México
Condición indígena y marginalidad, “pistas” del por qué hay menos católicos
La diversidad religiosa es una realidad con la que el Papa Benedicto XVI se encontrará en su próxima visita a México
GUADALAJARA, JALISCO (18/MAR/2012).- México ya no es tan fiel. Esta frase resumiría la realidad religiosa en México 33 años después de la visita del primer Papa al país, Juan Pablo II, quien se dirigió a una sociedad cuya identidad cultural estaba muy ligada a la fe católica.
Aquél “México siempre fiel” de 1979 es muy distinto al actual; los mexicanos están mostrando signos claros de cambio en cuanto a su creencia y la diversidad religiosa, la cual llegó para quedarse (ver infográfico).
Las expertas en investigación religiosa, Cristina Gutiérrez y Renée de la Torre, aseguran que a través de sus estudios es difícil encontrar motivos concretos que expliquen el por qué del fenómeno, pero sí ven pistas que ayudan a su entendimiento.
“A través de la distribución de las respuestas censales, nosotros hemos tratado de encontrar pistas de las razones sociales, económicas, demográficas e históricas que llevan a esta situación (el cambio religioso), porque no le podemos preguntar a la sociedad en su conjunto. Pero sí nos brinca que por ejemplo sea en los lugares donde existe una mayor concentración de población indígena como es en el Sureste del país, en donde hay un ritmo de cambio religioso mucho más acelerado que en cualquier otro sitio. Esto no te da la respuesta, pero te da una pista”, afirma Gutiérrez.
De la Torre agrega que estas pistas indican las probabilidades de qué condiciones son las que crean más probabilidades para que la gente opte por cambiar la religión.
“Y otra cosa que nosotros encontramos, que fue la más fuerte en términos estadísticos, es la marginalidad. Tanto los municipios con mayores índices de marginalidad como a nivel del hogar del cual proviene ese entrevistado, son los que tenían mayores índices de marginalidad y son los que habían optado, sobre todo, por cambiar del catolicismo a otro tipo de religión, principalmente evangélica o pentecostal”.
“Además, no todas las religiones tienen el mismo perfil. Los mormones van con un perfil de clase media urbana; entre adventistas es un perfil étnico casi monolingüe muy apartado de la ciudad con índices de analfabetismo y marginalidad”.
Más religioso
El Censo de Población y Vivienda de 2010, hecho por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), arrojó datos sobre la población de cinco años y más que se confesó católico. Y aunque esta religión es la predominante con 83.9% que responden pertenecer a esta fe, en 2000 el porcentaje estaba en 88% y en 1990 era de 89.7 por ciento.
Para entender el nuevo matiz religioso de México, en 1950 sólo 1.79% de la población no era católico.
De la Torre advierte que esto no significa que México sea menos religioso, más bien es menos católico, “porque hay una pluralidad de opciones religiosas por la cual la población está optando. Incluso entre aquellos que se definen como sin religión, la mayoría de las veces no es gente que no tenga una práctica religiosa o una creencia, puede ser porque practican la costumbre indígena, puede ser porque han optado por una espiritualidad de tipo New Age o porque quieren una religiosidad al margen de la institución y la pregunta religión la consideran como parte de la institución. Incluso hay evangélicos que se autoproclaman frente al Censo como sin religión porque hay una reacción contra la pertenencia a una institución”.
Cristina Gutiérrez destaca que la actual dinámica social general es la que lleva a esa disminución en la pertenencia religiosa católica y tiene diferentes órdenes de respuesta. “Tú te puedes preguntar por qué una persona en lo particular se convierte a otra religión, preguntar también por qué un grupo de jóvenes en una franja de edad está sintiendo menor atractivo por la pertenencia religiosa católica y está iniciando un proceso de exploración de religiosidades emotivas a través de la música, por ejemplo”.
La Zona Metropolitana de Guadalajara es un buen exponente de la transformación en la pertenencia religiosa. Incluso en el libro titulado Una ciudad con muchos dioses, en el cual colaboraron ambas investigadoras, encuentran que existen 449 lugares de culto donde se puede optar por diferentes estrategias.
