México

Cátedra Sergio García Ramírez

''Honor a quien honor merece'', reza uno de los proverbios más antiguos de toda civilización

“Honor a quien honor merece”, reza uno de los proverbios más antiguos de toda civilización, de ahí que me parece que el Colegio de Jalisco alcanza otras dimensiones al establecer la Cátedra Sergio García Ramírez, insigne jalisciense, hombre de letras, de leyes, de compromiso, pero sobre todo dueño de una sencillez que hace enrojecer a quienes hemos tenido el privilegio de ser receptores de su mensaje y conocer de su inteligencia.

Convencido de que “fomentar la utopía de grandes miras” es una de las formas de contribuir al desarrollo intelectual de los jaliscienses, el Colegio de Jalisco en voz de su presidente, José Luis Leal Sanabria, dejó en claro que la implementación de una Cátedra implica un privilegio, responsabilidad y compromiso en el que solamente personajes como el Doctor Sergio García Ramírez tienen la estatura y capacidad para abonar a sus audiencias elementos indispensables que lleven a la reflexión para luego poner en acción el resultado de sus deliberaciones.

Y la verdad de las cosas es que la disertación del doctor García Ramírez nos dejó bastantes temas para llevar a la reflexión, a la investigación y si nos apuramos un poco, a participar de una u otra forma en todos ellos, pues de eso dependerá el que México pueda consolidar la evolución que ha tenido en el ámbito internacional y el par de siglos en los cuales los derechos humanos pasaron de ser sólo un tema de agenda, para llegar a convertirse hoy en día en una acción vigente en el accionar de la sociedad mexicana.

Que hay muchos “prietitos en el arroz”, ni duda cabe, pues ni a los individuos, ni a la misma sociedad se les puede exigir una perfección que si acaso existiere, no se presenta de la noche a la mañana.

Un botón de muestra de esa evolución tiene que ver con las tres sentencias condenatorias emitidas en el presente año por la Corte Internacional en contra de actuaciones del Estado mexicano, mismas que fueron aceptadas por el Gobierno, más otras tres que se encuentran en proceso de ser dadas a conocer, lo que nos habla de la preocupación que se tiene al respecto, así como de la decisión de corregir lo que sea necesario en pos de una mejor comunión societaria.

De la elocuencia, conocimiento y pasión acerca del tema de los derechos humanos, quedamos agradecidos, sobre todo, porque no se trata sólo de un teórico en la materia, sino de un estudioso que durante décadas ha trabajado en pos del perfeccionamiento de las leyes, tratados y normatividad en la materia, tanto en el ámbito nacional, como en el internacional, en donde por cierto ha desempeñado la más alta responsabilidad en la Corte Interamericana de los Derechos Humanos.
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