México
A México le urge la madre de todas las reformas, diagnostica De la Fuente
El psiquiatra opina que el combate al narcotráfico se debe hacer desde la salud pública, como lo plantea Barack Obama
GUADALAJARA, JALISCO (16/JUN/2010).- El ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (
UNAM) no teme hablar de un Estado desdibujado en México, un Estado que no protege, no convoca, no ilusiona; un Estado que perdió la visión sobre sí mismo con la llegada de una concepción empresarial a la política y que hoy, en las propias palabras del ex rector, necesita “la madre de todas las reformas”.
“Pasamos de un Estado obeso, sobrado, a un Estado vulnerable, frágil, sin una concepción clara sobre su papel. El problema de fondo en México es que hay que repensar el Estado, redefinirlo”, dice en un hotel de Guadalajara, con la fuerza de alguien que acaba de salir de una clase y no, como era el caso, de una comida con amigos de Jalisco.
De la Fuente es un hombre carismático. Habla con pasión del Estado mexicano y sus problemas, de la política del país, de la sociedad civil y sus fortalezas, de las ganas que tiene de ver una movilización ciudadana que alcance para decirle a los partidos lo que hace falta. Y lo que hace falta antes que otra cosa, considera, es la gran reforma del Estado.
“Yo estaría por la gran reforma. La madre de todas las reformas es la reforma del Estado”, asegura convencido, en el mismo tenor que muchos intelectuales mexicanos que han señalado que lo primero, lo más importante, es cambiarle el rostro a lo que hoy se llama Estado mexicano. Pero De la Fuente pone su propio énfasis y habla de cuatro puntos específicos, cuatro ejes mínimos: la seguridad, la provisión de servicios básicos, la soberanía nacional y la redistribución del ingreso.
Siendo médico de formación e investigador universitario en esa materia, no extraña que, aunque de todos los temas aborda su especificidad, haga especial énfasis en los enfoques de salud pública.
Obama, modelo a seguir
Por ejemplo, la seguridad y el problema del narcotráfico, dice, deben estar guiados por políticas de salud, en el mismo sentido en el que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha jalado la acción gubernamental: el lado del consumo.
“La reciente propuesta de Obama en materia de drogas es una gran oportunidad para que México redefina sus políticas”; apunta: “Hay una parte del combate al narcotráfico que debe expresarse en estas confrontaciones cruentas, pero hay otras que no se están instrumentando con la misma intensidad”.
El Gobierno de Estados Unidos invertirá en políticas de prevención y tratamiento para inhibir el consumo de drogas, mientras que en México el énfasis aún está puesto en el combate directo a los narcotraficantes.
Eso debe de cambiar, dice el investigador, como debe cambiar el hecho de que todo esté puesto en el mismo saco: los criminales y los consumidores, las drogas letales y las menos peligrosas.
En el tema de servicios básicos, quien fuera secretario de Salud en la administración de Ernesto Zedillo, se muestra un poco enojado: lo alarma la centralización de la salud, el limitado papel del seguro popular, la limitada cobertura de la seguridad social.
No es para menos. El 29% de los mexicanos, 12.5 millones, no tiene seguro social. En Jalisco, la proporción es mayor: cuatro de cada 10 según el INEGI y de acuerdo con De la Fuente, el escenario para los próximos años será negro: esa población que hoy es económicamente activa no tendrá un seguro para su vejez.
“Ha llegado el momento de universalizar los servicios de salud”, dice mientras refuerza su postura con movimientos de brazo, para convencer. ¿Cómo? Extendiendo el servicio para todos, quitando esa carga a los empresarios y trabajadores formales, juntando el dinero del seguro popular y el del ISSSTE y completando con una parte del Impuesto Sobre la Renta (ISR). Sí, ya lo había dicho. Pero como nadie escucha, tiene que volverlo a decir.
Ivabelle Arroyo
PARA SABER
Juan Ramón de la Fuente dicta hoy en Guadalajara una conferencia en la Cámara de Comercio y recibirá por la noche el Premio “Pedro Sarquís Merrewe” en Desarrollo Social por sus aportaciones a la salud, la educación y la ciencia.
PERFIL
Trayectoria universitaria
Juan Ramón de la Fuente
Médico cirujano, con especialidad en psiquiatría.
Secretario de Salud 1994-2000.
Ocho doctorados Honoris Causa.
