México

Comida “chatarra” afecta a menores mexicanos en EU

Parte del problema se debe a que los papás tienen dificultades para hacer que sus hijos se alimenten bien, por la barrera del idioma

CIUDAD DE MÉXICO.- Cuatro de cada 10 hijos de migrantes mexicanos en Estados Unidos están “afectados gravemente” por la obesidad y el sobrepeso, por arriba de los índices que presentan otros grupos de inmigrantes en aquel país, debido a que los padres de familia tienen “dificultades” para proteger a sus hijos del consumo de “comida chatarra”.

El estudio elaborado de forma conjunta entre la Universidad de California y las secretarías de Gobernación, a través del Consejo Nacional de Población, la de Salud y de Relaciones Exteriores, señala que además los hijos de los migrantes, que en el año 2008 sumaron 19.3 millones en aquel país, presentan el menor promedio de estatura entre la comunidad no estadounidense.

Bajo el nombre de Los hijos de migrantes mexicanos en Estados Unidos, el reporte advierte que el mayor riesgo de obesidad está entre los hijos de padres inmigrantes que no hablan inglés. Además de que en algunos grupos, como los adolescentes, los hijos de mexicanos ocupan el primer lugar de obesidad.

La investigación de la Escuela de Salud Pública de las Américas y de los centros de investigación en Políticas de Salud y Migración de esa universidad, así como las dependencias del gobierno mexicano, presenta resultados diferenciados, pues afirma que hijos de los migrantes mexicanos “son más proclives a sufrir enfermedades relacionadas con la malnutrición, incluyendo la anemia, diarrea, colitis, pero también el sobrepeso y la obesidad”.

La barrera del idioma

El documento explica que entre los 31.1 millones de personas de origen mexicano residentes en aquel país, 19.3 millones nacieron en Estados Unidos: 10.1 millones en la llamada segunda generación y 9.2 millones más en las posteriores.

Al identificar que la obesidad es uno de los “problemas más serios de salud pública” en aquel país, se sugiere lanzar una campaña de educación nutricional en la que se enseñe tanto a los padres como a niños, a partir del cuarto grado de primaria (alrededor de los nueve años de edad) que se tiene que “evitar la comida de baja calidad alimenticia”.

Una de las primeras dificultades para ello, es el dominio del idioma, pues “al menos uno de los padres de alrededor de siete de cada 10 hijos de mexicanos no domina el idioma inglés”.
Ese desconocimiento de la lengua impacta, además de los aspectos educativos y sociales, en la alimentación de los menores, afirma el estudio. Como ejemplo cita que los niños que cursaron tercero de primaria y provenían de padres que no hablaban el inglés, 50 % de ellos tenían sobrepeso u obesidad.

“Los padres pueden tener dificultades para proteger a sus hijos del riesgo de obesidad, en parte debido a la amplia oferta estadounidense de alimentos con poco valor nutricional, pero ricos en grasas, sodio y azúcares”.

Esas condiciones llevaron a los niños varones de 12 a 15 años de edad a ocupar el primer lugar de obesidad con un peso promedio de 63.5 kilogramos, por arriba de los niños obesos afroamericanos (60.6 kilogramos) y los hijos de nativos blancos (59 kilogramos) o de otros inmigrantes (54.4 kilogramos).


CIFRAS DE HISPANOS EN EU

Mal que acecha a generaciones

22.3% de la población migrante en EU son mexicanos

31.1 millones de mexicanos y sus descendientes viven en Estados Unidos

6.3 millones de los niños de mexicanos tienen menos de 18 años de edad

4 de cada 10 hijos de mexicanos en EU tiene sobrepeso u obesidad

63.5 kg en promedio, pesan los varones adolescentes paisanos

56.5 kg pesan las hijas de connacionales de 12 a 15 años de edad, en EU

FUENTE: Estudio “Los hijos de migrantes mexicanos en Estados Unidos”

Llaman a combatir la desnutrición

Los secretarios de Educación del Sureste del país demandaron a la Secretaría de Educación Pública (SEP) atender la desnutrición de millones de niños en México, de la misma manera que se hace con la obesidad.

En tanto que los secretarios de Salud del país pidieron que la Estrategia Nacional de Salud Alimentaria y contra el Sobrepeso y la Obesidad tenga la “autorización” de los gobernadores para identificar líneas de acción en los estados para la recomposición alimentaria de los desayunos escolares.

En el encuentro del Consejo Nacional de Autoridades Educativas (Conaedu) con los secretarios de educación de los estados del Sureste del país, el secretario de educación de Chiapas, Javier Álvarez, planteó al secretario Alonso Lujambio su preocupación por incorporar en esa política de salud alimentaria la atención a los niños con desnutrición, que se concentra particularmente en zonas rurales.

Consultados por separado los secretarios de Tlaxcala, Yucatán y Oaxaca manifestaron que esa es una “preocupación” que en paralelo se tiene junto con el sobrepeso.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública 34.1% de la población indígena del país presenta baja talla como reflejo de la desnutrición que los afecta.

Las tasas nacionales señalan que mientras 8.9% de los niños entre cinco y 11 años de edad presentan obesidad, otro 5.4% tiene bajo peso y adelgazamiento.

 Son Chiapas, Hidalgo, Guerrero, Oaxaca y Zacatecas los que tiene mayores índices de desnutrición entre niños en edad escolar.

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