México
Carreteras en la Costa requerirán 130 MDP
Las autoridades califican como verdaderamente graves las condiciones en que quedó la infraestructura en la zona, tras el paso del fenómeno
GUADALAJARA, JALISCO (15/OCT/2011).- Los daños a la infraestructura carretera estatal que ocasionó el huracán "Jova" en la Costa del Estado de Jalisco, requerirán de una inversión entre los 120 y los 130 millones de pesos para poder ser reparados, informó el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur), Sergio Carmona Ruvalcaba.
Las condiciones en las que el meteoro dejó a las vías de comunicación son "verdaderamente graves", advirtió el funcionario estatal, por lo que resulta indispensable la obtención de recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) del Gobierno federal para hacer frente a esta problemática.
"Hasta ayer en la noche todavía había varios lugares que no podíamos ni siquiera ingresar nosotros en la zona de Villa Purificación, estamos trabajando: el paso número uno es lograr la comunicación, lograr que pase la gente aunque sea lento y por caminos no tan bien restablecidos; el siguiente paso es cuantificar los daños y el tercero será conseguir los recursos para que la red vuelva a quedar en condiciones normales".
La zona siniestrada se encuentra desde Autlán a Cihuatlán, y de Puerto Vallarta a Cihuatlán, algunos desperfectos serán fáciles de componer, menciona, con bacheo o reencarpetamiento, pero en otros puntos tendrán que rehacerse por completo las vías de comunicación.
Debido a la magnitud de los daños puede darse por hecho que habrá recursos federales, expresó el secretario, lo que será muy importante pues el Gobierno estatal no cuenta por el momento con un presupuesto para responder a esta emergencia plenamente:
"No tenemos un sólo peso todavía para esto (la reconstrucción de las carreteras), estamos nosotros solicitando recursos para que con la maquinaria que estamos rentando podamos abrir paso y también con la propia de la Sedeur y de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) estemos trabajando para dar paso".
La Sedeur y la Secretaría General de Gobierno están trabajando ya para obtener la Declaratoria de Zona de Desastre Natural para los municipios que estuvieron al paso del huracán.
"Tenemos daños cuando menos en 40 o 50 puntos, algunos de menor cuantía, otros de mayor, sí tenemos zonas muy graves, como la zona entre Ciudad Guzmán y Autlán que tiene daños mucho muy graves, también la carretera de Acatlán a Guzmán, en dos o tres puntos vamos a tener que rehacer (los tramos), y tenemos la de Mascota a Las Palmas también tuvimos problemas".
Ante la posibilidad de que un nuevo huracán, "Irwin", llegue a las costas, las dependencias se preparan para ello: "Si nosotros volvemos tener un meteoro de las características del anterior el problema será igual de grave, estamos disponiendo maquinaria para que si hay cortes (en las vías) como los que ha venido existiendo con este pasado huracán, que podamos atender para que la gente tenga acceso (a sus comunidades)".
ficha técnica
Zona de desastre
La Secretaría de Gobernación emitió una Declaratoria de Desastre Natural para los municipios de Armería, Colima, Comala, Coquimatlán, Cuauhtémoc, Ixtlahuacán, Manzanillo, Minatitlán, Tecomán y Villa de Álvarez en el Estado de Colima.
Con esta medida darán acceso a los recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) para la atención de los daños sufridos el pasado 12 de octubre por el huracán “Jova”.
El Comité de Evaluación de Daños del Fonden evaluará los daños ocasionados en la infraestructura y cuantificará los recursos necesarios para su recuperación.
Habilitan la figura de “Apoyos Parciales Inmediatos”, a fin de atender de manera inmediata los aspectos prioritarios.
Limpieza y saneamiento de viviendas, centros de salud y calles afectadas, acciones de reparación de infraestructura de agua potable, alcantarillado y saneamiento tendrán prioridad.
Habilitación provisional de las vías primarias de comunicación en los mencionados municipios de esa Entidad, por lo que en los siguientes días el Gobierno de Colima presentará formalmente las acciones que ejecutará a través de esa figura.
C R Ó N I C A
El Rebalse, la necedad que imperó durante el meteoro
Antes muertos que fuera de su hogar, tal fue la ideología que mantuvieron las cerca de 100 personas que habitan el sitio conocido como El Rebalse, zona de grave afectación en el municipio de Cihuatlán que previo al huracán “Jova” fue advertida de la inminente afectación que dejaría a su paso el meteoro por costas jaliscienses.