Rector de la UNAM de 1999 a 2007.
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
No milita en ningún partido, pero en varias elecciones se le ha mencionado como “presidenciable”.
Presidente de la Asociación Internacional de Universidades y fue presidente de la Academia Nacional de Ciencias y de la de Medicina, entre otras múltiples tareas.
“Pasamos de un Estado obeso, sobrado, a un Estado vulnerable, frágil, sin una concepción clara sobre su papel. El problema de fondo en México es que hay que repensar el Estado, redefinirlo”, dice en un hotel de Guadalajara, con la fuerza de alguien que acaba de salir de una clase y no, como era el caso, de una comida con amigos de Jalisco.
De la Fuente es un hombre carismático. Habla con pasión del Estado mexicano y sus problemas, de la política del país, de la sociedad civil y sus fortalezas, de las ganas que tiene de ver una movilización ciudadana que alcance para decirle a los partidos lo que hace falta. Y lo que hace falta antes que otra cosa, considera, es la gran reforma del Estado.
“Yo estaría por la gran reforma. La madre de todas las reformas es la reforma del Estado”, asegura convencido, en el mismo tenor que muchos intelectuales mexicanos que han señalado que lo primero, lo más importante, es cambiarle el rostro a lo que hoy se llama Estado mexicano. Pero De la Fuente pone su propio énfasis y habla de cuatro puntos específicos, cuatro ejes mínimos: la seguridad, la provisión de servicios básicos, la soberanía nacional y la redistribución del ingreso.
Siendo médico de formación e investigador universitario en esa materia, no extraña que, aunque de todos los temas aborda su especificidad, haga especial énfasis en los enfoques de salud pública.
Obama, modelo a seguir
Por ejemplo, la seguridad y el problema del narcotráfico, dice, deben estar guiados por políticas de salud, en el mismo sentido en el que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha jalado la acción gubernamental: el lado del consumo.
“La reciente propuesta de Obama en materia de drogas es una gran oportunidad para que México redefina sus políticas”; apunta: “Hay una parte del combate al narcotráfico que debe expresarse en estas confrontaciones cruentas, pero hay otras que no se están instrumentando con la misma intensidad”.
El Gobierno de Estados Unidos invertirá en políticas de prevención y tratamiento para inhibir el consumo de drogas, mientras que en México el énfasis aún está puesto en el combate directo a los narcotraficantes.
Eso debe de cambiar, dice el investigador, como debe cambiar el hecho de que todo esté puesto en el mismo saco: los criminales y los consumidores, las drogas letales y las menos peligrosas.
En el tema de servicios básicos, quien fuera secretario de Salud en la administración de Ernesto Zedillo, se muestra un poco enojado: lo alarma la centralización de la salud, el limitado papel del seguro popular, la limitada cobertura de la seguridad social.
No es para menos. El 29% de los mexicanos, 12.5 millones, no tiene seguro social. En Jalisco, la proporción es mayor: cuatro de cada 10 según el INEGI y de acuerdo con De la Fuente, el escenario para los próximos años será negro: esa población que hoy es económicamente activa no tendrá un seguro para su vejez.
“Ha llegado el momento de universalizar los servicios de salud”, dice mientras refuerza su postura con movimientos de brazo, para convencer. ¿Cómo? Extendiendo el servicio para todos, quitando esa carga a los empresarios y trabajadores formales, juntando el dinero del seguro popular y el del ISSSTE y completando con una parte del Impuesto Sobre la Renta (ISR). Sí, ya lo había dicho. Pero como nadie escucha, tiene que volverlo a decir.
Ivabelle Arroyo
PARA SABER
Juan Ramón de la Fuente dicta hoy en Guadalajara una conferencia en la Cámara de Comercio y recibirá por la noche el Premio “Pedro Sarquís Merrewe” en Desarrollo Social por sus aportaciones a la salud, la educación y la ciencia.
PERFIL
Trayectoria universitaria
Juan Ramón de la Fuente
Médico cirujano, con especialidad en psiquiatría.
Secretario de Salud 1994-2000.
Ocho doctorados Honoris Causa.
Rector de la UNAM de 1999 a 2007.
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
No milita en ningún partido, pero en varias elecciones se le ha mencionado como “presidenciable”.
Presidente de la Asociación Internacional de Universidades y fue presidente de la Academia Nacional de Ciencias y de la de Medicina, entre otras múltiples tareas.
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