“De acuerdo a los niveles en los que te estás planteando la pregunta; la pregunta del por qué una persona se convierte, la respuesta va a tener que ver mucho con una crisis personal en la que no encuentras respuesta, y otra muy diferente si te planteas a nivel de una ciudad o sociedad el por qué se está transformando”, señala Gutiérrez.
La vitrina de Guadalajara
Renée de la Torre ha descubierto, a través de sus investigaciones, que la Iglesia Bautista es sumamente importante en Guadalajara, pues es la denominación que más centros de culto tiene en esta ciudad con al menos 66 lugares.
“Es por eso que los bautistas son los que tienen mayor predominancia en Guadalajara, después de la católica, y es una denominación que llegó hace mucho que además tiene el hospital México-Americano. Son los que tienen la distribución más amplia en la Zona Metropolitana de Guadalajara”.
“Muchos pensarían que es La Luz del Mundo, pero no es así. Esta iglesia en 2007 tenía 33 centros de culto, que además tienen una realidad super dinámica, surgen como hongos, pero también se mueven muchísimo. Ya no son como los templos católicos que tenían una ubicación histórica de inicio hasta que se acabe el mundo, inamovible, ahora son otro tipo de estrategias donde los templos son casas, bodegas, cines; no son espacios construidos ad hoc.
De la Torre también ve que a nivel nacional los Testigos de Jehová son los mejor organizados pues es la única denominación que tiene presencia en 90% de los municipios del país. Tienen una distribución casi total en México.
Cristina Gutiérrez destaca que como denominación ellos (Testigos de Jehová) son los más importantes como organización, “pero como tipo de religiosidad nosotros hacemos como grupitos de organizaciones no católicas, Testigos de Jehová no es la más importante, más bien lo son los grupos que se denominan evangélicos o pentecostales, pero no los vemos tan claramente porque no son una iglesia única, son cientos, unas tienen registro ante la Secretaría de Gobernación, otras no. Unas tienen presencia nacional, como Asambleas de Dios, y otras tienen cinco templos en Oaxaca y dos en Tlaxcala. O una incluso solamente en una colonia de Guadalajara que tiene sólo 50 seguidores”.
Del otro lado de la Calzada
Incluso, Gutiérrez incluye como una pista importante averiguar la ubicación de los lugares de culto para explicar mejor los motivos por los que los tapatíos hacen ese cambio religioso de lo católico hacia lo no católico.
“Nos encontramos que la ubicación de los diferentes grupos religiosos es distinta. Los mormones en Guadalajara se ubican muy claramente en lugares de clase media alta. Pero los Testigos de Jehová están por toda la ciudad de una forma completamente homogénea. La Luz del Mundo por su parte, se encuentra muy claramente ubicada en el margen Oriental de la ciudad, es decir, del otro lado de la Calzada, y después en la zona extraperiférica”.
Gutiérrez cree que fue muy importante tratar ver estas distinciones y ver que cada confesión tiene su distribución y eso habla de una cierta intencionalidad misional. “Pero también habla de los lugares en donde hay un encuentro, en términos de mercado, aunque suene un poco grotesco, hay un encuentro entre la oferta y la demanda. Son lugares en donde pega la oferta no católica”.
Otra de las pistas valiosas que encuentran las investigadoras es ver qué hacen los centros de culto no católicos, qué necesidades atienden, y ahí observan que los lugares no católicos están atendiendo una serie de necesidades sociales, de hecho descuidadas por el propio Estado, como pueden ser servicios de salud, educación, de esparcimiento para los jóvenes, de atención a la violencia intrafamiliar, a la violencia de género; atención psicológica, consultorías de nutrición y adicciones a todo lo que da.
“Ahí te está hablando indirectamente, a través de las necesidades a las que sirven, necesidades a las que responden y, de alguna manera, que no están siendo respondidas por la oferta católica”, concluye Cristina Gutiérrez.
LA BIENVENIDA
Con mariachi y bailables
Un grupo de mariachis y un ballet folclórico recibirán al Papa Benedicto XVI el próximo 23 de marzo a su llegada a México.