Todos viven de los platanares, aquellos que desaparecieron los vientos de la tormenta en una sola madrugada. Su negación a abandonar la zona de desastre, aún después de que “Jova” devastara su hogar, fue rotunda. “Prefirieron quedarse ahí; nos gritaban que nomás les lleváramos víveres, que no saldrían”, narra uno de los miembros del grupo aerotáctico Fénix, de Protección Civil estatal, comisionado a buscar y trasladar a los tercos “rebalseros”.
Antes del impacto, la Unidad Municipal de Protección Civil, el Ayuntamiento de Cihuatlán, la propia Unidad Estatal e incluso el Ejército Mexicano acudieron a la zona costera para exhortar a los habitantes a desalojar de inmediato el lugar. El Rebalse se quedó; ninguno de sus vecinos dudó siquiera un momento en dar su brazo a torcer.
Hoy, los miembros de esa comunidad aún se encuentran arriba de sus casas, esperando a que llegue alguna autoridad que les arroje insumos. Abandonar a estas alturas no es una opción viable a este momento. Ya su decisión se tomó desde un principio, y no se quebrantaría una vez que los fuertes vientos y lluvia inundaran su modesto patrimonio.
“Los tratamos de convencer; no sirvió. Les pedimos en innumerables ocasiones que se salieran de ahí, que ‘Jova’ ya estaba cerca, pero nada de eso sirvió”.
Un inmenso árbol que ha estado ahí por más de un siglo es su fuente de subsistencia. No es broma, en realidad son innumerables las voces que lo aseguran: una soga atada al árbol y al cuerpo es su “blindaje” ante los embates naturales.
“Se trepan al árbol y se amarran entre sí; de verdad, y son todos, ¿eh? Niños, ancianos, señoras embarazadas. Todos, nos preguntaban: ‘¿Y usted me asegura que cuando llegue del albergue ahí van a estar mis vaquitas y mis cosas en casa?’ Cuando decíamos que no, ese era su pretexto para salir de ahí”.
Hoy, miles de hectáreas de plátano están dañadas a causa del meteoro que, con su categoría dos en la escala Saffir-Simpson, destrozó la Costa Sur de Jalisco. Su fuente de subsistencia se fue, recuperarla demorará “al menos un año”, según el presidente de Cihuatlán, Roberto Gallardo.
Todos vivieron la jornada entera expuestos a la fuerza del meteoro, y el acceso a dicha localidad a dos días de que “Jova” tocó tierra aún está impedido, al menos por la vía terrestre.
El precedente es que siempre lo han sabido llevar de esta manera; el “árbol de su vida” les mantiene seguros, aunque este fenómeno en específico sea el más grave desde 1959, según la gente longeva de Cihuatlán, y aunque exista el precedente de desaparecidos que han demandado asistencia de emergencia de los cuerpos de rescate en previos sucesos de menor intensidad.
Tal es la razón por la cual el saldo en la zona hasta el momento no se ha confirmado.
Alcalde reporta devastadas mil hectáreas de platanares
Un año para recuperar economía en Cihuatlán
No menos de un año demorará la recuperación económica en el municipio de Cihuatlán, luego de que el huracán “Jova” impactara las costas de esta Entidad.
Los habitantes que subsisten en su mayoría por el turismo o la venta de plátano, perdió al menos un millar de hectáreas de sus platanares.
Roberto Gallardo, alcalde de esa demarcación, acepta que el meteoro rebasó “por completo” la expectativa que se tenía de él. “En cuestión de campo se tardará en recuperar, fácil, entre un año y dos (...) el comercio está muy dañado. Es muy delicado lo que pasó en Cihuatlán; fue impresionante. Mucha gente que vivió el huracán del 59 dice que este fue mucho más grande que en aquella ocasión”.
Ya decenas de habitantes reportan que su situación laboral terminó cuando lograron llegar a sus fuentes de trabajo sólo para corroborar que no estaban más ahí.
Una vasta cantidad de cihuatlenses subsisten gracias al comercio de este fruto. Al no haber tal fuente de empleo, “Jova” impidió trabajar, asegura, a prácticamente 50% de esa demarcación.
