México

De la Madrid acepta que toleró corrupción

Ridícula y patética, la respuesta de Salinas: Aristegui

CIUDAD DE MÉXICO.- El ex presidente Miguel de la Madrid aceptó que en su Gobierno toleró abusos y corrupción, entre ellos, de Joaquín Hernández Galicia, “La Quina”, pues temía que de enfrentar al entonces poderoso líder del sindicato petrolero provocaría algún conflicto laboral y hasta social, que lo obligara a echar mano del Ejército.
“Yo sabía que ‘La Quina’ importaba armas y que las tenía preparadas para algún enfrentamiento con el Gobierno”, reveló el ex presidente, entrevistado por la periodista Carmen Aristegui.

Incluso, aseguró que “La Quina” lo amenazó en diversas ocasiones, cuando pretendió cooptar sus pretensiones.
Precisó que Hernández Galicia sacó provecho personal de los contratos en Pemex y en la venta de plazas en la paraestatal.

En una segunda parte de la entrevista, el ex mandatario se refirió a Joaquín Hernández Galicia, el entonces poderoso líder de los petroleros, y de la forma como toleró la corrupción en su Gobierno.

“Cuando supe (lo de las armas), le ordené al entonces general de la Defensa, Juan Arévalo, que por oficio le advirtiera que era un delito introducir armas de contrabando”.

Aceptó que “La Quina” fue quien distribuyó la información sobre el asesinato de una trabajadora doméstica de la familia de los Salinas.

“El arresto de ‘La Quina’ fue inevitable, porque era muy hostil, hacia mí primero y luego hacia Salinas”, aseveró en la entrevista.

Con la afirmación se comprobó, cuando menos verbalmente, que Hernández Galicia había patrocinado la publicación del libro ¿Un asesino en palacio?, que relata que uno de los miembros de la familia Salinas de Gortari --Raúl o Carlos-- asesinó con un rifle calibre 22 a una empleada doméstica.

Un día antes, De la Madrid aseguró haberse equivocado al promover a Carlos Salinas, a quien acusó de corrupto y de permitir vínculos familiares con el narcotráfico.

De la Madrid dijo que la alianza entre los grandes sindicatos y los gobiernos del PRI se debió a que entre ellos se daban apoyo recíproco. “Éramos benévolos mutuamente... podría calificarse de complicidad”, admite el ex presidente.

Aseguró incluso que el Gobierno toleraba los abusos del sindicato “¡y el sindicato toleraba al Gobierno sus abusos!”.
En la entrevista dijo que en lo general enfrentó la corrupción, pero que “a veces” tenía que voltear a otro lado para ignorar el flagelo.

Como prototipo del aliado del sistema colocó a Carlos Hank González. Dijo que nunca amenazó con violencia a los gobiernos del PRI. “Hank González se enriqueció por los contratos de transportación de productos petrolíferos”.
Aunque señaló que la flota petrolera era “muy eficaz” y que no era necesaria la corrupción para sacar beneficios sólo con los contratos.

Hernández Galicia fue detenido en enero de 1989 en un operativo militar en su casa acusado, entre otros delitos, de acopio de armas. “La Quina” fue condenado a 35 años por homicidio y posesión de armas de uso exclusivo del Ejército, pero quedó en libertad en 1997.

Carmen Aristegui le preguntó directo a Miguel de la Madrid desde cuándo se empezó a “cocinar” el llamado “quinazo”.
“Desde el principio de mi Gobierno”, respondió el ex mandatario.

Luego de que se difundieran extractos de la entrevista, el propio ex presidente Miguel de la Madrid las desacreditó.
Dijo encontrarse convaleciendo de un estado de salud “que no me permite procesar adecuadamente diálogos o cuestionamientos, tal como consta en las grabaciones difundidas por la señora Aristegui, en las que mi tono de voz se escucha débil y confuso. Por lo que dejo en claro, que después de haber escuchado la entrevista con la señora Aristegui, mis respuestas carecen de validez y exactitud”.

En la segunda parte de la entrevista, la periodista le preguntó a De la Madrid que si para gobernar México se necesitaba cinismo, a lo que el ex presidente respondió: “Sí, mucho”.
(El Universal)

Ridícula y patética, la respuesta de Salinas: Aristegui
Controversia


CIUDAD DE MÉXICO.- La periodista Carmen Aristegui calificó de ridícula y patética la respuesta de Carlos Salinas en torno a las declaraciones acusatorias de Miguel de la Madrid.

Miguel de la Madrid Hurtado (ex presidente de México de 1982 a 1988) acusó a Carlos Salinas de Gortari de fomentar en su sexenio la corrupción y de robar fondos públicos, y aseguró que su hermano Raúl tuvo contacto con narcotraficantes.

El ex presidente reveló lo anterior a Carmen Aristegui en una entrevista concedida el pasado 15 de abril; las declaraciones se transmitieron el miércoles a las 8:00 horas, en el programa de radio de la periodista. De la Madrid, de 74 años, se desdijo el mismo miércoles en una carta que su hijo Rafael envió a los medios.

En una misiva dirigida a Aristegui, Carlos Salinas también respondió. Expresó su “dolor e indignación” que le produjo enterarse de los términos y condiciones en que le realizó la entrevista a De la Madrid.

En entrevista radiofónica ayer con José Cárdenas, Aristegui aseguró que De la Madrid "es un hombre lúcido".
"Estamos hablando de un ex presidente que aún reconoce quién es quién y no está delirando ni agonizando".
La periodista le cuestionó a Salinas por qué en su carta incluyó sólo la parte que le convenía.

Mencionó que el ex presidente hizo referencia a un texto que publicó un diario capitalino, en donde se hace alusión al mal estado de salud de De la Madrid y que incluso se rumoró la muerte de éste.

"Esta información de la que se vale Carlos Salinas de Gortari para regañarme, pero que no incluye en esa carta el desmentido que la oficina de Miguel de la Madrid y sus hijos se encargaron de dar horas después que se difundió.
"Muy convenencieramente sólo cita una parte de la prensa, pero no cita ni el comunicado de Miguel de la Madrid ni el comunicado reproducido por la prensa que lo desmiente".

Por otra parte, la periodista negó que sea utilizada por las fracciones políticas para mandarse mensajes de cara a las elecciones.

"No soy ingenua y no creo que pueda afectar al PRI, no hay propósitos electorales".
Síguenos en

Temas

Sigue navegando