La recepción oficial al jefe del Estado Vaticano se efectuará a las 16.30 hora del viernes en el Aeropuerto Internacional de Guanajuato, en el municipio de Silao.
Además, en la recepción están previstos saludos, honores militares, himnos, unas palabras del Presidente Felipe Calderón y un mensaje del Papa.
QUIÉN ES QUIÉN EN LA INVESTIGACIÓN
Renée de la Torre Castellanos
Doctora en Ciencias Sociales, CIESAS-UdeG. Tiene maestría en Comunicación Social por el ITESO, y licenciada en Ciencias de la Comunicación por esa misma casa de estudios.
Es profesora-investigadora en el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Occidente desde 1993 e investigadora en el SIN.
Entre sus publicaciones destaca Los hijos de la luz. Discurso, identidad y poder en La Luz del Mundo (1995); ha coordinado los libros La ciudadanización de la política en Jalisco (2001) y Los rostros del conservadurismo mexicano (2005).
Cristina Gutiérrez Zúñiga
Es licenciada en Sociología por la Universidad Nacional Autónoma de México. Maestra en Sociología de la Religión por la London School of Economics and Political Science, University of London, en el Reino Unido; y Doctora en Ciencias Sociales por El Colegio de Jalisco, AC.
Es profesora investigadora del Programa de Estudios Jaliscienses de la Universidad de Guadalajara, con sede en El Colegio de Jalisco, AC, y maestra en el Departamento de Sociología del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara.
Olga Odgers Ortiz
Es doctora en sociología por la École des Hautes Études en Sciences Sociales (París, Francia). Desde 1999 es investigadora de El Colegio de la Frontera Norte, en donde se ha especializado en el estudio del impacto de la migración México-Estados Unidos en el cambio religioso. Actualmente es codirectora del proyecto interinstitucional Perfiles y tendencias del cambio religioso en México: 1950-2000.
Entre sus publicaciones destaca el libro Identités frontalières: Immigrés mexicains aux États-Unis (L’Harmattan, 2002).
Pertenece al Sistema Nacional de Investigadores.
La Iglesia de la Luz del Mundo es una de las más predominantes en la ZMG, además de la Iglesia Bautista y los Testigos de Jehová.
Aquél “México siempre fiel” de 1979 es muy distinto al actual; los mexicanos están mostrando signos claros de cambio en cuanto a su creencia y la diversidad religiosa, la cual llegó para quedarse (ver infográfico).
Las expertas en investigación religiosa, Cristina Gutiérrez y Renée de la Torre, aseguran que a través de sus estudios es difícil encontrar motivos concretos que expliquen el por qué del fenómeno, pero sí ven pistas que ayudan a su entendimiento.
“A través de la distribución de las respuestas censales, nosotros hemos tratado de encontrar pistas de las razones sociales, económicas, demográficas e históricas que llevan a esta situación (el cambio religioso), porque no le podemos preguntar a la sociedad en su conjunto. Pero sí nos brinca que por ejemplo sea en los lugares donde existe una mayor concentración de población indígena como es en el Sureste del país, en donde hay un ritmo de cambio religioso mucho más acelerado que en cualquier otro sitio. Esto no te da la respuesta, pero te da una pista”, afirma Gutiérrez.
De la Torre agrega que estas pistas indican las probabilidades de qué condiciones son las que crean más probabilidades para que la gente opte por cambiar la religión.
“Y otra cosa que nosotros encontramos, que fue la más fuerte en términos estadísticos, es la marginalidad. Tanto los municipios con mayores índices de marginalidad como a nivel del hogar del cual proviene ese entrevistado, son los que tenían mayores índices de marginalidad y son los que habían optado, sobre todo, por cambiar del catolicismo a otro tipo de religión, principalmente evangélica o pentecostal”.
“Además, no todas las religiones tienen el mismo perfil. Los mormones van con un perfil de clase media urbana; entre adventistas es un perfil étnico casi monolingüe muy apartado de la ciudad con índices de analfabetismo y marginalidad”.