José Luis Plancarte detalla que ya la venta es difícil, pues los compradores son por demás rigurosos en las exigencias de calidad. “Si ven un solo plátano que está rayadito, no lo quieren. Ahora imagínate si se los llevas llenos de lodo, aplastados”.
Las condiciones en las que el meteoro dejó a las vías de comunicación son "verdaderamente graves", advirtió el funcionario estatal, por lo que resulta indispensable la obtención de recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) del Gobierno federal para hacer frente a esta problemática.
"Hasta ayer en la noche todavía había varios lugares que no podíamos ni siquiera ingresar nosotros en la zona de Villa Purificación, estamos trabajando: el paso número uno es lograr la comunicación, lograr que pase la gente aunque sea lento y por caminos no tan bien restablecidos; el siguiente paso es cuantificar los daños y el tercero será conseguir los recursos para que la red vuelva a quedar en condiciones normales".
La zona siniestrada se encuentra desde Autlán a Cihuatlán, y de Puerto Vallarta a Cihuatlán, algunos desperfectos serán fáciles de componer, menciona, con bacheo o reencarpetamiento, pero en otros puntos tendrán que rehacerse por completo las vías de comunicación.
Debido a la magnitud de los daños puede darse por hecho que habrá recursos federales, expresó el secretario, lo que será muy importante pues el Gobierno estatal no cuenta por el momento con un presupuesto para responder a esta emergencia plenamente:
"No tenemos un sólo peso todavía para esto (la reconstrucción de las carreteras), estamos nosotros solicitando recursos para que con la maquinaria que estamos rentando podamos abrir paso y también con la propia de la Sedeur y de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) estemos trabajando para dar paso".
La Sedeur y la Secretaría General de Gobierno están trabajando ya para obtener la Declaratoria de Zona de Desastre Natural para los municipios que estuvieron al paso del huracán.
"Tenemos daños cuando menos en 40 o 50 puntos, algunos de menor cuantía, otros de mayor, sí tenemos zonas muy graves, como la zona entre Ciudad Guzmán y Autlán que tiene daños mucho muy graves, también la carretera de Acatlán a Guzmán, en dos o tres puntos vamos a tener que rehacer (los tramos), y tenemos la de Mascota a Las Palmas también tuvimos problemas".
Ante la posibilidad de que un nuevo huracán, "Irwin", llegue a las costas, las dependencias se preparan para ello: "Si nosotros volvemos tener un meteoro de las características del anterior el problema será igual de grave, estamos disponiendo maquinaria para que si hay cortes (en las vías) como los que ha venido existiendo con este pasado huracán, que podamos atender para que la gente tenga acceso (a sus comunidades)".
ficha técnica
Zona de desastre
La Secretaría de Gobernación emitió una Declaratoria de Desastre Natural para los municipios de Armería, Colima, Comala, Coquimatlán, Cuauhtémoc, Ixtlahuacán, Manzanillo, Minatitlán, Tecomán y Villa de Álvarez en el Estado de Colima.
Con esta medida darán acceso a los recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) para la atención de los daños sufridos el pasado 12 de octubre por el huracán “Jova”.
El Comité de Evaluación de Daños del Fonden evaluará los daños ocasionados en la infraestructura y cuantificará los recursos necesarios para su recuperación.
Habilitan la figura de “Apoyos Parciales Inmediatos”, a fin de atender de manera inmediata los aspectos prioritarios.
Limpieza y saneamiento de viviendas, centros de salud y calles afectadas, acciones de reparación de infraestructura de agua potable, alcantarillado y saneamiento tendrán prioridad.
Habilitación provisional de las vías primarias de comunicación en los mencionados municipios de esa Entidad, por lo que en los siguientes días el Gobierno de Colima presentará formalmente las acciones que ejecutará a través de esa figura.
C R Ó N I C A
El Rebalse, la necedad que imperó durante el meteoro
Antes muertos que fuera de su hogar, tal fue la ideología que mantuvieron las cerca de 100 personas que habitan el sitio conocido como El Rebalse, zona de grave afectación en el municipio de Cihuatlán que previo al huracán “Jova” fue advertida de la inminente afectación que dejaría a su paso el meteoro por costas jaliscienses.
