México
Considera ONG fundamentales radios comunitarias para la democracia
La concentración de medios de comunicación en dos empresas acaba con la pluralidad
CIUDAD DE MÉXICO.- La existencia de las radios comunitarias son fundamentales para la democracia, mientras que la concentración de medios de comunicación en dos empresas acaba con la pluralidad, opinó el director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, Luis Arriaga Valenzuela.
En conferencia de prensa, el activista de derechos humanos aseveró que el cierre de las estaciones de radios de comunitarias es un proceso que va contra los sectores más empobrecidos de México, como es el caso de la comunidad Purépecha en Ocumicho, Michoacán.
Asimismo, al dar a conocer las acciones que se llevando a cabo luego de que se cerró la estación de radio Uekakua, aseveró que la persecución de los operarios de las estaciones comunitarias es un uso discrecional del sistema de procuración e impartición de justicia en perjuicio de los más pobres.
Agregó que además de ser fundamentales para la democracia, estos medios alternativos son una herramienta que busca el acercamiento, la pluralidad y el diálogo porque están al servicio de la comunidad.
En este caso una artesana de la localidad, de origen Purépecha, de nombre Rosa Cruz, esta como indiciada.
Al respecto, Arriaga Valenzuela explicó que fue llevada con engaños a declarar y que posteriormente recibió un citatorio donde se le consideraba ya como indiciada, sin embargo los abogados de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias ( AMARC) ya la están representado ante las autoridades.
A su vez, la vicepresidenta mundial de la referida Asociación, Aleida Calleja, destacó que en México operan aproximadamente 200 radios comunitarias y religiosas, de las cuales la gran mayoría no tienen permiso o registro.
Asimismo, destacó que existe el riesgo de que las radios comunitarias sean utilizadas por grupos delictivos, pero ese peligro también se da en las estaciones comerciales y en general en los medios de comunicación.
En conferencia de prensa, el activista de derechos humanos aseveró que el cierre de las estaciones de radios de comunitarias es un proceso que va contra los sectores más empobrecidos de México, como es el caso de la comunidad Purépecha en Ocumicho, Michoacán.
Asimismo, al dar a conocer las acciones que se llevando a cabo luego de que se cerró la estación de radio Uekakua, aseveró que la persecución de los operarios de las estaciones comunitarias es un uso discrecional del sistema de procuración e impartición de justicia en perjuicio de los más pobres.
Agregó que además de ser fundamentales para la democracia, estos medios alternativos son una herramienta que busca el acercamiento, la pluralidad y el diálogo porque están al servicio de la comunidad.
En este caso una artesana de la localidad, de origen Purépecha, de nombre Rosa Cruz, esta como indiciada.
Al respecto, Arriaga Valenzuela explicó que fue llevada con engaños a declarar y que posteriormente recibió un citatorio donde se le consideraba ya como indiciada, sin embargo los abogados de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias ( AMARC) ya la están representado ante las autoridades.
A su vez, la vicepresidenta mundial de la referida Asociación, Aleida Calleja, destacó que en México operan aproximadamente 200 radios comunitarias y religiosas, de las cuales la gran mayoría no tienen permiso o registro.
Asimismo, destacó que existe el riesgo de que las radios comunitarias sean utilizadas por grupos delictivos, pero ese peligro también se da en las estaciones comerciales y en general en los medios de comunicación.
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