Más religioso
El Censo de Población y Vivienda de 2010, hecho por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), arrojó datos sobre la población de cinco años y más que se confesó católico. Y aunque esta religión es la predominante con 83.9% que responden pertenecer a esta fe, en 2000 el porcentaje estaba en 88% y en 1990 era de 89.7 por ciento.
Para entender el nuevo matiz religioso de México, en 1950 sólo 1.79% de la población no era católico.
De la Torre advierte que esto no significa que México sea menos religioso, más bien es menos católico, “porque hay una pluralidad de opciones religiosas por la cual la población está optando. Incluso entre aquellos que se definen como sin religión, la mayoría de las veces no es gente que no tenga una práctica religiosa o una creencia, puede ser porque practican la costumbre indígena, puede ser porque han optado por una espiritualidad de tipo New Age o porque quieren una religiosidad al margen de la institución y la pregunta religión la consideran como parte de la institución. Incluso hay evangélicos que se autoproclaman frente al Censo como sin religión porque hay una reacción contra la pertenencia a una institución”.
Cristina Gutiérrez destaca que la actual dinámica social general es la que lleva a esa disminución en la pertenencia religiosa católica y tiene diferentes órdenes de respuesta. “Tú te puedes preguntar por qué una persona en lo particular se convierte a otra religión, preguntar también por qué un grupo de jóvenes en una franja de edad está sintiendo menor atractivo por la pertenencia religiosa católica y está iniciando un proceso de exploración de religiosidades emotivas a través de la música, por ejemplo”.
La Zona Metropolitana de Guadalajara es un buen exponente de la transformación en la pertenencia religiosa. Incluso en el libro titulado Una ciudad con muchos dioses, en el cual colaboraron ambas investigadoras, encuentran que existen 449 lugares de culto donde se puede optar por diferentes estrategias.
“De acuerdo a los niveles en los que te estás planteando la pregunta; la pregunta del por qué una persona se convierte, la respuesta va a tener que ver mucho con una crisis personal en la que no encuentras respuesta, y otra muy diferente si te planteas a nivel de una ciudad o sociedad el por qué se está transformando”, señala Gutiérrez.
La vitrina de Guadalajara
Renée de la Torre ha descubierto, a través de sus investigaciones, que la Iglesia Bautista es sumamente importante en Guadalajara, pues es la denominación que más centros de culto tiene en esta ciudad con al menos 66 lugares.
“Es por eso que los bautistas son los que tienen mayor predominancia en Guadalajara, después de la católica, y es una denominación que llegó hace mucho que además tiene el hospital México-Americano. Son los que tienen la distribución más amplia en la Zona Metropolitana de Guadalajara”.
“Muchos pensarían que es La Luz del Mundo, pero no es así. Esta iglesia en 2007 tenía 33 centros de culto, que además tienen una realidad super dinámica, surgen como hongos, pero también se mueven muchísimo. Ya no son como los templos católicos que tenían una ubicación histórica de inicio hasta que se acabe el mundo, inamovible, ahora son otro tipo de estrategias donde los templos son casas, bodegas, cines; no son espacios construidos ad hoc.
De la Torre también ve que a nivel nacional los Testigos de Jehová son los mejor organizados pues es la única denominación que tiene presencia en 90% de los municipios del país. Tienen una distribución casi total en México.
Cristina Gutiérrez destaca que como denominación ellos (Testigos de Jehová) son los más importantes como organización, “pero como tipo de religiosidad nosotros hacemos como grupitos de organizaciones no católicas, Testigos de Jehová no es la más importante, más bien lo son los grupos que se denominan evangélicos o pentecostales, pero no los vemos tan claramente porque no son una iglesia única, son cientos, unas tienen registro ante la Secretaría de Gobernación, otras no. Unas tienen presencia nacional, como Asambleas de Dios, y otras tienen cinco templos en Oaxaca y dos en Tlaxcala. O una incluso solamente en una colonia de Guadalajara que tiene sólo 50 seguidores”.