Todos viven de los platanares, aquellos que desaparecieron los vientos de la tormenta en una sola madrugada. Su negación a abandonar la zona de desastre, aún después de que “Jova” devastara su hogar, fue rotunda. “Prefirieron quedarse ahí; nos gritaban que nomás les lleváramos víveres, que no saldrían”, narra uno de los miembros del grupo aerotáctico Fénix, de Protección Civil estatal, comisionado a buscar y trasladar a los tercos “rebalseros”.
Antes del impacto, la Unidad Municipal de Protección Civil, el Ayuntamiento de Cihuatlán, la propia Unidad Estatal e incluso el Ejército Mexicano acudieron a la zona costera para exhortar a los habitantes a desalojar de inmediato el lugar. El Rebalse se quedó; ninguno de sus vecinos dudó siquiera un momento en dar su brazo a torcer.
Hoy, los miembros de esa comunidad aún se encuentran arriba de sus casas, esperando a que llegue alguna autoridad que les arroje insumos. Abandonar a estas alturas no es una opción viable a este momento. Ya su decisión se tomó desde un principio, y no se quebrantaría una vez que los fuertes vientos y lluvia inundaran su modesto patrimonio.
“Los tratamos de convencer; no sirvió. Les pedimos en innumerables ocasiones que se salieran de ahí, que ‘Jova’ ya estaba cerca, pero nada de eso sirvió”.
Un inmenso árbol que ha estado ahí por más de un siglo es su fuente de subsistencia. No es broma, en realidad son innumerables las voces que lo aseguran: una soga atada al árbol y al cuerpo es su “blindaje” ante los embates naturales.
“Se trepan al árbol y se amarran entre sí; de verdad, y son todos, ¿eh? Niños, ancianos, señoras embarazadas. Todos, nos preguntaban: ‘¿Y usted me asegura que cuando llegue del albergue ahí van a estar mis vaquitas y mis cosas en casa?’ Cuando decíamos que no, ese era su pretexto para salir de ahí”.
Hoy, miles de hectáreas de plátano están dañadas a causa del meteoro que, con su categoría dos en la escala Saffir-Simpson, destrozó la Costa Sur de Jalisco. Su fuente de subsistencia se fue, recuperarla demorará “al menos un año”, según el presidente de Cihuatlán, Roberto Gallardo.
Todos vivieron la jornada entera expuestos a la fuerza del meteoro, y el acceso a dicha localidad a dos días de que “Jova” tocó tierra aún está impedido, al menos por la vía terrestre.
El precedente es que siempre lo han sabido llevar de esta manera; el “árbol de su vida” les mantiene seguros, aunque este fenómeno en específico sea el más grave desde 1959, según la gente longeva de Cihuatlán, y aunque exista el precedente de desaparecidos que han demandado asistencia de emergencia de los cuerpos de rescate en previos sucesos de menor intensidad.
Tal es la razón por la cual el saldo en la zona hasta el momento no se ha confirmado.
Alcalde reporta devastadas mil hectáreas de platanares
Un año para recuperar economía en Cihuatlán
No menos de un año demorará la recuperación económica en el municipio de Cihuatlán, luego de que el huracán “Jova” impactara las costas de esta Entidad.
Los habitantes que subsisten en su mayoría por el turismo o la venta de plátano, perdió al menos un millar de hectáreas de sus platanares.
Roberto Gallardo, alcalde de esa demarcación, acepta que el meteoro rebasó “por completo” la expectativa que se tenía de él. “En cuestión de campo se tardará en recuperar, fácil, entre un año y dos (...) el comercio está muy dañado. Es muy delicado lo que pasó en Cihuatlán; fue impresionante. Mucha gente que vivió el huracán del 59 dice que este fue mucho más grande que en aquella ocasión”.
Ya decenas de habitantes reportan que su situación laboral terminó cuando lograron llegar a sus fuentes de trabajo sólo para corroborar que no estaban más ahí.
Una vasta cantidad de cihuatlenses subsisten gracias al comercio de este fruto. Al no haber tal fuente de empleo, “Jova” impidió trabajar, asegura, a prácticamente 50% de esa demarcación.
José Luis Plancarte detalla que ya la venta es difícil, pues los compradores son por demás rigurosos en las exigencias de calidad. “Si ven un solo plátano que está rayadito, no lo quieren. Ahora imagínate si se los llevas llenos de lodo, aplastados”.