México
Ecatepec alista recibimiento para el Papa
Este domingo, Francisco estará en el municipio del Estado de México, donde ofrecerá una misa
ECATEPEC, MÉXICO (13/FEB/2016).- Un total de 23 estacionamientos fueron habilitados
en Ecatepec y en Tecamac, para 43 mil vehículos de fieles que llegaron desde distintos puntos del país, antes de cerrar los accesos a Las Américas en la víspera del arribo del Papa Francisco.
Además a la Ley Seca, que decretaron municipios metropolitanos aledaños a Ecatepec, se suma la operación de "alcoholímetros" o puntos de revisión tanto en San Cristóbal, como en avenida Central y Vía Morelos, en la zona aledaña al sitio a donde arribará el Pontífice, retenes en los que agentes de tránsito y médicos supervisan que conductores y automovilistas no hayan consumido alcohol.
Desde las seis de la tarde del sábado, quedó cerrado el acceso vial a Las Américas, donde solo se permite el paso a los residentes, previa identificación.
La zona de El Caracol, donde se montó un altar sobre suelo salitroso de lo que fue la fábrica Sosa Texcoco, quedó acordonada por más de 14 mil policías estatales, municipales, federales y elementos del Ejército Mexicano.
La noche del sábado ya habían arribado a este sitio, miles de fieles provenientes de no sólo del Estado de México, sino de diversos puntos del país como Morelos, Ciudad de México y Tamaulipas.
La venta de banderas, café por litro, playeras, tacos, tortas y el alquiler de baños, reactivó la economía de los vecinos de Las Américas, que usaron sus patios y autos para la venta de recuerdos y comida.
Además a la Ley Seca, que decretaron municipios metropolitanos aledaños a Ecatepec, se suma la operación de "alcoholímetros" o puntos de revisión tanto en San Cristóbal, como en avenida Central y Vía Morelos, en la zona aledaña al sitio a donde arribará el Pontífice, retenes en los que agentes de tránsito y médicos supervisan que conductores y automovilistas no hayan consumido alcohol.
Desde las seis de la tarde del sábado, quedó cerrado el acceso vial a Las Américas, donde solo se permite el paso a los residentes, previa identificación.
La zona de El Caracol, donde se montó un altar sobre suelo salitroso de lo que fue la fábrica Sosa Texcoco, quedó acordonada por más de 14 mil policías estatales, municipales, federales y elementos del Ejército Mexicano.
La noche del sábado ya habían arribado a este sitio, miles de fieles provenientes de no sólo del Estado de México, sino de diversos puntos del país como Morelos, Ciudad de México y Tamaulipas.
La venta de banderas, café por litro, playeras, tacos, tortas y el alquiler de baños, reactivó la economía de los vecinos de Las Américas, que usaron sus patios y autos para la venta de recuerdos y comida.
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