEmbargo.mx/Notimex
CLAVES
Un sector celoso
1 La industria petrolera es uno de los mayores símbolos del nacionalismo y la soberanía mexicana, dice el académico Lorenzo Meyer.
2 El presidente Lázaro Cárdenas nacionalizó el sector en 1938, y desde entonces se ha rechazado la participación privada en la paraestatal.
3 México llegó a su pico de producción en 2004, con 3.4 millones de barriles de crudo diario; la producción actual es de 2.5 millones de barriles.
• LORENZO MEYER Y ROBERTO SÁNCHEZ
Expertos difieren sobre la iniciativa
CIUDAD DE MÉXICO.- Para el académico y analista de la Universidad Nacional Autónoma de México, Lorenzo Meyer, el petróleo es una parte esencial del nacionalismo mexicano y una apertura al sector privado puede ser interpretada como que el país fracasó en su capacidad de hacerse cargo y manejar una empresa como Pemex.
“Sólo la nacionalización del petróleo logró por fin hacer que el grueso de los mexicanos sintieran que algo en principio era suyo, (porque) se habían enfrentado a intereses muy poderosos extranjeros, se había triunfado y se tenía que demostrar que los mexicanos pueden con la industria petrolera, que no es algo tan difícil y fuera de sus alcances”.
Otros como Roberto Sánchez de la Vara, de la Universidad Iberoamericana, consideran que es momento de superar el debate ideológico y darse cuenta de que Pemex no tiene la posibilidad de explotar el crudo por sí solo.
“Si no tenemos capital, si no tenemos tecnología, si no tenemos capacitación, si no tenemos lo más importante en el negocio del petróleo que es la distribución, pues ese recurso natural siempre estará allá abajo y no lo podremos transformar en un recurso que aporte mayor crecimiento y desarrollo a la economía del país”.
Ambos académicos, sin embargo, coinciden en que la reforma energética será una de las principales pruebas que enfrentará el Presidente y el llamado Pacto por México.
“Creo que va a ser una de las pruebas más difíciles, (junto) con la reforma fiscal”, afirma Sánchez. “Esas dos son las pruebas de fuego”, coincide Meyer por separado.
AP
Criticó que los medios de comunicación utilicen la frase “privatización” cuando quiere que algo no pase (en el Congreso de la Unión), ya que la frase confunde mucho a la ciudadanía.
“A la reforma educativa le llaman privatización, eso dicen para echarle leña, para que no pase, para que no prospere. La reforma energética dicen que es privatización. No tiene ningún contenido privatizador”.
En rueda de prensa, Madero afirmó que el PAN “tiene una propuesta extraordinariamente vanguardista sobre el tema de la reforma energética”, aunque no ofreció más detalles al respecto.
El Presidente Enrique Peña Nieto afirmó el martes en una entrevista con el diario Financial Times se pronunció por explorar mecanismos que amplíen la capacidad productiva de Pemex a través de la participación del sector privado, e incluso mencionó que la necesidad de modernizar a Pemex se acordó en el Pacto por México.
El líder nacional del PRD, Jesús Zambrano, aseguró que los integrantes del Pacto no han discutido nada respecto de las reformas energética. “Esos planteamientos expresan exclusivamente el punto de vista y el interés del gobierno priista por lo que no son acuerdos del Pacto por México”.
El perredista aclaró que hasta el momento no ha firmado nada en representación de su partido sobre un acuerdo sobre la reforma energética.
Agregó que será el martes próximo cuando se reúna con los coordinadores parlamentarios de su partido y con el líder moral perredista, Cuauhtémoc Cárdenas, para hacer un posicionamiento conjunto sobre esta reforma.
Ayer, el Presidente insistió en que “no se trata de privatizar (Pemex), pues el Estado es el dueño del petróleo, pero hay una necesidad de ampliar la capacidad”.
Para el perredista y ex jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, la propuesta del Presidente “es la reversión de la expropiación petrolera de Lázaro Cárdenas”. Aseguró que lo que Pemex necesita es una mayor inversión, pues no se ha tomado en cuenta lo suficiente para explorar, y adelantó que los legisladores, diputados y senadores de izquierda defenderán que la paraestatal no se privatice.
El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, el priista Francisco Arroyo Vierya, afirmó que si se hace algún cambio al Artículo 27 constitucional pudiese ser sobre el perfeccionamiento y modernización de la empresa, “nunca sobre la propiedad originaria de los mexicanos en ésta que es una fuente de riqueza para la nación mexicana”.
Por otro lado, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, diálogo con organizaciones campesinas dentro del Pacto por México. Afirmó que se lograrán acuerdos para transformar la realidad que vive el agro nacional.
SinEmbargo.mx/Notimex
CLAVES
Un sector celoso
1 La industria petrolera es uno de los mayores símbolos del nacionalismo y la soberanía mexicana, dice el académico Lorenzo Meyer.
2 El presidente Lázaro Cárdenas nacionalizó el sector en 1938, y desde entonces se ha rechazado la participación privada en la paraestatal.
3 México llegó a su pico de producción en 2004, con 3.4 millones de barriles de crudo diario; la producción actual es de 2.5 millones de barriles.
• LORENZO MEYER Y ROBERTO SÁNCHEZ
Expertos difieren sobre la iniciativa
CIUDAD DE MÉXICO.- Para el académico y analista de la Universidad Nacional Autónoma de México, Lorenzo Meyer, el petróleo es una parte esencial del nacionalismo mexicano y una apertura al sector privado puede ser interpretada como que el país fracasó en su capacidad de hacerse cargo y manejar una empresa como Pemex.
“Sólo la nacionalización del petróleo logró por fin hacer que el grueso de los mexicanos sintieran que algo en principio era suyo, (porque) se habían enfrentado a intereses muy poderosos extranjeros, se había triunfado y se tenía que demostrar que los mexicanos pueden con la industria petrolera, que no es algo tan difícil y fuera de sus alcances”.
Otros como Roberto Sánchez de la Vara, de la Universidad Iberoamericana, consideran que es momento de superar el debate ideológico y darse cuenta de que Pemex no tiene la posibilidad de explotar el crudo por sí solo.
“Si no tenemos capital, si no tenemos tecnología, si no tenemos capacitación, si no tenemos lo más importante en el negocio del petróleo que es la distribución, pues ese recurso natural siempre estará allá abajo y no lo podremos transformar en un recurso que aporte mayor crecimiento y desarrollo a la economía del país”.
Ambos académicos, sin embargo, coinciden en que la reforma energética será una de las principales pruebas que enfrentará el Presidente y el llamado Pacto por México.
“Creo que va a ser una de las pruebas más difíciles, (junto) con la reforma fiscal”, afirma Sánchez. “Esas dos son las pruebas de fuego”, coincide Meyer por separado.
AP
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