Del otro lado de la Calzada
Incluso, Gutiérrez incluye como una pista importante averiguar la ubicación de los lugares de culto para explicar mejor los motivos por los que los tapatíos hacen ese cambio religioso de lo católico hacia lo no católico.
“Nos encontramos que la ubicación de los diferentes grupos religiosos es distinta. Los mormones en Guadalajara se ubican muy claramente en lugares de clase media alta. Pero los Testigos de Jehová están por toda la ciudad de una forma completamente homogénea. La Luz del Mundo por su parte, se encuentra muy claramente ubicada en el margen Oriental de la ciudad, es decir, del otro lado de la Calzada, y después en la zona extraperiférica”.
Gutiérrez cree que fue muy importante tratar ver estas distinciones y ver que cada confesión tiene su distribución y eso habla de una cierta intencionalidad misional. “Pero también habla de los lugares en donde hay un encuentro, en términos de mercado, aunque suene un poco grotesco, hay un encuentro entre la oferta y la demanda. Son lugares en donde pega la oferta no católica”.
Otra de las pistas valiosas que encuentran las investigadoras es ver qué hacen los centros de culto no católicos, qué necesidades atienden, y ahí observan que los lugares no católicos están atendiendo una serie de necesidades sociales, de hecho descuidadas por el propio Estado, como pueden ser servicios de salud, educación, de esparcimiento para los jóvenes, de atención a la violencia intrafamiliar, a la violencia de género; atención psicológica, consultorías de nutrición y adicciones a todo lo que da.
“Ahí te está hablando indirectamente, a través de las necesidades a las que sirven, necesidades a las que responden y, de alguna manera, que no están siendo respondidas por la oferta católica”, concluye Cristina Gutiérrez.
LA BIENVENIDA
Con mariachi y bailables
Un grupo de mariachis y un ballet folclórico recibirán al Papa Benedicto XVI el próximo 23 de marzo a su llegada a México.
La recepción oficial al jefe del Estado Vaticano se efectuará a las 16.30 hora del viernes en el Aeropuerto Internacional de Guanajuato, en el municipio de Silao.
Además, en la recepción están previstos saludos, honores militares, himnos, unas palabras del Presidente Felipe Calderón y un mensaje del Papa.
QUIÉN ES QUIÉN EN LA INVESTIGACIÓN
Renée de la Torre Castellanos
Doctora en Ciencias Sociales, CIESAS-UdeG. Tiene maestría en Comunicación Social por el ITESO, y licenciada en Ciencias de la Comunicación por esa misma casa de estudios.
Es profesora-investigadora en el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Occidente desde 1993 e investigadora en el SIN.
Entre sus publicaciones destaca Los hijos de la luz. Discurso, identidad y poder en La Luz del Mundo (1995); ha coordinado los libros La ciudadanización de la política en Jalisco (2001) y Los rostros del conservadurismo mexicano (2005).
Cristina Gutiérrez Zúñiga
Es licenciada en Sociología por la Universidad Nacional Autónoma de México. Maestra en Sociología de la Religión por la London School of Economics and Political Science, University of London, en el Reino Unido; y Doctora en Ciencias Sociales por El Colegio de Jalisco, AC.
Es profesora investigadora del Programa de Estudios Jaliscienses de la Universidad de Guadalajara, con sede en El Colegio de Jalisco, AC, y maestra en el Departamento de Sociología del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara.
Olga Odgers Ortiz
Es doctora en sociología por la École des Hautes Études en Sciences Sociales (París, Francia). Desde 1999 es investigadora de El Colegio de la Frontera Norte, en donde se ha especializado en el estudio del impacto de la migración México-Estados Unidos en el cambio religioso. Actualmente es codirectora del proyecto interinstitucional Perfiles y tendencias del cambio religioso en México: 1950-2000.
Entre sus publicaciones destaca el libro Identités frontalières: Immigrés mexicains aux États-Unis (L’Harmattan, 2002).
Pertenece al Sistema Nacional de Investigadores.
La Iglesia de la Luz del Mundo es una de las más predominantes en la ZMG, además de la Iglesia Bautista y los Testigos de Jehová.
Síguenos en